Vampiro de Baker Street(Sherlock Holmes)

Ya no hay secreto

Ya habían recorrido un largo camino, Sherlock cargandote(sin cansarse ya que posee una increíble velocidad y fuerza) sin que te dieras cuenta ya les faltaba poco para llegar a Baker Street

- ¿Sherlock? -dijiste despertando y haciendo que el detective camine a paso normal(humano).

- ¿si, dime? -bajó la mirada hacia ti.

- ¿quién es John? -frunciste el ceño.

- ¿por qué preguntas? -se mantuvo serio y elevó la vista hacia el camino.

- porque Lestrade lo nombró, y me llamó la atención saber quién es

- él era... es mi amigo -respondió Sherlock.

- ¿dijiste, era? -frunciste el ceño confundida.

- sí, lo era... antes de irse de nuevo al ejército -mintió con lo primero que se le vino a la mente.

- pero creí que estaba de vacaciones -lo miraste entrecerrando los ojos.

- es... -se puso nervioso- es que después de sus vacaciones volvería al ejército

- ajá -lo miraste frunciendo el ceño sin creerle- ¿falta mucho aún? ¿No encontraste un taxi?

- no, aún no -elevó la vista para mirar el camino- igual ya estamos llegando...

- ¿en serio? -giraste para mirar el camino lo cual era cierto.

Siguieron caminando en completo silencio hasta llegar al 221B de Baker Street, Sherlock abrió la puerta y empezó a llamar a la Sra Hudson pensando que al fin podría apartarse un poco de ti(por las ganas de beber tu sangre).
Lamentablemente la Sra Hudson no se encontraba en casa, Sherlock quiso llegarte a tu cuarto, pero necesitabas ir a un hospital por la herida de tu pierna
Salieron nuevamente, Sherlock paró un taxi y te ayudo a subir para partir rumbo al hospital.
Cuando llegaste rápidamente(al verte mal herida) una enfermera te llevó a una habitación para curarte.
Sherlock se sentó a esperar que los doctores aparecieran buenamente contigo o noticias sobre ti(no tuvo que esperar mucho).

- ¿usarás muletas? -preguntó Sherlock al verte con una, acompañada por un doctor.

- sí -respondió el doctor- la herida fue grave, si el alambre hubiera pasado más de 2 centímetros terminaría cortando varias de sus venas y podría haber muerto. Su novia tuvo mucha suerte

- eh no... -dijo Sherlock sorprendido por lo último- ella no es...

- lo señalaste- no crea que él es mi...

- lo siento -se disculpó el doctor- es que pensé que ustedes... -ambos negaron- harian linda pareja. En fin -te miró- ya puedes irte, ven dentro de unas semanas para ver cómo evoluciona la herida

Asentiste. Sherlock se apuró a salir casi tirando de ti para que fueras más rápido

- ¡oye, espera! -dijiste molesta- ¡no puedo caminar a velocidad normal!

- por tu idiotez -respondió con las manos en sus bolsillos- no entiendo que clase de persona estúpida corre en una fábrica abandonada y oscura...

- no entiendo qué clase de persona piensa que tú podrías llegar a tener novia -te adelantaste- imbécil gruñón...

Te subiste a un taxi molesta y le diste la dirección del 221B dejando sólo a Sherlock.
Pagaste y entraste al departamento, tu abuela aún no aparecía, así que con mucha mucha dificultad subiste las escaleras.
No tenías hambre(lo cual era raro) así que te metiste en tu habitación para tratar de dormir.
A las 12 pm sentiste la puerta de la sala cerrarse seguido de ruidos en la habitación de Sherlock, supusiste que él había llegado.
Te quedaste mirando el techo, el sueño se había esfumado, te pusiste a pensar en lo que le habías dicho a Sherlock, te sentiste un poco mal porque después de todo te ayudo.
Decidiste ir a darle las gracias, miraste la hora 2 am, no te importó, tomaste la muleta, bajaste, te metiste por la cocina y golpeaste a su puerta

- Sherlock -golpeaste- Sherlock -volviste a golpear- Sherlock -golpeaste una última vez.

Abriste lentamente la puerta por no recibir respuesta, el detective no se encontraba allí, estabas por salir, pero el olor a su perfume te atraía hacia adentro, caminaste a la cama donde se encontraba una camisa de él, la tomaste para aspirar su aroma.
Pronto escuchaste como la ventana se abría, soltaste la camisa y miraste hacia la ventana, encontrando a Sherlock con sangre en su boca.