36. I had been waiting for you.

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36. I had been waiting for you






—¡Por favor!—Imploró. —No haga esto, yo no sabía lo que hacía—comenzó a llorar el hombre frente a mí. Es tan aburridamente...—¡Cambiaré!—interesante.


—Un asesino serial pidiendo clemencia, ¿No te parece divertido?—Sonreí, causando ese escalofrío en un ser tan despreciable. Éste sin duda era uno de las últimas criaturas que había estado dando de que hablar en la tierra, creyéndose poderoso, pensando que tenía la voz para decidir sobre la vida de otros, tan estúpida criatura. —Me das asco de solo tenerte frente a mí. Una escoria como tú sin duda pertenece aquí—Con un simple chasquido de dedos, dos demonios aparecieron a sus costados, levantando al hombre en rodillas que comenzaba a gritar y perdí por su vida.



Soy yo quien da la última palabra en cuanto el abandono de almas, han pasado los años y con ello mi poder sobre el inframundo no está a discusión. Soy el nuevo Rey, y todos aquí lo tienen muy en claro. Vivir día a día se había vuelto difícil, lo entendí mientras el tiempo transcurría, la esperanza de algo mejor es lo único que nos mantiene fuertes. Tal y como ese ser que no valoró la vida de otros, estando en los avernos se da cuenta de sus errores, experimentando en carne propia cada una de las atrocidades que alguna vez cometió, es ahora cuando cree poder cambiar, más bien, quiere cambiar. Sin embargo, no es así de sencillo. A través de convenios, y buscando darle ese giro de lo que representaba el inframundo ahora bajo mi mando es que se ha acordado esto, una pequeña luz de esperanza entre lo peor de la humanidad.


Gracias a mi pequeño ángel lo conseguí, logré cambiar lo que debía ser. Ahora la cuestión del bien contra el mal es cuestión del pasado, trabajo junto a los de allá arriba. Es cierto, soy yo quien impone los peores castigos a esos seres que están podridos por dentro pero también soy yo quien les da la oportunidad de cambiar. Tener la posibilidad de ascender es una pequeña señal de fe que ayuda a todos a ser mejores día a día, no digo que todos lo logren pero sin duda alguna, es la meta de muchos. Cómo parte del nuevo acuerdo, Yukina, mi más cercano amigo y consejero, pasa el resto de sus días en el cielo como un signo de alianza. Él sigue reportando los avances de aquellos demonios que realmente lograron un cambio, son pocos pero al ver la sinceridad de sus actos es bueno saber que no se está todo perdido.


Yokozawa dejó su puesto de igual manera, dejándome trabajo extra al supervisar más de cerca los arribos. Él al fin recibió su sentencia, esa misma que se había estado evitando por órdenes de mi Padre, como parte de su castigo por llevar a almas perdidas a sus últimos alientos, lo condene a pasar su existencia en la tierra, guiando por el buen camino a toda alma perdida y así cumplir uno de los nuevos objetivos que los avernos, albergar solo a lo peor. Conozco bien la manera en que llegó, mantenerse en este lugar sin haber terminado su vida en la tierra es algo difícil de imaginar así que, deberá cumplir el castigo por faltar al orden, envejeciendo y viviendo sus días cuidando de toda alma perdida. Su sentencia será revalorada el día en que muera, viendo realmente a qué lugar pertenece después de todo, si los Avernos o el Paraíso, todo podría ser posible.


Me asombra como Ritsu siempre lo supo, como siempre confío que podría hacer un cambio y como realmente lo consiguió. Los crímenes por los cuales llegan a este lugar cada vez son de menor categoría, sin embargo aún existen aquellos que buscan la desgracia sin razón, lo cual es lógico, después de todo la raza humana siempre ha vivido con el egoísmo y la ambición, dos sentimientos que juntos son catastróficos.

El príncipe de las tinieblas; Sekaiichi Hatsukoi {RxT} FINALIZADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora