"Enemigos de día, amantes de noche"

"Todos los lugares son especiales a tu lado"

Capítulo Sorpresa!!!
Antes de empezar quiero dedicar este capítulo a Beatriz_s39, a ElizabethAlarcon7 y dlxgvv por ser los primeros en votar en los capítulos anteriores. Muchos besos y gracias por votar mis amores.

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*Narra Elizabeth*

Meliodas y yo llevamos unos minutos caminando para salir del palacio. Nos detuvieron varias mucamas para saludarme ya que llevaba un tiempo sin aparecer. Después de algunas charlas, presentaciones y saludos, al fin llegamos a nuestro destino.

Mel: Vaya, es espectacular - dice mientras caminamos entre arbustos llenos de hermosas flores.

El bosque en realidad es un hermoso laberinto. En el centro de este se encuentra un claro lleno de pajaritos y ardillas, hay muchas flores y una mesa lo bastante grande como para cuatro personas.

Mel: Definitivamente es hermoso, pero la verdad, nuestro jardín es más bello. No porque este no lo sea sino que el nuestro tiene una magia que es difícil de explicar.

Eli: ¿Nuestro jardín? - lo miro con duda.

Mel: ¡Oh perdón! Entiendo que sea el jardín de tu familia. Yo...yo perdón no debí referirme a...- ante de que continúe lo beso, interrumpido si discurso.

Eli: Mel, me encanta que te refieres al jardín como nuestro. Solo que al principio no sabía que te referías. - digo rodeando su cuello con mis brazos.

Mel: Uff, que alivio. Pensé que te habías molestado por haberme tomado la atribución de incluirme, cuando el jardín es de tu familia.

Eli: Meliodas ya te he contado la historia de ese lugar. Desde el momento en que te llevé también es tuyo ahora. Nuestro. - digo probando nuevamente la palabra en mi boca, Meliodas me besa la frente mientras rodea mi cintura con sus brazos y me sonríe.

Mel: Te amo.

Eli: Yo te amo mucho más.

En un impulso, atrapo los labios de Meliodas con los míos. Ambos nos devoramos mutuamente y Meliodas hace que enrolle mis piernas en su cintura.

Las manos de Meliodas en mi trasero comienzan a apretarlo haciendo que suelte pequeños jadeos que son habidos por sus besos.

Siento algo duro chocar contra mis nalgas y me doy cuenta que mi hermoso rubio me a sentado en la mesa del centro del claro mientras se cuela entre mis piernas.

Sus labios abandonan mi boca para dirigirse a mi cuello, en el cual muerde y chupa a su antojo. Creo que tendré que usar ropa de cuello alto por un tiempo.

Sus manos dejan mi trasero y un se dirige hacia mi cintura metiéndola por debajo de mi blusa. Siento escalofríos al sentir sus dedos calientes en mi piel.Su mano asciende hasta llegar a mis pechos cubiertos y comienza masajear uno por encima del sostén mientras su otra mano acaricia mi pierna derecha y va subiendo.

Los labios de Meliodas llegan hasta el valle de mis pechos y entonces se separa, de un solo tirón quita mi blusa y baja las copas de mi sostén haciendo que mis pechos queden elevados a su total disposición. Acerca su boca a uno de mis pezones ya erguidos y lo sopla haciendo que suelte un pequeño gemido.

Sus labios se tuercen en una sonrisa maliciosa y sin previo aviso se mete mi pezón a la boca mientras lo chupa y muerde a su antojo. De mi boca sale un gemido tras otro, mis manos se dirigen hacia su chaleco y comienzo a desabrocharlo. Comienzo a pesar mis manos por todo su torso deleitándome con el cuerpo de mi hombre. Llevo mis manos hasta sus hombros y lo deslizó por sus brazos, para ayudarme de mi pecho que está masajeando y su otra mano deja mi cintura.