¿Me dirás tu nombre?

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Los días pasaron, las clases cada vez eran más y más difíciles, los chicos hacían lo que podían.

-Cierren sus ojos, dijo la maestra Farida, concéntrense lo más que puedan, imagínense que están en una habitación no hay nada más que cuatro paredes blancas como la nieve, solo escuchen no digan nada, solo... escuchen, cada uno de nosotros tiene energía espiritual, dicha energía nos permite mantener el vínculo con nuestros nahuales, pero también podemos usar la energía de otros para tratar de bajar un poco el gasto de energía espiritual al contactar a nuestros compañero nahual, ahora dos miembros del grupo le darán energía al tercero y este tratara de escuchar a su Nahual.

-Pero ¿Cómo haremos para darle energía a nuestro compañero?

Pregunto Roby, -Ustedes solo concéntrense en querer hacerlo y verán que pasa.

-Yo quiero probar, denme la energía a mí, Dijo Frederick, así no desperdiciamos el intento, Gina lo vio de mala gana, y dijo,

-Yo prefiero que sea Dan, no veo que puedas concentrarte mucho,

-Estabien Gina, déjalo que él intente,

Gina cruzo los brazos y frunció el ceño de su frente.

-Bueno, rápido jóvenes que no tenemos todo el día. Todos hicieron como la maestra había dicho.

-Ahora relájense, y solo piensen en dar energía, todos lo intentaron, algunos podían escuchar algunos sonidos, otros escuchaban sus nombres provenientes de una voz interior, pero Frederick era el que más avanzaba, escuchaba perfectamente a su Nahual.

-Chico, tu no necesitas de esto para poder platicar conmigo, dijo una voz grabe, que solo podía escuchar Frederick.

-Ya lo sé, entonces ¿porque no me dices tu nombre,

- ¿Porque hacerlo?, aun eres inmaduro, solo piensas en ti, aun no eres merecedor de ser llamado portador.

- ¿Eso crees?, puedo ser mejor que cualquiera de aquí, sería un honor para ti ser llamado mi nahual.

-Chico dejare pasar todas tus impertinencias, ser un portador no es solo materializar un compañero, ser un portador implica mucho, tienes el peso de un legado en tus hombros, si lo deshonras créeme que las consecuencias no son para nada buenas.

-Eso lo sé, pero me estas juzgando antes de ver por ti mismo si soy digno o no.

-No ocupo estar allí para saber eso, aun te falta energía para materializarme.

-Gina y Dan empezaban a sentirse mareados,

-Tus compañeros se están debilitando, deja esto ya, y yo te diré mi nombre cuando estés listo.

-Eso no, yo te materializare hoy mismo.

-Deja tus berrinches,

-Frederick empezó a recordar, los nahuales dan el nombre dos veces en la vida del portador, una es antes de cumplir los tres años y la otra el dia de su materialización.

-Aunque no me lo digas, yo me acordare.

-Dejalo ya chico, consumirás el doble de energía si haces algo así, y los afectados solo serán los dos que tienes al lado,

- ¿Desde cuándo te preocupas por mis compañeros? -No me preocupo por ellos.

- Bafa que siempre estaba al lado de la maestra Farida sintió como Frederick estaba consumiendo una cantidad considerable de energía espiritual de sus compañeros, por lo que inmediatamente ordenó -Frederick basta, el chico hizo caso omiso al llamado de atención del Nahual, Dan y Gina ya no podian estar en pie la concentración del chico estaba a tope, la maestra Farida al percatarse de la situación, caminó apresuradamente donde ellos, Frederick abrió los ojos y con un grito llamó a su Nahual, --TIIIR... pero no pudo terminar de decir su nombre, porque Bafa a pesar de su apariencia tranquila, y despreocupada era extremadamente veloz y pudo arrebatar al muchacho antes de culminar de decir el nombre, lo tomo con sus garras y lo tiro a uno de los asientos. Dan y Gina cayeron al suelo completamente exhaustos.

-¿Sabes que pasaría si un portador queda sin energía espiritual? Dudo mucho que no lo sepas muchachito, Dijo la maestra Farida,

-¡MUERE! dijo con visible alteración,

-Pretendías matar a tus compañeros, el chico se puso en pie sin ninguna muestra de arrepentimiento.

-Yo solo hice lo que usted nos pidió, no puso un límite, La maestra lo vio muy enfadada, y dijo

-Créeme que no volverá a pasar un acto de tal calaña en mi clase, la próxima vez no me temblará la mano para pedir tu expulsión.

En ese momento la maestra ordenó a sus compañeros que llevaran a la enfermería a los chicos, para que pudieran descansar y recuperar fuerzas.

Dan cedió a los brazos del sueño quedando dormido casi inmediatamente de que se acostara en el camastro al igual que Gina.

Mientras dormía Dan tuvo un sueño en el cual pudo ver a su Nahual.

- ¿Quién eres tú? -Yo Dan, soy tu Nahual, el chico no lo podía distinguir muy bien debido a la extensa luz que irradiaba aquel ser.

-¿Cómo te llamas? pregunto Dan, -Chico no estás listo para saber mi nombre, te falta determinación y valentía, cualidades necesarias para poder materializarme.

Nahual - Espíritu ProtectorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora