CAPÍTULO 6 "SUS DESEOS SON ÓRDENES"

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Volvieron al lugar por donde habían entrado deslizadas, por esos dos túneles,intentaron subir por ellos, pero eran bastante resbaladizos, así que fueron pensando y buscando soluciones para salir de allí.

Al final de el área de la ilusión ,había dos pequeñas montañas en las que, en la cima se veía algo de luz distinta a la demás,pero no tendrían tiempo para llegar allí, y aparte, nadie sabía si esa luz no era de fuera.Mía pensó que en esos momentos, le vendría bien un hipogrifo, ese animal mitad caballo y mitad grifo que siempre leía en esos libros de Harry Potter,pero pensó que era algo imposible.Al momento de tener ese pensamiento en la cabeza,de ésas montañas se veía una forma de águila,gritando,dirigiendose hacia ellas y haciendo sonidos para llamar la atención.Mientras más se acercaba,más grande era y más sonido hacía,así que Mía y Avril se esondieron detrás de dos rocas que se encontraban justo enfrente suya,por si podía ser algún tipo de peligro que les afectase.

Tras esconderse y ver qué era lo que había llegado del cielo,las dos quedaron boquiabiertas,el hipogrifo del que estaban hablando,había aparecido unos segundos después de haberlo imaginado y deseado.Su pelaje era de varios colores,tonos grises fuertes,bronce,castaño brillante y algunas partes color negro tinta,al igual que su plumaje.Sus alas eran enormes,y sus garras aterradoras.En cambio, éste era bastante doméstico de naturaleza.

-No puede ser.-susurraba Avril, con miedo de que fuese peligroso.

-Pues sí, parece que todo esto es real,y que vamos a tener que ser bastante valientes Avril.-dijo Mía.

Mía se levantó después de decir aquello,y con cuidado fue a montarse en el hipogrifo.Los ojos anaranjados y brillantes del hipogrifo no desviaban la mirada de los de Mía, una mirada respetuosa y tranquila,hasta que Mía alzó el brazo hasta su cabeza,y le acarició conseguiendo montarse en él sin ningún tipo de pega. Avril la seguía,y aunque le costó algo montarse en el hipogrifo, lo hizo,ya que puso algo de esfuerzo.

La criatura despegó con cuidado acariciando el agua morada de el riachuelo con sus garras y planeó a gran altura,desviándose por los túneles y saliendo de el área de la ilusión con Avril y Mía sobre su dorso.

Tras un largo tiempo de viaje,ya que entrar por el portal no era lo mismo que salir,llegaron al espejo,y el hipogrifo les dejó justo antes de éste,ya que su cuerpo no era el mismo que el de Mía o Avril.

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