Haikyuu!! en Hogwarts

Visitas interesantes

Que había algo entre el Profesor Ukai y el Profesor Takeda era algo que se sabía en Hogwarts. Mejor dicho, no es que se supiera, se suponía por lo mucho que estos dos habían interactuado.

Todo empezó cuando los vieron irse a Hogsmade juntos y el rumor inicio de manera débil, pero hizo que montones de miradas se posasen en los movimientos de ambos profesores.

Los alumnos lo sospechaban pero los docentes lo confirmaban, ambos estaban saliendo y a pesar de querer ser discretos, a veces se les escapaban cosas...

Ukai se encontraba en el despacho de Takeda, lo tenía arrinconado en escritorio. Lo besaba con pasión, mientras que sus manos se adentraban en el pantalón desabrochado del contrario.

Pequeños jadeos salían de la boca de Takeda cuando las manos del rubio teñido rozaban su miembro.

Normalmente le tenía tremendamente prohibido a Ukai que viniese a molestarlo mientras está en su despacho, porque tenía asegurado de que acabaría empotrado en el escritorio. Y es que Ukai tenía un apetito sexual voraz. Pero esta vez se había dejado convencer por su pareja de que hacerlo en su despacho le daba un toque morboso, ya que en cualquier momento los alumnos podían tocar a la puerta.

Y eso es lo que pasó en ese mismo instante, unos golpes en la puerta hicieron entrar en pánico a ambos.

-¿Profesor? Soy Yachi le vengo a entregar la redacción que me pidió sobre la Revolución de los duendes- habló la voz detrás de la puerta.

Los dos adultos se miraron, y sin pensárselo mucho Takeda metió a Ukai bajo su escritorio, se sentó en su silla, desparramo algunos papeles por la mesa, cogió la pluma y el primer examen.

-Adelante Yachi

Pero por la puerta entraron media docena de Hufflepuffs.

-Profesor, nos tiene que ayudar con este ejercicio que nos puso la semana pasada- dijo uno.

-Ningún problema, yo os ayudo- Dijo con una sonrisa.

Pero allí se dio cuenta de su error cuando noto como algo se apoyaba encima de su miembro. Con disimulo miro y vio como Ukai apoyaba su mejilla en su miembro.

-Mejor que os sentéis chicos. - dijo con rapidez el profesor.

Los chicos se sentaron en las sillas que aparecieron delante del escritorio y empezaron a preguntar.

El pobre profesor respondía como podía, ya que Ukai había decidido ir más allá y saco el miembro erecto de los calzoncillos de Takeda y lo empezó a lamer, haciendo que el pobre profesor pegara un respingo en su silla.

-¿Se encuentra bien profesor? - Preguntó una alumna de Hufflepuff.

-Si, si, solo me he mordido la lengua-

Continuó hablando por media hora, media hora de sufrimiento, hasta que todas las dudas fueron resueltas.

-Muchas gracias profesor Takeda- Dijeron todos los alumnos antes de salir del despacho.

Cuando todos estuvieron fuera y la puerta estuvo bien cerrada Takeda se relajó y dejó salir todo lo que había estado conteniendo, corriéndose en la boca de Ukai.

-Eso ha estado bien- dijo el rubio luego de limpiarse.- Espero que ahora me permita divertirme con usted, profesor.

-No hables de esa manera por favor... - rogó con la voz un poco ida por el esfuerzo.

Pero Ukai no le dejo mucha tregua al pobre castaño, quien se encontró sentado encima de prominente erección que tenía el contrario. Un pequeño gemido se escapó de sus labios.