Katniss y yo nos colocamos en esa extraña "plataforma". Empezamos a decir las frases, pero tengo la sensación de que cada vez lo hacemos peor. La sala es completamente blanca, no hay fondo, pero Plutarch dice que luego, con el ordenador, lo retocarán todo y pondrán los efectos para que parezca que estamos en el 12.
-Estamos refugiadas.- empieza Katniss. Habla lentamente, de una manera innatural. Parece que esté recitando un poema, no es creíble.- Estamos vivas.
-¡Con más ánimos!- grita Finnick.- Así no se lo creerá nadie.
-Conseguimos escapar, porque somos más fuertes. Más fuertes que ellos.- Katniss grita un poco más que antes. Aún así, su actuación sigue siento penosa.- Más fuertes que ellos.
En ese momento me bloqueo. Me quedo callada y no sé que decir.
-Kimberly.- dice Finn.- Te toca.
-Lo siento.- digo.-
-No pasa nada, luego lo cortamos.- me dice Plutarch.
-El sinsajo está vivo.- esmpiezo a gritar, y me doy cuenta de que mi actuación és aún más penosa que la de Katniss.- Tenemos que escuchar su voz. Una sola voz que tiene mucho más poder que el poder del Capitolio. Y mientras el sinsajo esté vivo, la revolución continuará.
Miro el panorama de la situación. Finnick se ríe, mientras que Sam parece avergonzado. Effie está preocupada, al igual que la presidenta Alma Coin. Y Plutarch Heavensbee se está tapando la cara con una mano mientras dice palabras que no llego a oír. Finalmente entiendo que Katniss y yo no valemos para esto. Plutarch nos llama y Katniss y yo vamos hacia donde está él.
-Venid al cuartel...tenemos que hablar de esto.
-Está bien.- dice Katniss.-
Nos dirigimos al cuartel general aún vestidas de sinsajo, con Katniss, Plutarch, Alma Coin, Effie y Sally Trinket, que al parecer también estaba aquí. Entramos y nos encontramos a Haymitch. Nos sentamos en las sillas mientras Haymitch enciende una pantalla digital.
-¿Donde has estado los últimos días, Haymitch?- dice Katniss, poco preocupada.-
-En un Centro de Desintoxicación. No permiten bebidas alcohólicas, así que las colé, pero cuando se enteraron me enviaron a esa prisión sin alcohol. Ahora estoy totalmente sobrio.- dice, mientras sonríe.-
-La grabación ha sido un fracaso.- dice Plutarch.- No podemos retransmitir eso.
Katniss y yo nos miramos avergonzadas. No creo que lo hagamos tan mal. Haymitch borra algo que había escrito en la pantalla digital.
-Espero que no fuera importante.- dice.-
-No, claro...- dice Alma.-
-Vamos a ver, pensad en Katniss y Kimberly. - dice Haymitch, con una expresión que parece de concentración.- Pensad en aquellos momentos en los que hicieron algo bonito sin que nadie se lo dijera.
Effie y Sally son las primeras en levantar la mano.
-Cuando Katniss se ofreció voluntaria para salvar a su hermana. Y cuando Kimberly se ofreció para salvar a su madre.- dice Effie. La miro atentamente. Effie no deja de sonreír y de mirarnos amablemente.-
-Está bien.- dice Haymitch, y apunta en la pizarra: Voluntarias para salvar a su família.- ¿Algo más?
-Cuando Katniss le cantó esa canción a Rue.- dice Effie. Haymitch, al igual que antes, escribe en la pizarra: Canción para Rue.
-Cuando Kimberly lo dió todo por salvar a Peeta en la arena sin conocer el plan.- dice Sally. Pienso en Peeta. En sus enormes ojos y su sonrisa. Esa sonrisa que me hipnotizó desde el primer día en que la ví. Él siempre trató de protegerme. Estaba dispuesto a morir por mí. Y yo no traté de salvarlo en el último momento, cuando más falta le hacia. Solo destruí la estúpida arena. No fuí con él, no supe si estaba bien. Y lo tienen en el Capitolio. Lo estarán torturando, y no sé por cuanto tiempo estará vivo. Ni si quiera sé si lo sigue estando.
-Me parece que tengo la solución perfecta para nuestro pequeño problema de estas dos chicas y su incompatibilidad con las cámaras. Irán a uno de los Distritos, a uno de los más seguros, pero donde la gente también haga levantamientos. Cuando vean lo que pasa allí, soltarán toda su rabia con palabras. Ellas son así. Pero en ese momento habrá un equipo de cámaras que los grabará y lo retransmitirá todo al Capitolio y a los Distritos.- propone Haymitch.-
-Me parece bien.- dice Alma Coin.-
-Pues decidido. Iréis al Distrito 8. Es el menos peligroso.- dice Plutarch.
- De acuerdo.- digo.-
-A mi también me parece bien.- dice Katniss.-
Después de la charla en el cuartel general, nos vamos cada uno a su habitación. Mañana tendremos que ir al Distrito 8. Me pongo mi camisón y echo en la cama. Estoy preocupada, nerviosa. No por el equipo de grabación. Tampoco por ir al Distrito 8. Es por otra cosa. Y es que no dejo de pensar en ello. En Peeta. Tengo la sensación de que no está bien. Y, realmente, lo sé. Sé que no está seguro en el Capitolio. Pero también sé que no puedo hacer nada para sacarlo. Me quedo dormida.
Tengo una pesadilla. Mis ojos se abren rápidamente. Me despierto gritando y Peeta entra por la puerta.
-¿Que pasa?- me pregunta preocupado.
-Nada.- le digo, aliviada.- Solo otra pesadilla.
-Tranquila, yo también las tengo.- Peeta se dispone a salir por la puerta.-
-Peeta.- susurro.- ¿Te quedas conmigo?
-Sí.- dice bajo. Y se acerca a mí, se acuesta a mi lado en la cama y me acurruca entre sus brazos. Me abraza y me besa la frente.
-Mis pesadillas suelen ser sobre perderte.- me dice.- Así que se me pasa cuando me doy cuenta de que estás a mi lado
Me despierto bruscamente. Una pesadilla dentro de un sueño. Genial... Últimamente siempre sueño con Peeta. Pero esa última frase del sueño ha hecho que me despierte rápidamente. Son las mismas palabras que él me dijo una vez en la arena. A veces no puedo creer que lo abrazara de verdad. Ahora lo daría todo por estar entre sus brazos.
-Kim.- oigo la voz de Sam, y como llama a la puerta.- Haymitch nos llama. El equipo de grabación nos espera en el aereodeslizador.
ESTÁS LEYENDO
Los Juegos Del Hambre: New Story 2 (Mockingjay, Sinsajo)
Science FictionKimberly ha sobrevivido a los juegos, de nuevo. Ella siempre pensó que lo peor que le ha ocurrido han sido los juegos, pero se da cuenta de que estaba equivocada. Tras luchar en la arena, salvar todo lo que quiere, Kimberly tendrá que luchar en una...