興奮

10.8K 1.4K 529
                                        


—¿Que?

Kuroo se separó mirándolo con una sonrisa.

—Mi equipo de voleyball —le explico.

—¿Y que carajos se yo sobre voleyball, Kuroo? —pregunto aún más confundido— desde niño haz visto que no me gusta ser mirado por tantas personas, soy bastante malo jugando y-

—Me miraras a mi —respondió sin quitar su sonrisa— yo seré el público y tu el anfitrión pero a la vez tu compañero, voy apoyarte Kenma, como recompensa por no poder haberlo hecho todo este tiempo.

Kenma no respondió y solo suspiro derrotado.

—Lo pensaré.

—Te daré hasta mañana para que lo pienses mejor —le dió un beso en la mejilla y se despidió tomando su camino a casa.

El rubio entro, saludo a su mamá y se encerró en su cuarto, acostándose boca abajo pensando en aquel moreno y sus palabras.

No estaría mal intentarlo, ¿verdad?.

Pero el prefería más quedarse encerrado por horas como un cavernícola, solo que con su teléfono o jugando cualquier videojuego hasta altas horas de la noche.

Pero tampoco quería rechazar la propuesta de Kuroo y eso serviría para que pasaran más tiempo juntos.

Así que es un si.

"Ah, lo que hace el amor"

Pensó mientras se acomodaba a dormir, de todos modos mañana no tenía clases y Kuroo llegaría a visitarlo en la tarde.

Un momento...

Dios mío, SE HABÍA BESADO CON KUROO

Solo había pensando en la pregunta de su amigo y lo sorprendido que lo dejo que no se había percatado que se había casi comido la boca con su mejor amigo de la infancia.

Su cara competía contra cualquier tomate, comenzó a rodar en la cama emocionado y tapando su cara con su almohada.

Bien, quizás había reaccionado como una completa colegiala pero es que no podía creerlo.

—Santocielomañanalovolvereaver —dijo de forma demasiado rápida y aún emocionado— tengo que decírselo a Shoyo.

Le iba a enviar un mensaje pero recordó que su teléfono se había quedado sin batería, así que algo decepcionado de haber olvidado ese pequeño detalle decidió ponerlo a cargar y dormir.

De todos modos podía contárselo mañana y más calmado...quizá.

FeoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora