Ya eran las 12 y el sol era sofocante, pero seguía caminando sin rumbo alguno. No quería estar en la calle con el calor que hacía, pero cualquier cosa era mejor que estar en comisaría.
Me dirigí al barrio en el que vivía para entrar a mi pequeño apartamento, allí haría menos calor y tendría tiempo para pensar.
Estaba muy triste, pero mi cara no mostraba ninguna expresión, solo miraba al horizonte pensando en las palabras de Volkov.
Tras caminar un rato, por fin llegué a la calle en la que vivía.
Como siempre, había gente bastante indeseable, delincuentes y camellos.
Estaba tan sumergida en mis pensamientos que no noté que había alguien frente a mí, lo que hizo que chocara.
-Mira por donde andas, joder- dijo el hombre con el que había chocado a la vez que se giraba para mirarme.
Me miró de arriba a abajo, analizando cada detalle.
-Pe-perdona, no te había visto- ese hombre me intimidaba un poco y las palabras casi no salían de mi boca.
-No pasa nada, bonita. ¿Quieres venir a tomar algo?
-No... yo tengo cosas que hacer- dije con un tono suave.
El hombre me agarró del brazo y tiró un poco.
-Venga, ven conmigo, será solo un rato- dijo intentando que fuera con él.
Yo intentaba hacer fuerza pero este hombre podía conmigo. Aquel hombre me estaba llevando al fondo de la calle cuando alguien me agarró.
-Sueltala ahora mismo, capullo- dijo una voz que me resultaba muy familiar.
Me giré para mirar quien intentaba ayudarme, era el superintendente Conway.
El sujeto que intentaba llevarme me soltó y salió corriendo. Definitivamente el superintendente imponía a todo el mundo.
-Gracias...
-Ven conmigo, anda. No voy a dejar que vivas en esta mierda de barrio- hizo un gesto para que lo siguiera.
Sin decir nada, seguí al superintendente.
Me llevó a su coche patrulla, y acto seguido subimos al coche.
-¿Cómo me ha encontrado? - le pregunté.
-Hay cámaras en comisaría, te vi salir de allí y necesitaba hablar contigo, así que te seguí-me explicó el mayor.
Me quedé en silencio avergonzada, ¿y si había visto mi pelea con Volkov? Me sentía como una estúpida por haber sido tan hipócrita.
-Y menos mal que te seguí- dijo Conway con un tono burlón.
Estaba muy sensible por la pelea, y después de que intentatan "raptarme", tenía los entimientos a flor de piel. No pude evitar llorar.
-He sido una idiota, la he cagado-dije mientras una lágrima caía por mi mejilla.
El superintendente me miró sorprendido.
-¿Por qué lloras?¿Que cojones ha pasado?-dijo a la vez que paraba el coche.
No sabía lo que decir, estaba quedando como una niña pequeña con todo el mundo.
-Soy una hipócrita, solo he pensado en mí y lo he jodido todo con Volkov-dije entre suspiros.
-Sea lo que sea que hayas hecho te perdonará, a no ser que le hayas robado alguna de sus cosas japonesas, puto otaku.
Aquel comentario me sacó una sonrisa, no sabía que el superintendente era bueno consolando, aunque tenía sentido ya que negociaba intentos de suicidio.
Sequé mis lágrimas y apoyé mi cabeza en el asiento.
-Gracias por ayudarme, es una buena persona en el fondo-lo miré de reojo.
-Na, soy un puto dios- dijo riéndose.
Nunca antes había escuchado su risa, pero era bastante contagiosa. Empecé a reírme con él.
-Venga, vamos a comisaría a que hables con Volkov, y después hablaremos de las oposiciones.
kxssmyxss está escribiendo un fanfic de Volkov, si queréis pasaros por su cuenta podréis encontrarlo ♡
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Comisario Volkov X Lectora (CNP's Babygirl)
RomanceEres Sara Smith, una chica de 22 años, cariñosa, sarcástica y atrevida. Sara se muda a a ciudad para empezar una nueva vida, y ahí se encontrará con el que podría ser su gran amor, y peligros inminentes. *Fanfic* Historia basada en la serie de GTA...