9- Bienvenido

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El melodioso canto de una mujer inundó mis oídos. Entre los arbustos se iso presente una figura. Mis párpados perdían fuerzas y mi cabeza al igual que el cuerpo no me respondían. Sólo me inundada en aquella voz que cantaba en un idioma desconocido.

¿Que sucede?

¿Que me sucede?

Aquella silueta se distinguía más, enseñando la figura de una muchacha. Me sostenía débilmente con mis brazos, aquellos que deseaban abandonar su acción. Todo mi ser se volvió un peso, uno del que no creía poder aguantar más y aún así...

Ahí estaba, con la mirada aterrada, con la mayor parte del cuerpo dormido y, con aquel ser frente a mí...

Sus ojos desprendían un brillo de color verde oscuro y no dejé pasar los pocos mechones claros que apenas se dejaban ver por la capucha oscura que llevaba puesta.

Era bastante tarde...

Ya me encontraba bajo su control....

No era de sorprender qué en algún momento no daría más y tal y como era de esperarse, caí inconsciente.

-¡mira lo que hiciste!- escuche un fuerte grito femenino y abrí los ojos repentinamente

Estaba agitado, mis piernas templaban y tenía la mirada gacha... Mis piernas... Estaban más cerca?

-tú pagarás eso! ¿¡Lo sabes verdad!?- otra vez, esa voz, la conozco, sí se de quien es- Mírame!- grito y un fuerte golpe en mi mejilla se presentó, me abofeteo?

Duele...

Duele...

Duele mucho...

Caí de espaldas al piso de mármol. Me quemaba, no dije nada.

-¿¡que sucede!?- resonó otra voz, una más madura y levanté la mirada con evidente miedo, ella? Pero que hace aquí, ¿Es ésto un sueño?... ¿O un viejo recuerdo?- cariño ya te dije que debes golpearlo en el sótano, no lo recuerdas?- preguntó la mayor para luego mostrar un rostro lleno de sorpresa, furia y horror- no! No! no! no!- dijo para tirarse de rodillas y acercarse al jarrón partido en pedazos encima del mármol- NOOOO!!! ¿¡Por qué!?

-f-fue un accidente... S-se resbaló- mencione con lágrimas en la cara por lo que se acercaba, mi corazón latia con fuerza, mi cabeza daba vueltas en busca de una buena respuesta o algo más- l-lo siento- dije soltando las lágrimas, permitiendolas cruzar mis mejillas como si de un río se tratase

-¿Tienes idea de lo que has echó? ¿Tienes idea de lo que has roto? ¿¡Miserable rata!?- preguntó levantando la mirada, fue en aquel entonces que sentí que me corrompia, en el que morí aún estando vivo.

Me falto el aire, era como si hubiera olvidado la simple acción de respirar.

-parece que la lista no ta alcanza, bien agregamos una más- pronunció con una voz de ultratumba mientras se levantaba lentamente- Sakura- pronunció a lo que la mencionada la miró con completa interrogación, confusión, interés y emoción-

-¿si?

-busca las cuerdas y llevalas al sótano- dijo con calma y la niña obedeció y se marchó- en cuánto a ti, me aseguraré de que nada vuelva a resbalarse de tus preciosas manos- dijo mirándome y acercándose rápidamente para tomar mi brazo fuertemente y arrastrarme hacia mi habitación, no importaba cuanto me resista solo causaba que me apretará aún más, en cuánto atravesamos la puerta me arrojó y choqué la cabeza contra el fierro de la cama generandome un dolor intenso, me sentí mareado y un sonido agudo e irritante me dejaba sordo. Apenas distinguí la presencia de la pelirosa al lado de la madre.

Un Mundo Fantástico (Sasunaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora