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 Bien, no fue tan mala idea dirigirnos a la casa de los chicos. El entorno dentro de la misma, es opaco pero no llegando a ser oscuro. Las paredes grises y blancas, es algo extraño, ¿Así sería su mundo ideal?

—Enano, voy a irme con Namjoon a su estudio. Cuídate y ya vuelvo por tí, ¿Sí? —Dirigió su mirada a hacia Jeon y luego se perdió su figura al cerrarse la puerta del estudio.

Lo más interesante que podía remarcar, eran las estatuas de ángeles. Pero lo extraño, es que sus alas estaban arrancadas casi por completo. No quise emitir ningún comentario, así que, pasé a ver lo demás que incluía el lugar. Los cuadros de iluciones a manos de Escher, sus escaleras infinitas y los relojes derretidos, son una obra de arte. Mostrando una perspectiva completamente diferente, es hermoso jugar con la mente humana.

Los muebles no son muy nuevos que digamos, ¿Por qué es tan diferente?. Capaz, ambos no pedían demasiado en la vida, capaz no pedían cosas de lujo que son innecesarias, capaz debería aprender de eso. Porque cada casa era un mundo y cada mundo era lo que realmente queríamos tener.

—Jimin, si no te importa, puedes entrar en mi habitación. —Dice Jungkook con un poco de vergüenza—. O tal vez... —Lo interrumpí entrando a donde me había dado acceso.

—Vaya, no te gusta mucho lo sofisticado, Jeon. Yo pensaba que sí. —No escuché ningún paso, no sabía si me había dejado encerrado o en caso contrario, él me estuviera observando desde lejos—¿Jungkook?

No tuve tiempo de girar ya que tenía encima al pelinegro. Su rostro se desfiguró en una sonrisa siniestra, su mirada perdida en la nada y en su mano una cuchilla.

Su mano sangraba, el filo del objeto cortante hacía presión en su piel. Las gotas caían sobre mi rostro y no tuve tiempo de gritar. Con suma rapidez, colocó un trapo en caso de que me oyeran alzar la voz. Ató mis manos con la misma tela en las barras de la cama y me inmobilizó las piernas. No tenía escapatoria.

—Tranquilo lindo, no sufrirás más. —Pasa la cuchilla por mi cuello—. Estoy haciéndote un favor.

Como pude, golpeé a Jungkook para que  gritara o se callera de la cama haciendo algún ruido. Lo más idiota que se me podría ocurrir. Porque todos los estudios de música, tenían protectores de sonido que no dejaba oír ni dejar pasar sonidos del exterior. Mis esperanzas son nulas para que Yoongi se enterara de lo que sucedía. Jungkook bajó mis pantalones y arrancó de un corte lo que llevaba como polera.

Con maldad, él hacía que cada vez el objeto filoso viajaba por mi cuerpo, haciendo caricias heladas.

—¿Te gusta? —El frío se centró entre mis piernas, haciendo que me retorciera—. Esa es una buena respuesta, ¿No crees?

Presionó cortando un poco en la zona de las piernas. Sentía como él observaba mi cuerpo, escaneando con sus ojos todo lo posible, así dejandome débil. Las heridas hechas por Yoongi aún seguían abiertas y con un contorno enrojecido e hinchado. El dolor se iba cuando el frío de la cuchilla pasaba, esto es relajante y con una pizca de aterrador.

—Mira como te dejas poseer por unos cortes, yo dije que eras cualquiera pero... Eres mío, Jimin. —El corte cerca de la mordida de la muñeca, hizo que gritara—.  Eso es lo que quería. Ahora, grita mi nombre.

Sacó la tela de mis labios y al fin pude respirar. Él está escribiendo tres circulos en mis muñecas, el filo llegaba más profundo y no quería dejarme llevar por esto.

—JUNGKOOK... —Grité fuerte.

— Eso es... Sigue. —Sonríe cada vez más y su voz es más tétrica.

—YOONGI!! —Grité aún más fuerte.

—Eso no es parte del plan, niño. —Pude sentir como el filo atravezaba parte de mi brazo. Estoy perdiendo la conciencia.

Pasaron segundos y se escuchaban los golpes de Yoongi, seguido con los gritos de Namjoon. Jungkook seguía con lo suyo, enterrando más y más la cuchilla, yo dejé de gritar, pensando que es lo más innecesario que podría hacer. La puerta fue derribada y la presión desistió. Mi respiración fallaba, es irregular y el pulso cada vez más acelerado. Mi cabeza explorando y al borde de perder la noción de lo que sucedía.

—Jungkook, deberías haber tomado tus medicinas. —Le inyecta en el brazo una sustancia y veo como se desmaya en los brazos de Namjoon.

Observé a Yoongi por unos momentos y ya quedé completamente exhausto. Él tomó mis manos con desesperación y sus lágrimas caían. Me repetía muchas veces "Lo siento, no debí haberte dejado solo". Fortalecí el agarre y le sonreí para que se calmara,  un "Yo estoy bien", fue lo último que dije.

No pensé que Jungkook tuviera esa faceta y mucho menos que me dejara marcas en el cuerpo. Su odio y asco, llegaron muy lejos pero... No pensé que me haría tal daño.

Calendario mental: El día ya no importa, total veo todo oscuro y sin nada de importante. Jin Hyung, estoy aprendiendo a confiar realmente en las personas. Disculpa por no haber seguido tus advertencias. Las personas no cambian, sino empeoran o mejoran. En este caso, empeoró todo.

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Holiiis... 😁

A veces es aterrador saber que te acostumbras a ciertas cosas. Como en este caso lo de Jungkook. Un dolor físico para evitar el mental.

Por cierto, agradecerle a alekook97_ por la hermosa portada. 🤗

Los leo y hasta la próxima. 💜

Who are you? - YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora