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Nos encontrábamos en la cafetería de la escuela, la noche anterior Wilde y yo habíamos salido de fiesta, por lo que era casi un milagro que hoy hubiéramos venido a la escuela

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Nos encontrábamos en la cafetería de la escuela, la noche anterior Wilde y yo habíamos salido de fiesta, por lo que era casi un milagro que hoy hubiéramos venido a la escuela.

A unos metros de distancia pude ver a Wilde y Jene peleando por una estúpida Coca-Coca, y me pareció genial. Me alegra a ver a mi primo llevarse tan bien con todos, y la verdad es que me sentía bien por él.

Digo, no hay que ser un genio para saber que Jene anhelaba venir a esta ciudad, era algo extraño que siempre había querido, y ahora que estaba aquí le estaba yendo muy bien.

Jene era de esos chicos que atraía a las personas, y su personalidad y carisma hacía que todos quisieran estar alrededor de él, no me había sorprendido que se llevara tan bien con los chicos. Después de todo, Jene siempre se lleva bien con cada persona con la que tiene oportunidad de cruzar la palabra.

Viéndolos a ambos me doy cuenta que sus personalidades son totalmente distintas, Jene es un chico divertido, alegre, que siempre intenta salir adelante y hacer lo que sea por los suyos. Mientras que Wilde es Wilde, se escuda en su fachada de chico problemático y mujeriego para ocultar los verdaderos problemas que tiene, y eso estaba mal. Aunque ni siquiera yo que me considero su mejor amigo pude descifrarlo del todo aún, Wilde era sin duda un completo misterio.

Pensando de nuevo en Jene puedo notar la enorme atracción que siente hacia Paul, y no, no solamente porque el me lo haya contado, si no porque se nota a kilómetros con solamente mirarlo.

Ahora mismo Jene se encontraba peleando con Wilde, pero podía ver en sus ojos como cada ciertos minutos volteaba a ver a Paul, para ver que estaba haciendo y asegurarse de que todavía tenía su atención. Patético.

Comencé a reír al ver lo estúpido que se volvía mi primo al ver a mi gran amigo Paul, no podía culpar lo realmente, los gemelos tenían por naturaleza algo que atraía a todos. Pero él ya había pasado los niveles normales, podía notar que está completamente enamorado de mi amigo.

Seguí observándolos y riéndome abiertamente, por lo que supongo Mart lo notó porque se acercó a mí con una cara curiosa, una vez que Mart notaba algo no podías hacer nada para poder hacerlo olvidar de eso, no iba a parar hasta descubrir qué pasaba.

-¿Y tú? - dijo mientras terminaba de acercarse y se sentaba junto a mí en una de las sillas de la cafetería - algo me dice que hay algo más aquí, no es normal que lleves 15 minutos viendo a Wilde y Jene pelear mientras te ríes, ¿pasa algo, anormal?.

Bueno Mart es inteligente (y yo tan poco sutil que todos se dan cuenta) pero me daba risa que no se haya dado cuenta del temita de Jene y Paul, digo, es tan obvio que hasta Wil que es la persona más distraída del mundo se daría cuenta.

- No pasa nada - dije mientras intentaba dejar de reírme y me endereza a en la silla de la cafetería - es solo que es muy divertido esto, todos juntos en la escuela, riendo, siendo felices dentro de todo, ¿no crees que es muy bueno para ser real?.

Decía eso con sarcasmo, es obvio que no me molesta lo bien que van las cosas ahora. Sin embargo, ahora que lo pienso me doy cuenta que todo está más tranquilo de lo normal. Es muy bueno para ser real.

-Mi madre tiene cáncer - dijo Mart bajándome de la burbuja de paranoia que ya había comenzado a formarme, todo está bien, no hay nada de qué desconfiar.

-Lo lamento mucho. - dije casi de modo automático.

La verdad es que si me preocupaba mucho la familia de Mart y de todos los demás, pero en este momento no se exactamente qué decir.

-Va a salir todo bien ¿sabes? - ahora si me acerqué más a él y le puse una mano en el hombro, él era mi amigo, es mi deber consolarlo.

-Ya lo sé - dijo con una pequeña sonrisa que se pareció más a una mueca - es solo que ya sabes, quizá todo no está tan bien como decías, quizá las cosas malas están ahí, como un cáncer silencioso que te mata lentamente . Solo que la mayoría de veces no podemos verlas.

Pude ver en sus ojos como decía eso como una forma de reconforzarse por lo de su madre, pero a mi eso solo me puso más paranoico, ¿y si era así? ¿y si las cosas malas ya estaban aquí y solo esperaban matarnos lentamente como un cáncer silencioso?.

Nota de la autora: Ya se que dije que iba a actualizar los jueves y hoy es viernes, pero ayer con los trabajos del liceo (colegio) me olvidé de actualizar

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Nota de la autora: Ya se que dije que iba a actualizar los jueves y hoy es viernes, pero ayer con los trabajos del liceo (colegio) me olvidé de actualizar. Acá tienen una pequeña perspectiva de Charles, también me gusta mucho este personaje, me parece que tiene mucho para dar. Nos vemos en la próxima semana mis amores, espero les esté gustando la historia.

EL CAMBIO DE LOS SIETE [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora