ONE SHOTS CHAELISA G!P

Encuentros furtivos

Solo porque así lo pidieron...

Rosé G!P

Estaba frente al campus de la universidad esperando a que Jisoo apareciera para irnos a casa de una buena vez. Llevaba días con jaqueca y hoy no me sentía mejor, por eso, decidí saltarme mi última clase de literatura y sentarme en el andén mientras fumaba un cigarrillo.

— ¿Qué te pasa? —preguntó Jisoo, llevábamos años conociéndonos desde que íbamos a la preparatoria y ahora que estábamos en la universidad — si sigues fumando así creeré que realmente nada está bien —dijo y se sentó a mi lado en el andén.

Reí, Jisoo era particularmente encantadora cuando se sentaba, parecía un costal esparramado — Cierra las malditas piernas —dije mientras le empujaba una pierna.

— ¡Oye! —exclamó— no me juzgues, me duelen los huevos, Jennie no hizo más que provocarme y como ahora te quieres ir, ¿Crees que es realmente fácil saber que Jennie está allí dentro y no puede hacerse cargo de esto? —dijo mientras señalaba su forzada entrepierna. Reí, Jisoo era una cerda entera.

— Siempre puedes jalar en ganso, cargar la escopeta... Ya sabes —dije mientras hacia gestos con la mano y levantaba las cejas para luego estallar reír por su mirada de reproche.

— Eso lo harás tú, yo prefiero la atención real —dijo mientras me quitaba el cigarro y le daba una calada. — ¿Te parece si vamos por unas cervezas en un rato? —la miré pensativa y después asentí, era viernes y ambas no teníamos nada bueno qué hacer. Los parciales finales del corte de este semestre eran la otra semana, pero no tenía cabeza para aquello en esos momentos.

Nos fuimos caminando hasta la casa que compartíamos desde que iniciamos la universidad, no era lejos, y aunque ella insistió en que fuéramos en taxi preferí caminar, mi punzante dolor de cabeza sólo aumentaba a cada paso que daba, Jisoo detuvo su paso y me giré para verla.

— ¿Qué pasa? —dije mientras la miraba meter sus manos a los bolsillos de su jean buscando algo.

— Acá está —dijo mientras me tendía una pastilla de naproxeno— tengo agua en el costado de la maleta, tómala —dijo mientras se giró y pude ver allí la botella de agua a un costado. Tomé el agua de allí y luego le dije.

— ¿Estás segura que esto sirve para mi jaqueca?

— No exactamente, a menos que tengas inflamado el cerebro —dijo mientras se reía, la miré con reproche— tómala idiota la he robado especialmente para ti de mi clase de farmacología.

— Eres increíble —dije mientras la destapaba y la ponía en mi boca— espero realmente funcione, créeme que dudo mucho de tus conocimientos en medicina.

— Seré la mejor médico que conocerás pedazo de boñiga —me dijo y yo solo opté por reír y retomar el camino junto a ella, poco a poco mi dolor de cabeza fue siendo parte del pasado.

En cuanto estuvimos en casa me recosté en mi cama, revisé el celular y me sorprendió encontrar un mensaje de la novia de Jisoo

Jennie Kim:

Hola Park

17:50

Rosé:

Hola Jennie, ¿qué tal todo?

18:45

Jennie Kim:

Eres tan efectiva, gracias al cielo no recurro a ti en caso de emergencia.

18:47