Una noche incierta.

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-Esto es algo repentino, mencionó la profesora Anayansi, su nahual Mhavel era un enorme jaguar, al cual no le importaba en lo más mínimo aquella reunión.

El salón A-9 es el más grande de todo Calmecac, todas las reuniones de emergencia se realizan allí, los nahuales se sientan de un lado y los portadores de otro y el consejo tiene su particular mesa frente a todos.

Las puertas del salón se cerraron, y cuando el último maestro se sentó Vladimir se puso en pie.

-Gracias por responder al llamado que se les ha hecho, dados los últimos acontecimientos el consejo de Calmecac hemos llegado a un acuerdo, se adelantarán las actividades para la ayuda de la materialización a los alumnos del instituto.

-Eso es muy arriesgado, replicó la profesora Farida poniéndose en pie de inmediato.

-Los alumnos aún no están preparados para una actividad de ese calibre.

-Profesora Farida, sé que usted está al tanto de que varios de sus alumnos casi mueren en dos ocasiones, ellos tuvieron suerte de materializar a sus nahuales, pero, ¿Qué pasará si se da otro acontecimiento de estos y los implicados no son capaces de materializar a los suyos?, ¿Se hará responsable usted de la muerte de un alumno? Si un alumno muere y no es en una actividad del instituto, todo recae sobre nosotros.

La maestra Farida, no podía cuestionar aquel razonamiento, por lo que de nuevo tomó asiento.

-Karper y Verónica se encargaran de los preparativos, Víctor y Gerald reúnan a los alumnos, las actividades empezarán desde hoy al atardecer.

-Me encargare de buscar algunos voluntarios para que sea una noche inolvidable, dijo Karper con una sonrisa algo inquietante.

-Señor Vladimir, su idea es muy sensata, pero ¿y si algún alumno desaparece o muere en estas prácticas? ¿No sería el remedio peor que la enfermedad? titubeó Markus.

-Por el bien de los alumnos mismos, este reto debe de ser ejecutado inmediatamente, todos los portadores hemos pasado por esto, cada padre de familia al enviar a sus hijos aquí estaban conscientes de esta actividad, que se realice un poco antes no cambia el hecho de que siempre se tendría que ejecutar.

Todos los allí presente hicieron silencio.

-¡MUY BIEN!, ¡QUE COMIENCE LA NOCHE DE VALOR!

Muchos de los maestros comenzaron dar aplausos a aquella decisión, muchos gritaron:

¡CALMECAC CUNA DE GUERREROS! ¡ CALMECAC CUNA DE VALOR!.

Farida vio a Rodger con ojos de preocupación.

-Vayan a buscar a los alumnos y reúnanlos en el centro de Calmecac.

Todos los presentes se levantaron, todos excepto los 5 miembros del consejo.

Las puertas se abrieron y los maestros junto a sus nahuales salieron,

en aquella sala solo quedo el consejo.

-No crees que es algo precipitado Vladimir, cuestionó Gerald.

-Siempre has sido demasiado blando para tener un semblante tan frívolo, Calmecac pierde fuerza, no podemos darnos el lujo de ser flexibles este año, las fuerzas actuales son muy pocas, y estas nuevas generaciones dan pena, contestó Victor.

-Se lo preguntaba a Vladimir, no a ti.

-¿Qué dijiste?

-Tranquilos, una pelea entre nosotros es lo que menos nos conviene en estos momentos, los Licantros ya aparecieron, y seguirán apareciendo hasta que obtengan su objetivo y tú mejor que nadie sabe eso Gerald, -dijo Vladimir con la tranquilidad que lo caracteriza.

-Gina, Aura y otra de sus compañeras estaban en la habitación platicando cuando en la ventana se escuchó un grito, !REUNANSE EN CENTRO DE CALMECAC, REUNANSE EN EL CENTRO DE CALMECAC¡ las chicas gritaron por el susto que el ave atolondrada les había sacado, aquella ave se posó en todas las ventanas del instituto. Luego de unos momentos todos los alumnos ya estaban perfectamente formados en lugar de reunión.

-Ire a revisar el bosque, para que algunos estén más tranquilos, dijo Karper, mientras salía del salon con Keras.

-Vamos a dar las instrucciones a nuestros queridos alumnos. dispuso Vladimir.

Cuando todos los alumnos estuvieron reunidos, Vladimir apareció con Vernoica, Gerald y Victor en el frente, solo faltaba Karper que no se miraba por ningún lado.

Los alumnos ya formados tenían rostros de extrañez y no solo porque habían sido reunidos de noche sino también por los 4 Kobols que estaban detrás de todos ellos, el primero tenía una espada similar a la que tenía Arduz, el Kobol que murió en garras de Nibrus tenía una espada alargada en sus garras, también tenía la cabeza como de lagarto y su piel rojiza, otro de ellos tenía la cabeza parecida a la de una lagartija y portaba algo parecido a un hacha, pero en de un lado era afilado y del otro era como un martillo, el tercero tiene cabeza de salamandra y cargaba dos dagas finamente esculpidas y muy agudas de las puntas, finalmente el cuarto y último Kobol era portador de un arma bastante peculiar, un mango de madera de casi medio metro en el cual colgaban tres bolas de metal con púas, su cabeza era un misterio ya que tenía un casco plateado que la cubría totalmente, de él solo se podían ver dos ojos rojizos que brillaban dentro de la oscuridad de su casco, los cuatro estaban custodiando la entrada la entrada a Calmecac, los maestros estaban alrededor de los alumnos, y el consejo enfrente a todos.

-Estudiantes de Calmecac, hemos sostenido una reunión altamente importante y de suma urgencia, han acontecido demasiados eventos que ponen en peligro la vida de ustedes, y es seguro que seguirán ocurriendo más acontecimientos de esta índole, así que esta noche en consejo absoluto, hemos llegado a la decisión de comenzar con los actos de materialización avanzada.

Todos los alumnos se vieron entre sí y comenzaron a preguntarse el significado de las palabras del presidente del consejo.

-Veronica, haz los honores por favor.

Verónica se puso en pie y comenzó con la explicación.


-4 Kobols, son suficientes para protegerlos, y si no lo son entonces ustedes no merecen estar aquí, hemos sido demasiado blandos, demasiados comprensivos, CALMECAC NECESITA GUERREROS, NO NIÑOS QUE TENEMOS QUE CUIDAR. increpó Verónica.

Nahual - Espíritu ProtectorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora