CAPITULO 2

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Desde ese pequeño desliz, me dio la impresión de que Elías comenzó a evitarme, ¿Fue demasiado para sus habilidades sociales? Caminaba por ahí, lo veía a la distancia y cuando me acercaba... desaparecía, como si la tierra se lo hubiera tragado.

Por otro lado, el insoportable de Ray, buscándome; un patán cualquiera que no sabe perder, supongo que de esa manera se sentía Elías, ¿Cómo una chica como ella se va a acercar a mí? Mmmh, demasiado directa, creo.

Sentada en la cafetería, tenía un terrible dolor de cabeza, intentaba recordar la fecha en la que "conocí" oficialmente a Elías, pero pues, son de esas condiciones espontáneas, ¿Quién se acuerda de ello?

—Lo estoy haciendo mal... esto se está sintiendo forzado, ¿Cuál es mi objetivo? ¿No es más sencillo sólo negar aquella relación?, quién sabe, quizá él no termine muerto así...—Dije en voz alta.

—Vaya, ¿Estás escribiendo una novela de ficción?, o a qué se deben esos comentarios sospechosos...—Ximena acaba de llegar a sentarse, confundida. —Aunque me sorprende Anny, no sabía que tú escribías.

—Sí, de hecho, tengo una problemática con la protagonista. Verás, resulta que ella viene del futuro, o algo así, no preguntes cómo lo logró, ni yo sé. Resulta que, el hombre con el que iba a compartir su vida, al que ama profundamente, aunque la haya traicionado, estudiaba en su misma escuela. Su relación terminó mal, pero ella cree que, puede cambiar eso en el pasado al que regresó, justo en sus años de preparatoria.

—Vaya, suena bastante entretenido, Anny.—Sonrió, estaba interesada.

—Jeje, gracias Ximena. Ahora, la problemática es la siguiente: ella intenta acercarse a él, pero, para esas fechas ellos no eran ni amigos, y sale huyendo. —Suspiré.—¿Cómo le puede hacer para ser más cercana y que no se fuerce la relación?

—¿Ellos, estudian en la misma escuela?

—Sí

—¿Tienen clases extracurriculares, un taller o algo en esa escuela?

¡Eso es! Desde que lo conozco destaca en pintura, estuvo los 3 años en ese taller, seguro ahí lo pesco sin que huya. ¡Pero hoy terminan los registros a los talleres!

—¡Eres un genio, Ximena! —La abracé y salí corriendo, una excelente idea, no esperaba menos.

—Ok...

Claro que del taller no podrá desaparecerse, y es una forma bastante común de hacer amigos, el punto débil de mi plan era que... soy un asco pintando.

Elías tenía un estudio en el departamento, estaba dedicado a la pintura, tantos pinceles, lienzos de cada tamaño, y caballetes tenía regados, pasaba horas, a veces podía permanecer días encerrado. Un día quise intentarlo, hice una "flor" pero, en mi opinión era un desperdicio de óleo. Él sonrió y dijo, que iba a su pared, mi primera obra de arte, me sentí como niña de kínder cuando lleva a casa su trabajo inteligible y su papá lo pega en el refrigerador.

El grupo de pintura ya era avanzado, tuve que luchar para entrar. Le mentí al maestro de arte, diciendo que "sabía" lo que hacía, que pintaba desde hace mucho, y que por cuestiones familiares no había podido entrar al taller, con lágrimas encima, hice buen teatro, y me aceptaron sin decir mucho... pero ahora en la realidad, estaba perdida.

Observé detenidamente el aula, no era muy grande, quizá habían unos 12 alumnos sentados en mesas individuales, en círculo, dejando el centro libre. Pero, no lo había visto a él, ¡Será que me había equivocado! Pero no puede ser posible, él me decía que iba al aula a trabajar, de cuando en cuando cancelaba alguna cita para terminar un proyecto, o es que... ¿Desde ese momento, ya me mentía?

Dulces sueños, AnnyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora