Al llegar al departamento, Mica me recibió con un fuerte abrazo, casi me deja sin aire.
—Me alegro que hayas recapacitado, Brisa no es tu tipo—no sé si tiene razón.
—Es por eso que esta noche la olvido—aseguré.
—Irá María, deberías volver con ella—María es mi ex novia.
—Entonces hoy será el día.
—Pero no la cagues, Angie—me dijo recordando el porqué habíamos terminado.
—No, no lo haré—esta vez me aseguraré de no cagarla.
Mica ya estaba lista, así que pedimos un taxi para poder ir a la fiesta que organiza Martín o como le dicen: "El Demente".
Al llegar al lugar, nos dirigimos a la mesa que tiene variedades de botellas de alcohol.
—¡HOY SE BEBE HASTA MORIR!—grita Martín, provocando los gritos de felicidad de todas las personas que estaban.
—Esto va a ser tremendo—dijo mica tomando un sorbo de su vaso—mira—dijo apuntando a María—anda.
—Se un poco más discreta, Mica—María se había dado cuenta de que mica la apuntó—no iré ahora.
—¿Esas son las chicas?—miró hacia la entrada de la casa—Luli, Martina, Brisa y una chica que no conozco—las nombró.
Miré, se veía guapa, lo único malo es que al parecer vino con su novia.
—No me interesa, Mica—mentí.
–Iré donde ellas—dijo dejándome sola.
—Que bueno volver a verte—dijo un voz detrás mío.
—Necesito hablar contigo, María—seré directa.
—Vamos afuera—propuso.
Fuimos a la parte trasera de la casa, no había nadie, ya que todos están dentro de la casa bebiendo.
—¿Vas a hablar?—preguntó.
—Quiero que me perdones por lo que hice cuando estábamos juntas, lo siento...Quiero que lo volvamos a intentar—fui directa.
No dijo nada, solo me besó.
—No quiero que volver contigo, pero sí quiero que esta noche la pasemos bien—acepté.
El comienzo de una larga noche
