Nivel 20:Encerrar/The Carpal Tunnel of Love.

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-¿Qué pasa Gee?- la voz de Mikey resonaba por la bocina.

La visión de Frank estaba parada frente a Gerard, frunciendo el ceño y apretando los dientes.

Le extendió la mano en señal de que le entregara la bocina, Gerard lo hizo de inmediato.

-¡Hola Mikey!, soy Frank, Gerard está un poco enfermo y quiso llamarte mientras yo iba a la farmacia por su medicina.

-¿Seguro que está bien? Es algo tarde para que me llame, además su voz se escuchaba clara y… iré a verlos.- Mikey sonaba más decidido que nunca, algo dentro de el le indicaba que Gerard definitivamente no estaba bien.

-Mikey, estás en California de vacaciones con tu esposa, descuida, cuidaré bien de Gee- Frank sonaba casi creible.

-Mmmhhhh… -Mikey dudo, algo andaba mal- está bien, de igual modo faltan pocos días para Navidad, espero verlos a ambos entonces- hizo una pausa para suspirar- ¿me dejas hablar con el?

-Lo siento Mikey, se ha quedado dormido, tiene mucha fiebre- dijo Frank poniendo su palma sobre la frente de Gerard comprobando que en efecto, tenía fiebre.

-Bueno, dale mis saludos y haz que se recupere pronto.

-Claro, ya sabes que siempre estoy pendiente de su salud, saluda a Alicia de mi parte, ¡hasta pronto Mike!

El sonido del botón de colgar rompió las esperanzas de Gerard.

-De verdad estás ardiendo- dijo Frank tratando de cargar a Gerard sobre su espalda, al primer movimiento brusco un grito espantoso salió de sus labios- debes tener algo roto, vamos a la habitación.

Controlando los gritos Gerard se dejó llevar.

En la habitación lo revisó palpando su torso notando inmediatamente un hematoma que comenzaba a formarse en su costado.

-Parece una costilla rota, espera, te pondré un vendaje.

Gerard estaba mudo, el dolor lo silenciaba y las ganas de escapar taladraban su mente.

Era la peor situación, nunca pensó que todo eso llegaría tan lejos.

Frank volvió con un montón de cosas para curarlo, limpió su nariz que aún tenía rastros de sangre.

Puso una venda en su torso y una más en su muñeca, puso un termómetro en su boca y por último le puso una playera.

-Iré a prender la chimenea, no te muevas mucho, ¿vale?

Gerard no respondió, después de todo Frank no se atrevía a verlo a los ojos.

-¡Déjame salir!

El auto yéndose.

La chapa cerrada por fuera.

Gerard estaba encerrado, incomunicado y sobre todo desesperado.

**Recien salido del horno de mi cabeza, ¡alguien expliqueme qué rayos le pasa por la cabeza a Frank! 

He decidido que si haré el prólogo, gracias por opinar.

Hablando de Frank, ¿han visto el video de su canción "Joyriding"? me gusta mucho.

Al final pone esa sonrisa de la que suelo hablar. 

Gracias por seguir leyendo.

-G

Violentometro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora