ZeeSaint -ERES TODO PARA MI -omegaverse

HEROÍNA

Todos en el palacio soltaron un suspiro aterrado. Baifern abrazo a su sobrino hacia sí y corrió escaleras arriba. Los guardias salieron por la puerta para proteger al reino. El bebé fue entregado a Nia quien acomodó al bebe al lado de Saint ,el se habia desmayado de la impresión y tenia algo de fiebre que lo mantenía inconsciente. El llanto del bebé Zee calmó con la presencia de su portador.

—Nia la tribu de la oscuridad vino ,ire a enfrentarlos tu huye con Saint ,has que despierte y huyan con el bebé. Hay un túnel en el primer piso en una de las habitaciones Saint lo conoce dile que estaré bien el debe vivir por mi sobrino. El mago los llevará a la tierra.

—Que pasará con usted su majestad?

—Solo dile a Saint y al pequeño Zee que los amo y  si el niño crece cuéntale que su tía era una guerrera poderosa—se acercó al par nombrado y besó la frente de cada uno. Sonrió a la omega que le veia con angustia y corrió fuera de alli en dirección a la batalla.

Baifern llegó al enfrentamientoy vio como su padre era lanzando lejos siendo herido de gravedad. Extendio sus brazos frente a ella y lanzó todo su poder contra la tribu enemiga matando a varios de un solo ataque. El principe Ast la arrastró cerca de el y rodeo su cuello con una sombra negra quitándole el oxígeno.

—Eres tan bella lastima que jamás aceptaste ser mia—rió alto.

—Asqueroso—lanzó una rafaja de luz logrando safarse. Cerró lo ojos antes de llamar a todo el poder de su espiritu, pensó en su madre; hermano mayor, en Saint y en su sobrino.

—Los amo a todos —atacó al Príncipe Ast sacándo su profunda oscuridad y llenandolo de luz. La sangre emanó de la boca de Ast al igual que sangre de la nariz de la princesa. Se acercó al enemigo tirado en el piso, colocó sus manos en el cuello asfixiandolo y un destello llenó sus manos atravesando la piel arrancando la cabeza de Ast. Sus manos se marcharon de sangre sintiéndose asqueada y feliz a la vez. Miró con ira a los demás de la tribu con sus ojos  color azul cielo mostrando que habia usado demasiado su poder. Algunos huyeron pero otros se quedaron asesinando a mas gente viendo con ira como a la omega asesinó a su lider.

Baifern cayó incada y tocio sangre. Se puso de pie sin fuerzas y atacó a los que seguía matando a su gente hasta el último aliento. Después de matar a un par de enemigos mas cayó al piso mirándo borroso, lloró rogando que Saint haya escapado y cerró los ojos después de ver que otro grupo de gente  llegaba. Rogó al cielo que su tribu tuviera una minima esperanza.

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Saint despertó confundido, era un lugar desconocido, se levantó de golpe recordando vagamente todo. Buscó a su hijo y lo encontró a su lado profundamente dormido. Suspiró de alivio y beso su pequeña frente observando como su niño se estiraba en su sueño.

La puerta se abrio después de escuchar algunos golpes y Nia entró con una bandeja llena de comida.

—Hola príncipe usted es mas dormílon que su bebé —puso la bandeja a un lado y ayudo a Saint acomodando almohadas detras de el para que se sentara a comer.

—Abra la boca—estiró una cuchara con un pedazo de fresa. Saint abrió la boca y comió con mucho gusto.

— Dime que pasó?

—Come y te contaré todo.

—Ok pero comeré yo,tengo manos —la omega se alejo y tomó un biberón de el bolsillo de su sudadera. Saint comió de prisa y puso la bandeja a un lado—listo dime donde estamos?