¡L O V E M E, D A R L I N G! [Utaite]

°Muy inmaduros°

"Después de todo, nunca podría..."

[Soramafu]•°•🌈

Últimamente estaba sintiendo miradas en mi espalda de vez en cuándo, aún si estaba acompañado, sentía que unos ojos se clavaban en mi cuello. No era algo especialmente amenazante sin embargo sí un poco incómodo.

Hice mis mejores conclusiones, analizando con detalle la situación (nótese mi sarcasmo) y llegué a una resultado.

¡Soraru-san!

Estaba seguro de que esa mirada era la suya. Era un poco enfermo, y me sentía levemente orgulloso de reconocerlo. Además, en una ocasión intenté reconocerle por el rabillo del ojo y alcancé a ver un rizo azabache.
Intenté evitar una carcajada, ya que estaba solo, pero fue muy gracioso.
Había algo muy particular quitando esa excepción, y era que sólo me miraba un poco si estaba con Ama-chan.

Y con esto puedo decir que Soraru-san estaba celoso. Cada vez que pienso en ello sonrío un poco, sólo un poco presumido.
Soraru-san era uno de los más destacados en el instituto ya que es muy, muy guapo, y genial ¡Soraru-san es muy, muy genial!
Llevaba cerca de un año siendo su novio, al principio muchos de las personas insistían en molestar acerca de ello con muchísimos rumores, pero al ver que ninguno les prestaba atención pararon luego de algunos meses.

Soraru-san me espera fuera de mi clase a la hora del almuerzo, mis amigos ya le conocen así que me llaman o simplemente lo molestan un poco. También por lo general al verme acariciaba mi cabeza o recostaba la cabeza en mi hombro por unos segundos.
Creo que todos sabían que éramos algo, comenzaron a vernos muy natural.

Ahora, me emocioné mucho hablando sobre nosotros...¡Ese no era mi punto!

¡Soraru-san estaba celoso de Ama-chan!

[...]

—¡Mafu~!¡Soraru-san te busca!— faltaban aún tres minutos para que el receso comenzara. Sakata hablaba con él mientras terminaba mis apuntes—. Sabes, no puso atención en toda la clase de química, seguro pensaba en tí— di una pequeña mirada y le pegó su codo en el estómago.

—¡Ey! ¡Que vergüenza!— toco mis mejillas y muevo un poco la cabeza al levantarme—. Pero~ podrías tener razón~.

—Hola— siento sus dedos remover mi cabello—. Tienes que poner atención~— regañó y me dió dos golpecitos en la cabeza.

—¡Sip!— sonreí. Ambos comenzamos a caminar.
Me gustaba ver a Soraru-san con su típico suéter azul rey, lo hacía ver aún más pálido y un poco alto—. Soraru-san, te quiero besar...— es eso o comenzar a suspirar, en serio quiero mucho a Soraru-san.

—Afuera ¿Bien? Yo también quiero— me guiña un ojo y de seguro mi cara está roja.

Ambos pasamos por las partes más alejadas en el jardín y un poco escondidos se acercó a mí y comenzó a plantar besos en mis labios. De vez en cuando con su pulgar daba cariño a mí rostro y esto me causaba muchísimo sueño.

—Wa~, estaba deseándolo, lo juro— dijo.

[...]•°•♥ Soraru←

Sabía que Mafu siempre había sido muy amigo de Amatsuki, lo sabía, pero de alguna manera desarrollé ciertos celos.
A veces los topaba juntos, pasaba por desapercibido y bueno, los observaba.

No tengo ninguna duda de Mafu, no es que no confíe en él, por eso no creo que tenga que ser posesivo, pero no puedo evitarlo.
Admitía que era algo posesivo, Mafumafu no era una cosa, lo sabía.

