7. Silencio

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Kylo Ren era un hombre de palabra. Justo como lo predijo la recargó donde pudo, Rey terminó corriéndose en su lengua y mordiendo su puño para ahogar cada sonido de dulce placer, Ren se tomó su tiempo, a pesar de que Finn podría entrar en cualquier momento. Una vez que termino su labor hecha con tanta dedicación, le subió los pantalones y la beso, Rey se probó en sus labios y de pronto deseaba que él estuviera ahí realmente y no solo en un enlace.

"¿A dónde vas?" le preguntó pasándose la mano por el cabello del que momentos antes ella tiraba con fuerza.

"No es tu asunto" contestó recuperando el aliento. Bajó la mirada y notó el prominente bulto entre los muslos gruesos.

Con un dedo le levantó la barbilla "Cierto" Tu eres mi asunto, pensó.

"Estaré fuera por varios días, no es prudente...vernos"

"Nada de lo que estamos haciendo es prudente, chatarrera"

Ella frunció el ceño y se apartó unos pasos arreglándose la ropa "Finn estará conmigo todo el tiempo y..."

"Encuentra la manera de quedarte sola" interrumpió Ren irritado.

"No es tan fácil..."

"Como sea" contestó Ren cortante y cerró el enlace.

Rey se dejó caer en un sofá de la nave y respiró hondo varias veces "¿Qué mierda estás haciendo?" dijo.

"Estoy subiendo a la nave" contestó Finn extrañado del tono.

"Oh, no, Finn. Estaba pensando en voz alta" la chica se sentó derecha y sonrió.

"¿Lista?" pregunto su amigo devolviéndole la sonrisa y extendiéndole la mano.

"Claro" contestó y se dirigieron a la cabina de control.

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La Primera Orden no aun no tenía rastro de la Resistencia, había que modificar estrategias, revisar las listas de conocidos de Leia para impedir que obtuvieran aliados, Hux y Pride peleaban por tomar cada decisión con respecto a las tropas y se necesitaba de urgencia una cena diplomática para limar asperezas con algunos líderes que accedieron voluntariamente a la fuerza a unirse a la Primer Orden. Tanto que hacer y Kylo perdía su tiempo pensando en Rey.

Cuando la conoció supo que sería interesante tenerla cerca, después de Arch- To y la mancuerna que hicieron para derrotar a los guardias pretorianos, Kylo estuvo seguro de que Rey estaba destinada a estar a su lado. Pero ahora era más que eso, más que un anhelo, era una adicción. Besarla, tocarla y sentirla era la droga que su cuerpo y mente pedía todo el tiempo, un sentimiento posesivo se apoderó de él cuándo mencionó al stormtrooper traidor, la paz que ella le brindo se esfumó y ahora solamente pensaba en dejarse llevar por su ira, romper o destruir siempre era más fácil que aceptar.

Después de escuchar los parloteos de sus dos generales tuvo una sesión de entrenamiento con los caballeros Ren, cada que pensaba en la chatarrera y en que podría estar haciendo, el lado oscuro fluía por sus venas, sin ninguna dificultad arraso con todos. Al terminar, uno de los caballeros se acercó.

"¿Quién te dio permiso de quitarte el casco?" Preguntó Ren sin mirarla, Mahr, era el nombre de la mujer.

"Tengo una pregunta, maestro" contestó acomodándose los risos negros y encarándolo.

"No" Ren le devolvió la mirada, indiferente ante las intenciones que imaginaba, la mujer escondía. Mahr fue un error de una noche. De varias noches.

"Fue divertido, ¿verdad?" dijo, sugerente y posando su mirada verde sobre los labios de Kylo.

"Escucha bien" Ren se acercó con su sable en mano "Vas a olvidar lo que sea que recuerdes si quieres seguir siendo parte de los caballeros Ren. De otra manera" acercó la hoja del sable a la cara morena de la mujer "De otra manera, no creas que dudare en matarte ¿Ha quedado claro?"

Meet Me HalfwayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora