Capitulo 3

86 2 0
                                    

Me despierta suavemente una carícia. Por un momento pienso que se trata de Peeta, pero no. Es Sam. 

-Te hecho de menos.- me susurra.-

-Y yo... Me alegro de que estés bien.-digo, refiriéndome a que me alegro de que no esté en el Capitolio con Peeta, que me alegro de tenerlo aquí conmigo.-

-Haylen esta...en...en el Capitolio...-dice Sam, casi sin voz. Cada vez habla más bajo.-

-Ya...Te prometo que haré cualquier cosa para sacarlos. A ella y a Peeta.- le digo, aunque no estoy segura de que pueda hacerlo.-

Nos quedamos unos minutos en silencio, hasta que Sam vuelve a hablarme.

-He venido para decirte que la Presidenta Alma Coin ha accedido a llevarte al Distrito 12. Para que lo veas, junto con Katniss. Es importante para ella, y también para tí, ya que allí murió Jai.- dice secamente. Creo que se da cuenta de la brusquedad de sus palabras e intenta arreglarlo.- Lo siento...

-No pasa nada. Iré con Katniss.

-Bien, iré con vosotras. Vístete, te están esperando.

-De acuerdo.

Sam sale de la habitación y yo me visto con uno de esos monos de color gris que cubren absolutamente todo el cuerpo menos la cabeza, las manos y los pies. Mis zapatos son unas simples botas negras. Pedí las más cómodas posibles. Salgo de mi habitación y me dirijo a la sala de los aereodeslizadores. Allí tienen guardadas las armas y docenas de aereodeslizadores. Son bastante útiles. Me acerco uno de ellos, donde están Sam, Katniss, Gale, el soldado Boggs y otros soldados.

-¿Lista?- me pregunta Katniss.-

-Sí. ¿Tu lo estás?

No me responde. Supongo que la respuesta es obvia. Me han contado que el Distrito 12 está destruido, totalmente. Sé que para mí es duro, pero para ella debe de serlo mucho más. Todo su hogar, que cuando tenía un año también era el mío, totalmente destruído. Ni si quiera he tenido la oportunidad de verlo. Al menos no en condiciones. Subimos al aereodeslizador y nos sentamos en las sillas. Es uno como los que usábamos en los juegos para transportarnos hasta la arena. El viaje se me hace largo. Katniss no habla, yo tampoco. Sam, en cambio, habla con Boggs y otros soldados. Cuando oigo el fuerte ruído de los motores sé que estamos aterrando. Ya hemos llegado. Miro por una de las ventanas, y todo lo que veo es ruina. Las puertas del aereodeslizador se abren y una rampa que conduce hasta el exterior se despliega.

-¿Quereis que vayamos con vosotros?- dice Sam.-

-No.- respondemos Katniss y yo, casi al unísono.-

-De acuerdo. Id con cuidado y no os alejéis demasiado.- dice Boggs.-

Asiento. Bajamos la rampa. Y al fin estoy aquí, en el 12. Pisando el suelo lleno de trozos de madera, muebles de las casas, tejados...El aereodeslizador se vuelve a encender y se aleja de nosotras despacio. Cuando volvamos aquí, bajaran a buscarnos. De momento nos vigilaran desde arriba. Katniss mira a su alrededor. Se tapa la boca con la mano. No encuentro el por que hasta que miro hacia la dirección en la que ella lo hace. El Edificio De Justícia, totalmente en ruinas. Aquí todo parece tan muerto... Katniss observa en Edificio. Parece estar en estado de shock, o algo parecido, así que me preocupo y le tiro de la manga. Ella me mira disgustada, aunque de sus ojos no sale ni una sola lágrima. És una persona fuerte, igual que yo. En ciertas cosas puedo ver un parecido entre ella y yo. Avanzamos entre las ruinas sin decir nada. Cuando pongo el pie en el suelo noto un ruido. Me agacho para ver de que se trata, y me quedo paralizada. Una foto de una niña y su madre. La niña la abraza. La foto esta destrozada, quemada y llena de arañazos. Pero en los ojos de la niña puedo ver todo el amor que sentía en aquel momento. Sin embargo, seguramente esté muerta. Otro escalofrío me recorre el cuerpo. Cojo la foto y me la guardo en una especie de bolso de cuero que he traido. Katniss ha seguido avanzando pero se ha parado. Me acerco a ella. Entonces lo veo. Delante nuestro se encuentra un cementerio de huesos de la gente que hace unas semanas vivía aquí. Parece un mar de cadáveres. Las primeras lágrimas se escapan de los ojos de Katniss. Ella no se molesta en esconderlas. 

-Katniss.- le digo.- Vámonos de aquí.

-Sí. Eso será lo mejor. 

Llegamos hasta la Aldea de Los Vencedores, donde ha estado viviendo Katniss este último año. Katniss entra en su casa, pero yo la espero fuera. Se pasa dentro una media hora, más o menos. Cuando sale y empezamos a caminar oigo un ruído como de un...gato.

-¿Que llevas en la bolsa?- le digo ríendo.- ¿Un gato?

-¿Quieres verlo?- me dice. Se ríe. Abre la bolsa y saca a un gato.- Este es Buttercup. És el gato de mi hermana.

-Me gusta. Es muy bonito.- le sonrío.-

-Yo lo odio. Es un gato estúpido.- Katniss se ríe y yo hago lo mismo.

Volvemos hasta el Edificio De Justícia. El aereodeslizador nos espera allí. Subimos y nos sentamos en los asientos.

-¿Como ha ido?- pregunta Sam.-

-Genial- responde sarcásticamente Katniss.-

El resto del viaje nos lo pasamos sin decir una palabra. Estamos demasiado concentradas pensando en todo lo que acabamos de ver. Y creo que después de ver esto aún odio más al Capitolio. A Snow. Y estoy decidida a vengarme, a hacer que la gente luche. Estoy decidida a ser su sinsajo.

Los Juegos Del Hambre: New Story 2 (Mockingjay, Sinsajo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora