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Pansy.
El primer pensamiento que se cruzó por su cabeza cuando la vio entrar a su aula, hace casi tres años, fue que tenía linda piel. Y, casi al instante, abandonó la idea de darle una buena sorpresa a su nueva profesora. ¿Valía la pena atormentarla en su primer día de trabajo? Porqué ella sabía que lo era, se notaba nerviosa e indecisa, tartamudeaba y la lengua se le trababa con frecuencia; además, no era mucho mayor que los alumnos a los que pensaba educar, ¿cuántos años tendría? Pansy no creía que tuviera más de veinticinco pero no se atrevió a preguntar.
Pero uno de sus compañeros si lo hizo: levanto la mano con insolencia, interrumpiéndola, e hizo la pregunta mientras sus amigos disimulaban las risas a su lado; ella, muy inocente para el gusto de Pansy, le contestó. Entonces alguien se atrevió a silbar y empezaron los cuchicheos maliciosos. ¿Y McGonagall creía que ella era mala? No, en ése momento su comportamiento era digno de imitar.
Decidió dejarla tranquila y se recostó con aburrimiento en su carpeta. Era suficiente castigo tener que lidiar con los cavernícolas de sus compañeros como para sumarse ella también. Sí, tenía linda piel y era muy linda, pero esa era su sentencia de muerte, nadie lo había dicho en voz alta pero sabía que todos los que la rodeaban estaban decididos a hacerle el año imposible.
Hermione Granger, era su nombre. Eso se había encargado de dejar claro, la clase siguiente, cuando uno de los simios de su salón la había llamado 'linda'; entonces Pansy sintió una inexplicable simpatía por ella y se lamentó por eso. Todos los profesores (y los adultos en general) eran unos grandísimos idiotas que creían tener siempre la razón y ella los aborrecía a todos por igual, ¿cómo iba a perdonarse sentir una inevitable admiración por Hermione?
Su "broma de iniciación" se retrasó tanto que, para cuando Pansy se dio cuenta, ya había pasado un mes desde el inicio del año escolar y ya no tenía ningún sentido. Acabó de descartar la idea por completo y se contentó con quedarse hasta el fondo de aula, en una carpeta al lado de la ventana para distraerse con el paisaje. Estaba segura de que no valía la pena jugar con ella, presentía que iba a ponerse a llorar cuando viera perdida la atención de su clase y eso no era nada divertido.
Así que trato de mantenerse al margen en sus clases, intentando no parecer lo suficientemente interesada como para que Hermione no pensara que le agradaba pero sin atreverse a hacer ningún desmán en sus horas. No era tan difícil no meterse con ella, solo le bastaba escucharla hablar (fingiendo indiferencia porqué se negaba a reconocer que realmente quería atenderla) y ya estaba.
Su orgullo tenía constantes peleas con sus ansías de impresionarla. A veces tenía que usar toda su fuerza de voluntad para evitar contestar las preguntas que hacía en clase porqué tenía miedo de convertirse en una empollona, sin embargo no podía luchar contra el impulso de realizar todos sus trabajos y estudiar para sus exámenes con verdadera dedicación. ¿Qué era lo que le estaba sucediendo?
Había días en los que quería renunciar a su buen comportamiento y llegaba a su clase con todas las ganas de ponerlas de cabeza, pero luego Hermione le sonreía con gusto y ella echaba todos sus planes por la ventana y le devolvía la sonrisa e iba hacia su lugar, hacia el fondo.
Acabó por aceptar que sí, que la admiraba. Era inteligente y (después de vencer los miedos iniciales) se desenvolvía con facilidad en el salón de clases, sus explicaciones eran claras y nunca le faltaba paciencia para aclarar dudas o repetir el mismo concepto cinco veces hasta que estuviera segura de que todos la habían entendido. Además, de a poco aprendió a lidiar con las payasadas de los estudiantes y a ponerlos en sus sitios, demostraba un carácter fuerte y Pansy (a veces) veía algo de McGonagall en Hermione aunque ella era mucho menos aterrorizante y no tenía la cara llena de arrugas.
En ocasiones la descubría mirándola por encima de su cuaderno y, cuando notaba que Pansy se daba cuenta, fingía que estaba haciendo otra cosa. Pansy sentía que la estudiaba y ella tenía una idea bastante aproximada del porqué, sabía que el resto de profesores había descubierto lo tranquila que era en sus clases y sospechaba, sin temor a equivocarse, que le habían pedido el secreto. ¿Había alguno? No, simplemente ella quería portarse bien. ¿Pensaría Hermione que un día su comportamiento cambiaría? No podía saberlo.
Fue una completa sorpresa para ella ver en su boleta de notas, el fin del año pasado, una calificación casi perfecta en el curso de Hermione. Nunca antes había tenido notas tan altas que se sintió como si hubiera sacado el primer puesto de todo el colegio.
Y así llegó su último año y, erróneamente, McGonagall pensó que la mejor manera de castigarla por todas sus travesuras era encerrarla por dos horas en un salón vacío con Hermione. Pansy, por supuesto, había tratado de disimular su emoción lo máximo posible, no quería que la subdirectora pensara que le agradaba la idea de las detenciones (que, además, eran una buena excusa para no ir a casa hasta la noche y solo para dormir).
Y ahora estaba metida en la piscina del colegio con Hermione, confirmando lo que pensó cuando tenía quince años: Hermione tenía linda piel. Y sus piernas eran como siempre se había imaginado que eran bajo el pantalón de tela oscuro: largas, delgadas y bonitas. Y tenía un bonito cuerpo, delgado como el suyo, pero bonito al fin y al cabo. Y ella también lo era, por mucho la mujer más guapa que había visto jamás.
Y la tenía completamente a su merced.
Es un capitulo de lo más cortito pero que me encanto escribir ja, ja, ja :3
Pansy adolescente con toda la rebeldía encima es lo mejor ksjsjsj
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Siempre | Pansmione |
FanfictionPansmione AU. Un mundo sin magia donde Hermione es profesora y Pansy su alumna.