A veces caminaba con él mientras se abrigaba con un liso suéter rosa o blanco, a las personas les llamaba la atencion, una persona bonita, alguien tan llamativo...
Después de todo las palabras pasadas son vacías, si eran celos sin una razón válida.
Aunque tal vez los celos nunca tienen una razón válida, tal vez sólo se trataba del apego emocional, tal vez demuestran confianza o desconfianza, tal vez recalcaban lo perdido que estaba una persona en la inseguridad de la realidad solitaria, sí, tal vez era eso.
No creo que tuviera miedo en que me dejara, pero era cierto que era como mi sol.

Era muy posible que él ya supiera, Mafu no era alguien estúpido, nunca me empeñé en que no me notara especialmente.

[...]

Estábamos en el jardín, besándonos, las manos, bueno, un poco descontroladas.

Sólo un poco.

No evitaba suspirar, el albino pasaba sus manos por todo mi pecho, bajaba un poco, sin una pizca de vergüenza.
Yo por mi parte tocaba su cintura. Nos quedabamos sin aire, nos unía un hilo, se sentía un poco lascivo, tentador, digo, era algo que no se suponía que podíamos hacer, claro que era tentador.

Me observó, era la vista de una laguna en los días soleados, su cara estaba rojísima, y sonrió, me vió sorprendido y feliz, como diciendo "¿Qué fue eso? ¡Estuvo genial!"

Muy inmaduros.

[...🌈]

Volvimos a clases con normalidad, los dos nos sonreíamos algo tímidos pero de alguna manera estaba bien.
Tuvimos que separarnos al llegar a su salón de clase, le acaricié la cabeza y le susurré un sutil "nos vemos".

Se me hacía costumbre mimarlo sólo un poco al verlo y al despedirme.

Después de esto mis miradas a Amatsuki se fueron, algo hizo que dejara de hacerlo, no sabría decir que fue. Tal vez ese pequeño e íntimo momento con Mafu me puso de tan buen humor que se me pasó, o no tenía sentido, no tenía respuestas.

Ya faltaban a penas unos minutos. Si algo me gustaba de mis últimas clases era que nuestro profesor de matemáticas nos dejaba salir un poco antes, me daba tiempo para esperar a mi novio en el pasillo.
Sonó la campana y lo vi guardando sus cosas, tomó rápidamente todo tirándolo al bolso y me daba miradas impacientes.

Al salir debió percibir mi sonrisa enternecida por el simple hecho de verlo, ya que me la devolvió con mucho gusto.

Eso pensé, sin embargo cierto bicho le picó y quiso interrogarme mientras caminábamos a la salida. 

—¿Soraru-san, estás celoso?— me sorprendió un poco aunque lo veía venir. Río, digo se burló.

—E-es normal, digo, tu estuviste celoso también cuando aquella chica se confesó...

—Yo no te espie— me hizo un puchero y quitó la mirada.

—¿Estás enojado? No lo volveré a hacer, lo siento— le toqué su hombro esperando por alguna reacción. Me vió a los ojos, serio, sentí un poco de escalofríos. 

—Umm, podría pensarlo, pero, con una condición... Quiero un beso— lo dijo conqueteando, probablemente. Pero en sus adentros también se estaba riendo. No pude evitar carcajear, le tomé con cuidado por el cuello y planté un pequeño beso. 

—¡AH! Los vimos ¿Pensaron que no había nadie verdad? En la escuela, ¡Diablos, no presuman!— dijo Sakata, por un momento sentí mi corazón en la garganta, vaya susto.

—Ehh...cállate. 

Se sonrojó, demasiado, hasta me preocupaba que le diera algo. Siguieron molestando, pensé que nunca pararían.

¡¡Ah, demasiado inmaduros!!

[🎠]

Noestoymuerta

Hola, hola~

Gracias por leer!!! Espero les haya gustado

Estoy editando las otras obras porque juro que hay errores que me dieron miedo D:

Cuídense muchoooooooo 💓 Y denles mucho amor a los utaites sip sip

🎠Nn🍭