3

6.8K 653 595
                                    

¿Cuántas parejas iban ya? Había perdido la cuenta cuando supero las diez, ¿Qué era lo que hacía mal? Aunque sinceramente se sentía aliviado de no tener pareja

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


¿Cuántas parejas iban ya? Había perdido la cuenta cuando supero las diez, ¿Qué era lo que hacía mal? Aunque sinceramente se sentía aliviado de no tener pareja.

Un estrépito grito lo sacó de sus no tan profundos pensamientos. El ojeroso salió de su oficina solo para encontrarse a un chico joven gritando mientras corría por los pasillos.

— ¡Aceee! —Vociferaba el chico mientras miraba de un lado a otro.

Trafalgar lo tomó de la camisa con un ágil movimiento y lo detuvo frente a él.

—No puedes gritar ni correr así por un hospital chico. —Lo regañó severamente Law.

—Oh— Soltó el chico despreocupadamente, dándose cuenta del escándalo que estaba haciendo. —Lo lamento, es solo que mi hermano se perdió.

El ojeroso relajo su semblante y soltó la camisa del muchacho.

—Ace, supongo—El chico asintió— ¿Te dijo a dónde iría?

El muchacho cerró sus ojos intentando concentrarse, sin embargo no pudo recordar lo que su hermano le había dicho.

—Solo sé que venía a visitar a un amigo. Pasamos por la cafetería y cuando me di cuenta ya no estaba.

—Entonces empecemos a buscar por ahí— Dijo Law mientras echaba a andar hacia la cafetería.

El chico se apresuró para estar a su paso.

— ¿Cómo te llamas? — Quiso saber el jovencito.

El ojeroso lo miró de reojo.

—Trafalgar D Water Law.

—Pero que ¡Tu nombre es muy difícil de pronunciar!

—No importa, no es como si nos vayamos a ver de nuevo.

Giraron en una esquina y llegaron a la cafetería, la cual estaba casi vacía, pues la hora del almuerzo ya había pasado.

— ¿Entonces no te importa si te llamo Torao?

—Como sea. —Respondió Trafalgar— ¿Tu hermano está aquí?

El chico analizó la cafetería, pero solo había unas cinco personas y al parecer ninguna de ellas era su hermano.

—No.

— ¿Seguro que no recuerdas nada? No puedo revisar todo el hospital, tengo cosas que hacer.

—Creo que su amigo se llamaba ¿Mar...los? No no, su nombre era Mario ¡Oh! Ya lo recuerdo— Bramó el chico. — ¡Marcelo!

Law restregó su entrecejo un poco irritado.

— ¿Por qué no buscamos a los que empiecen por Mar?—Propuso el ojeroso.

En total habían seis personas de las cueles sus nombres empezaban por Mar Iniciaron por la oficina de una mujer llamada Marcie, pero estaba sola. El siguiente fue un hombre de unos cuarenta años aproximadamente llamado Marlen, pero se encontraba en plena consulta y al parecer no era el hermano del chico.

Una razón para amarte. [Español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora