I'm a psychopath © Lee Minho

Cᥲριtᥙᥣo 05

Por fin estaba en su casa, después de todo lo que había pasado en aquel psiquiátrico necesitaba un descanso, mejor dicho, un gran descanso para analizar todo, pero como dicen, todo tiene su fin.

Se estaba quitando los zapatos para recostarse en el sofá y descansar lo más posible, pero eso no duraría mucho, se estaba recostado en el sofá cuando desde la sala escucha como su puerta es tocada, se levantó de mala gana suponiendo quién podría ser la persona responsable de no dejarla descansar, mientras se dirigía a la puerta suponía que Kun podría ser el responsable.

Se encontraba en frente de la puerta y sin pensarlo mucho abrió la puerta quejándose con quien suponía que era su amigo.

- Kun, ¿Qué quieres? - habla mientras abre la puerta con el ceño un tanto fruncido -, Oh... ¿Daniel? ¿Qué haces aquí?

- ¿Así es como tratas a tu hermano pequeño? - ríe entrando al departamento junto con las maletas que llevaba - ¿Y quién es ese tal Kun? Tenías novio y no dijiste - pone una mano en su pecho haciéndose el ofendido mientras se adentraba al departamento.

- No, no - niega reiteradas veces mientras cerraba la puerta y seguía a su hermano por detrás hacia la sala -, Kun es un amigo y compañero de trabajo ¿que haces aquí? ¿y porque tienes maletas contigo? - lo ve sonreír mientras se sienta en el sofá - Oh, no... No me digas que...

- Si, ¿que quieres que haga? Si apenas atiendes las llamadas de mamá y papá y para que decir las mías - rueda los ojos bufando -, espero que tengas una habitación para mí, Sook.

- Daniel, sabes muy bien que estoy ocupada trabajando, por eso no he podido atender sus llamadas.

- ¿Y aun trabajas en aquel psiquiátrico? - ríe negando - Waow... Pensé que habías tomado el cargo que te dio papá, pero por lo visto no, al menos no terminaste loca y encerrada ahí.

- sonríe falsamente - Muy divertido, Daniel.

- Si - sonríe - sigo siendo el mismo de siempre.

- No has cambiado nada por desgracia - se sienta a su lado -

- ¡Claro que he cambiado! - le da un pequeño golpe en el brazo - Me he vuelto más apuesto - mueve sus cejas de arriba hacia abajo divertido - ¿No lo crees?

- Mh... No lo creo - le muestra la lengua burlona.

- Eres una envidiosa - se cruza de brazos haciendo un mohín en sus labios -, sabes que soy el más lindo de la familia.

- Claro - responde con sarcasmo -, pero como sea ¿por cuantos días te quedarás?

- No lo sé - vira su vista hacia ella sonriente - ¿tienes algo de comer? Tengo hambre - se toca el estómago - el viaje de Busan a Seúl es un poco largo.

- se levanta del sofá para dirigirse a la cocina y ver que tenía para comer- Veamos... Tengo, fideos instantáneos, gimbap y bibimbap.

- Lo que sea de tu cariño - hace un corazón con sus manos.

- saca en un plato un poco de gimbap y lo lleva a la barra que separaba la cocina de la sala - ven a comer.

- ¿Aun recuerdas que me gusta el gimbap? - pregunta sentándose en uno de los taburetes.

- Claro que sé que te gusta el gimbap - responde sentándose en frente del -, después de todo no soy tan mala hermana.

- Gracias - agradase con la boca llena de comida haciendo que su hermana virara los ojos.

- No hagas eso - niega con una mueca de asco en su rostro -, Daniel.

- Si.

- ¿Qué harás aquí solo? Yo tengo que trabajar - da un ligero vistazo a su hermano -. Últimamente he estado llegando tarde a casa y... Bueno, no quiero que pases tanto tiempo a solas.