Kisses At The Night (Brahms Heelshire y tú)

At the begining

Martes 21 de Junio del 2020

Estaba al borde de explotarme un pulmón, llevaba corriendo sin descanso por pasadizos en exceso oscuros, apestosos a humedad y siendo el ejemplo más claro de laberintos que había podido ver. Aún podía oír esos pesados pero ágiles, terriblemente ágiles, pasos tras de mi. Pero por primera vez en mi miserable vida tuve un golpe de suerte; reconocí uno de los pasillo. Esto fue porque a pesar de la adrenalina seguía odiando los seres como la rata muerta que había en la entrada de este corredor.

Conseguí salir acabando dentro de el pequeño vestidor que había sido el refugio de mi maleta en el breve mes y medio que había pasado aquí. Corrí fuera de esa estancia y del cuarto al que pertenecía para dirigirme por al fin un pasillo iluminado que finalizaba en una maldita escalera diseñada por mínimo un demente. Pensaréis que es exagerado ese adjetivo pero no, fue de antemano, porque acabe cayendo en esa absurda estructura. De verdad que odio a quien fuese el genio arquitectónico, o genia, igual te odio.

En este mal obrado tropiezo caí por mi detestada enemiga cuando en parte de mi descenso recordé como llegue a esta mansión...

Miércoles 6 de Mayo del 2020

Había caminado durante horas en medio de un bosque en un país que no conocía más que por algunas series, además había comprobado que el nivel de inglés que me enseñaron en el internado cristiano era de lo más penoso, apenas podía pedir algo en los puestos callejeros. Al final pillaba algo pero siempre acompañado de una mirada despectiva por no pronunciar tan exquisitamente como ellos lo hacían. ¡Perdoneme señor que me dio el Wok n'roll noodles en el Camden Market por no decir "a bottle of water" correctamente!

Antes de este paseo campestre había llegado un tiempo atrás a un pueblo muy pintoresco, típico de revista. Habían campos de flores al rededor con árboles enormes, en el centro del pueblo habían tiendas la mar de antiguas pero con ropa relativamente moderna. Unos restaurantes con estampados florales en las sillas victorianas, mesas redondas y limpias que desprendía un olor a mermelada de frambuesas.

A pesar de lo lindo que me pareció esta "villa" decidí adentrarme a donde las malezas se hacían mas frondosas.
Estuve andando días sobreviviendo de sobras hasta que encontré un sendero de tierra abandonado, ¿Cómo supe a pesar de la maleza? Habían unas rocas marcadas que indicaban el caminó. Como me costaba reconocer que me había perdido decidí seguir ese camino, llegando a una oxidada verja que me vi obligada a saltar para continuar mi camino.

Llegue a una casa victoriana, mejor dicho, mansión, enorme mansión olvidada. Vi que estaba cubierta de maleza, pero igual pude distinguir una sombra en uno de los tejados más elevados, pensé que podrían haber abandonado el lugar tras un incendio, cosa que no me detuvo a allanar este terreno. No me juzguen, llevaba días andando, no podía más.

No tuve que forzar una venta, sólo con casi dislocarme el hombro contra la enorme puerta pude entrar. Terrible fue el olor a abandonó, una mezcla de tierra y polvo, que invadió mi nariz. La mansión tuvo que ser hermosa pero actualmente no era mucho menos que el fantasma del pasado, la alfombra a cada paso soltaba nubes blancas, el suelo se tomaba la molestia de avisar que estaba en avanzada edad chirriando a cada movimiento que hacía. Paredes que estaban revestidas con un roto papel, aunque con lo extravagante que es el estampado creo que mejor así. Muebles victorianos siendo cubiertos por la mugre como si esta tratara de preservarlos bajo de si misma. 

Al final del pasillo estaban unas escaleras que nada más verlas me espantaron, ¿Por qué? Simplemente no me gustaba la colocación, un tock en mi no estaba contento. Decidí subir por ellas a pesar del desasosiego al segundo piso, en verdad todo era grande pero, sorprendentemente, no habían muchas habitaciones. Me aventure a abrir una de las puestas encontrándome con una sorpresa; estaba absolutamente cuidada.

Tal vez si no fuese tan maniática no me hubiera percatado de las esquinas mal barridas, pero a contraste con lo que vi antes estaba muy bien. Por los juguetes en perfecto orden sobre la cómoda intuí que ese cuarto fue de un infante, lo cual me suscito a la siguiente pregunta: ¿Era un niño quien estaba aquí u otro ser que había decidido instalarse en esta zona?
De ambas maneras era inquietante pero estaba dispuesta a compartir mi delito, no era la primera vez que un desconocido y yo eramos ocupas juntos.

Salí de ese cuarto ya con dueño para buscar uno para mi, así que me dirigí justo al  del frente, si alguien salia corriendo así se oía mejor. Abrí para encontrarme un cuarto, ¿limpio? Si, más o menos, ya había polvo llenando los muebles, además de que había una cosa en la cama. Supe que no era una persona porque no se movía, pero, eso al cabo de razonar me hizo pensar en que esa forma podía ser un cadáver, después de todo, estaba cubierta por las cobijas. Con el mayor terror del mundo me acerque para levantar lentamente las gruesas sabanas encontrandome con... Una muñeca. Inmediatamente deje eso ahí y me fui a buscar otro lugar.

Había un baño que daba pena saber que su color había sido blanco y ahora estaba marrón con tonos verdes, por no decir del olor fétido de no haberlo limpiado en mucho. La siguiente estancia no la pude abrir, volví a dañar mi hombro pero esta vez no hubo manera. Pensé en dormir fuera, pero en eso un trueno se oyó, así que no, no pensaba volver a dormir bajo una tormenta. Cogí el valor del enfado que me daba haberme hecho daño en el hombro por segunda vez para nada y me dirigí al cuarto de la pepona aquella. Entre desafiante, la verdad es que dolor si me dio coraje, pero seguido me avergoncé, estaba enfrentandome con un objeto inanimado, no es Anabelle, eso lo confirme al entrar de una patada con el objetivo de cogerla y tirarla lo más lejos posible. Cuando hice esa acción pude ver que era una especie de muñeca de trapo enorme y marrón que vestía un vestido coral además de tener un cabello más largo que el mío. Definitivamente eso no iba a estar cerca se mi, la cogí por un "pie" y la avente al cuarto del "niño".

Todo muy absurdo pero dio miedo...

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Hola personitas lindas, este es mi primer capítulo de este Brahms x tn, es una introducción para que vayan entrando en la historia. Perdonen que Bramsy solo saliera al principio y de manera tan escueta, pero es solo el inició, luego y más pronto que tarde habrá Heelshire para todos/as.

Espero que les guste, comenten lo que quieran, gracias ~<3

Atte: Hope