2 - Cambio

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[Reescrita]

Las vacaciones llegaron, en definitiva, ya tengo 18 años. Que no ingresare a la universidad era un hecho.

Actualmente caminábamos por el shopping para comprar los regalos de sakura ya que dentro de algunos días llegaría su cumpleaños, sus padres realmente tenían bastante dinero, lo suficiente como para comprarle todos los años treinta regalos, era increíble, era una lástima que no se molestaban conmigo.

Entramos a una tienda de ropa, la pelirosa andaba de aquí a allá con distintos atuendos, yo solo miraba, cuando de repente pasé por un espejo lo que llamó mi atención fue que no encontraba mi reflejo en él, en lo que se suponía debería estar yo, solo se hallaba un pequeño zorro sentado de orejas negras al igual que el borde de sus ojos, curioso me acerqué más, y el animal copio mi acción.

Antes de que pudiera sorprenderme fui empujado y caí al piso, fue sakura.

-¿¡Pero que haces idiota!? ¡Salte de aquí! El espejo no esta hecho para que espantapájaros se miren en él- Se estaba mirando en el espejo con una vestimenta nueva.

Fruncí el ceño, ella no fue conciente de que tal acto llamó la atención de algunos clientes, el padre se le acercó unos segundos y le murmuro algo, de seguro, me levanté y estaba por darme la vuelta y alejarme pero recorde al pequeño canino en el espejo y me pregunté si solo fue mi imaginación.

-¡Totalmente hermosa!- Se elogiaba ella y sentí asco.

Se acercó más al espejo apoyando su mano en esta para hacer una pose, de repente...

Me paralice, un barzo plateado brillante salió del espejo y tomó su muñeca- ¡Aaaaah!- Gritó de miedo tratando de soltarse pero le era imposible yo por tal grito había vuelto a caer al suelo, no estaba asustado más bien sorprendido.

Los padres llegaron al igual que la gente rodeandola, todos preocupados, antes de que pase eso, aquella mano volvió a meterse en el espejo y sakura cayó al suelo, su piel estaba pálida, temblaba y pequeñas lágrimas se deslizaban por sus mejillas.

- ¿¡Que sucede amor!? ¿¡Que paso!?- Preguntó su madre quien se abalanzó a ella en un abrazo.

Yo me le quedé viendo, no podía creer lo que había visto, estaba confundido y mi mente en blanco, contemplé como sucedía algo... fantástico.

Mebuki se había separado de ella lanzando un grito, su cara reflejaba horror.

- ¿¡Mamá!? ¿¡Que sucede!?- Preguntó alterada la pelirosa, noté el cabello de lo que se suponía era de mi hermanastra, se le empezó a caer, su frente creció, y definitivamente su pecho se había vuelto polvo.

Quedé helado, la gente alrededor se apartó, algunos empezaron a sacarle fotos, Kisashi notó eso y enfadado alzó a su hija quien quedo en shock mirándose en el espejo, y Mebuki me agarró fuertemente de la muñeca y comenzó a arrastrarme sin darme la oportunidad de procesar lo ocurrido.

Solo pude mantenerme callado y permitirme ser arrastrado, Sakura lloraba en el cuello de Kisashi, mi muñeca comenzó a arderme y no sentía mi mano, la señora Haruno me apretaba bastante fuerte. Mientras avazabamos todos nos miraban raro, bajé mi rostro pero no por ellos... No quería que la familia Haruno viera mi retorcida sonrisa.

Cuando llegamos a casa Mebuki me metió en el sótano y cerró la puerta con llave. Sin más, me senté a pensar lo sucedido, luego de aproximadamente dos horas, la puerta se volvió a abrir.

Alguien entró y me tomó del cabello, cuando salimos quede sorprendido, la pelirosa realmente tuvo un cambio de aspecto, su cabello estaba corto y en puntas, desprolijo, sus cachetes estaban rojos y sus ojos hinchados enseñaban rastros de lágrimas, su frente había crecido parecía un extraterrestre, contuve mi risa por el comentario. Y su pecho, bueno esta normal.

