La comunidad

16 Viaje, segunda parte.

Me dolía el cuerpo, no podía ver a donde estaban los demás, mi abuela, Adam y Sara, sentía voces, pero estaba aturdida, pase las manos por mis rodillas intentando sacar los restos de tierra y piedras, movía la cabeza de un lado hacia el otro intentando volver en si, me costaba, me senté dificultosamente, llevé mi mano hacia mi cara para poder sacarme el pelo hacia atrás, estaba húmeda mi cabeza, era sangre, revisé el resto de mi cuerpo, una herida pequeña en la frente, piernas rasguñadas, brazo igual, de a poco comenzaba a reaccionar, apoyé mis brazos y intenté levantarme.
-Hola ¿me recuerdas pequeña?- una media sonrisa siniestra aparecía en su cara.
-Tu, tu-mi voz titubeaba
-Tu, tu, habla bien, débil, tanto poder y tan mal utilizado- dijo furiosa.
Trague saliva, respire hondo- Eres Perla ¿Donde están los demás?
Señaló hacia atrás mío, había un chico parado y tres cuerpos en el suelo. Mi fuerza apareció, me levante velozmente y corrí hacia ellos. Fui hacia mi abuela, tenía los ojos abiertos
-Luna ¿Estás bien?- Su mano acarició mi cabeza.
- Si, abuela ¿Como estás? ¿Que sucedió?- sentía como un fuego recorría mi interior, mis heridas comenzaron a cerrarse.
-Nos atacaron, estoy bien...
Interrumpió -Ya cállense- dijo el sujeto parado a nuestro lado.
El fuego de mi interior se concentró en mi mano, al moverla hacia él, salió disparado a metros de nosotros.
-Luna, tienes que irte, llévate Adam-Dijo Sara que se levantaba a unos metros de nosotras, parecía bien una que otra herida, Adam estaba a su lado, inmóvil, ahora sucio con rasguños pero parecía igual.
-No las dejaré aquí, es un suicidio- conteste.
Perla se acercaba a lo lejos, tranquila, a pasó lento con esa media sonrisa que me helaba por dentro.
La abuela se acercó a mi y susurró - Lunas, los amo, de verdad, siento no haber estado ahí en otros momentos de mi vida, en algún momento entenderán todo, dile a Lucas que te enseñen los papeles y eres fuerte no lo olvides, ahora entiendo a mi padre. Él es débil cree en ti, vete rápido. Sara váyanse. No se detengan.
-¿De que había abuela? ¿Qué haces?
Se levantó y se dirigía hacia perla. Sentía cómo pronunciaba en voz baja "vida e rendición, por ti para min e por ela, vida e dá por ela. Vou e vou, imos".
Siguió avanzando, miro hacia mi, sonrió.
-¿Que haces? No lo hagas- dijo perla, su cara era de susto, ya no era la cara de antes.
-¡Abuela no! Quise  correr hacia ella, pero Sara sujeto mi mano.
-Ya es tarde- dijo.
-¿Tarde? ¿Tarde para que?- las lágrimas salían de mis ojos, la desesperación me invadía.
-Debemos irnos Luna, antes de que el otro despierte.
Volví a gritar Abuela pero parecían ya no escucharme, hubo un estruendo, nubes de polvo que me impedían ver qué sucedía entre entre ellas.
-Vamos luna, vámonos ahora, sino todo habrá sonido en vano, agarra a Adam.
Visualicé el auto a unos metros, destrozado pero andaría, no mucho realmente, entre lágrimas y desesperación agarre a Adam como pude, me dirigí al auto y nos subimos. Arrancamos, no podía dejar de llorar y mirar por el retrovisor. ¿Que había pasado? No entendía y no sabía si realmente quería entender. Mis manos estaba en el volante, golpe las manos contra el.
- ¿Que carajos está pasado Sara?- mí voz de resquebrajada.
El teléfono de su bolsillo comenzó a sonar. Sara deslizó la mano en él y atendió
-Hola, amor ¿estás bien?dime qué estás bien.- suspiró.
-Lucas, si lo estoy, Sara y Adam también, este auto no dará para mucho más.
- Lo se, estoy de camino, nos encontraremos en Castilla y León, estoy yendo lo más rápido que pueda, calculo que hasta ahí podrán llegar. Tenga cuidado.
-Se lo comunicaré a Luna. Te amo.
-Yo a vosotras.
La llamada termino, Sara me contó lo que había acordado con Lucas, pero realmente lo que me interesaba era lo otro. Adam parecía estar igual, pero me daba miedo, habíamos perdido tiempo y el tiempo en esto era esencial. Quería saber lo que sucedió con mi abuela, no entendía y tenía miedo de que estuviera en peligro o algo peor a eso.