Llegamos al living y me arrojó al piso, delante de la mesa- ¡Diles!- me quedé callado, mirándola, los padres estaban en los sillones y ella parecía a punto de estallar.

-¡Diles!- Repitió la pelirosa, bajé la mirada pero ella la levantó amarrándome nuevamente el pelo- ¡No bajes la mirada! ¡Diles lo que pasó!- Repetia, sus cejas eatanan fruncidas y apretaba los dientes al punto de rechinarlos, sus padres me miraron serios hasta que el mayor habló.

-¿¡Qué fue lo que pasó!?- Preguntó él, tragué saliva y respondí.

-No lo sé- Claro que iba a mentir, ni que fuera a perder la oportunidad de que ésta estúpida quede en ridículo, además, yo tampoco tenía claro que merengues fue lo que sucedió.

-¡Mientes!-Gritó la pelirosa y se abalanzo sobre mi ahorcandome con su manos en mi cuello.

-Hija no hay tiempo para eso- Dijo la madre con una tranquila sonrisa - Déjalo hablar- Habló pero esta vez no era una voz relajante, serena y pacífica, esta era una sonrisa, pero de aquellas que usas para no matar con la miarada.

La pelirosa se separó con una cara seria y la mujer volvió a hablar

-Dinos Naruto ¿Qué fue lo que viste?- Preguntó con una voz de ultratumba, lo suficiente como para hacer temblar a una persona pero yo no sentí ni un escalofrío, suspiré, ésto ya lo había visto varias veces no la miré a los ojos pero hablé.

-Solo... Vi a Sakura mirándose en el espejo cuando empezó a gritar de repen- No pude continuar, tenia a mi hermanastra golpeandome el rostro, escupi sangre.

-¡Sakura! ¿Que haces? Ya hablamos, en la cara no cariño- La "regañó" la mamá y luego susurro- La alfombra era nueva- El padre se acercó nos separó, tomó mi cabello y una vez más terminé en el sótano pero no sin antes presenciar algunas cosas

-¡Sakura calmate!- Habló la madre y la sujeto de los hombros, ésta se safo del agarré y tiro algunas cosas al suelo.

-¡Mamá! ¡En estas vacaciones vuelve de su viaje Uchiha Sasuke! ¡Estoy plana! Mi cabello es un asco y mi frente... ¡Oh Dios! ¡Por que me tiene que pasar ésto ahora!- Tiró algunas cosas al suelo, en ello, una jarra, fotos y otras.

-Sakura, no estas plana, solo tienes... poco tributo ¡Pero no es como si no tuvieses nada! ¡Arreglaremos tu cabello! Y tu frente...

Todo el día hablaron del tema, acordaron que al día siguiente irían urgente al hospital, policía y salón de belleza. Al parecer un chico de su edad volvería a la ciudad para pasar sus vacaciones y según ella es "Su preciada alma gemela", pobre del muchacho cuando choque con ella. Según lo que escuche por el eco de la casa es que no me dejaran salir hasta que yo decida decir la "Verdad" según dice sakura.

Máximo pasaré tres semanas encerrado. Oh y los vídeos en la tienda ya andan por YouTube, y la gente cercana habla de ello, "Niña causando alboroto", "Atacó a un muchacho y enloquece ", "Niña alucina y llora en una tienda" Así mas o menos eran.

¿Cómo lo sé? Hace unos años me las arreglé para tomar el celular del señor Haruno y que no supieran que fui yo. Aunque lamentablemente no tenía cargador, solo hay dos en la casa, si uno desaparece ya sabrán quien lo tomó así que su uso es muy escaso.

Todavía no sabía exactamente que fue lo que pasó,  y simplemente lo declaré como magia, agradecí las acciones de lo que sea que sea aquel ser.

Un Mundo Fantástico (Sasunaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora