Un Amor Prohibido ; b.d

Capítulo 6

Jeff POV

Sandra es guapa, muy sexy... si sigo pensando en su cuerpo voy a comenzar a sangrar de la nariz y tampoco quiero tener una erección, da una buena impresión Jeff, piensa en sangre, en dolor y muerte. No te voy a negar que eso me gusta aún más.

En la cabaña (creepyhouse)

___ POV

Ya estaba lista para irme, era bastante tarde así que debía regresar a mi hogar.

— Chicos, fue un placer compartir con todos ustedes esta tarde pero ya debo irme, debo hacer cosas importantes —les sonreí a todos—

— Claro, adiós, ¡cuídate!

Todos me devolvieron la sonrisa menos Sally, no la conozco pero ya creo que le caigo mal. Salí por la misma puerta por la que había entrado a la linda cabaña y me dirigí a la entrada del bosque, camine y camine hasta que llegue a mi hogar.

Ok... ___ respira, tranquilízate, tu mamá no te hará nada. No creo, es bastante agresiva. Me acerque a la puerta y podía oír los gritos de mi madre.

— ¿¡Dónde mierda esta!?

Se podía oír como caían cosas dentro de casa, esta vez esta muy molesta... pero, debo entrar.

Cuando me digne a entrar mi mamá se dio la vuelta de una manera exagerada, se acercó peligrosamente y me empezó a gritar, quien pensaría que esta señora es peor que uno de los asesinos que conocí esta tarde.

— ¿¡Dónde andabas metida, como se te ocurre desaparecerte así como así, te mandas sola o que!? —mientras me gritaba me daba empujones y me apuntaba con el dedo, también empezó a apretarme el hombro y sacudirme. Dolía pero no importa.

— ¿Qué tiene? siempre cumplo con tus deberes mamá, déjame tranquila —trate de despojarme de su agarre pero fue peor, se puso como loca y comenzó a gritar más fuerte y a tirarme el cabello— ¡Suéltame, déjame en paz, me duele! —empece a tironear con ella— ¡deja de joder, estas loca! —le grité de vuelta a sus griteríos—

— ¿¡Así tratas a tu mama, idiota?! —no se de donde pero saco un cuchillo y me lo enterró en la pierna izquierda, no pude aguantar el grito de dolor.

— ¿¡Qué haces mamá, qué te pasa por la cabeza, por qué lo hiciste!? —gritaba mientras las lagrimas corrían por mis mejillas, mientras yo lloraba, ella seguía histérica y me hizo un corte en el estomago, dolía, dolía demasiado, trate de separarme y ella me soltó.

— ¿¡Qué hice?! perdón, hija mía, perdóname —en sus ojos empezaron a brotar lagrimas e intento acercarse a mi para ayudarme, estaba apenada—

No me importo que quisiera ayudarme, ya me hizo bastante daño, loca, corrí su cuerpo con un empujón y me fui cojeando mi habitación. 

No puede ser que esto haya pasado... nunca había sido tan agresiva, si me golpeaba o tiraba el pelo y cosas así pero nunca había llegado a este extremo, debo limpiar las heridas, duele mucho, mientras me dirigía al baño de mi cuarto las lagrimas corrían por mis mejillas hasta llegar al suelo, lo mejor sera bañarme.

Luego de unos minutos de ducha trate de desinfectar y vendar mis heridas, ardían muchísimo, cuando termine mi trabajo me fui a acostar como pude a mi cama.

— Esto no se va a quedar así, mamá. —susurre para secarme las pocas lagrimas que aun tenia en mis ojos.

A las 2 de la madrugada me levante de mi cama, me vestí con una capucha roja y mis vaqueros negros y converse blancos, había pensado casi toda la noche en lo que haría. Baje a la cocina y tome un cuchillo, el más afilado que tenía en el momento, subí al cuarto donde duerme mamá y verifique si estaba dormida, sus ronquidos me confirmaron lo que buscaba, me acerque a su cara logrando que ella despertara asustada, se tranquilizo al verme a mi aunque no le duro mucho hasta que vio el cuchillo que traía entre mi mano.

— Hija ¿qué haces con ese cuchillo? —pregunto con la voz un poco agitada—

— Oh, ¿este cuchillo mami? —le pase la punta del cuchillo por el cuello— es que mamá, lo que pasa, es que ya me aburrí de tus abusos, lo de la tarde no lo perdonare. 

— Hija, perdón yo no quería, lo juro, no me controle —hablaba entrecortada mientras sollozaba por el miedo.

— Lo siento mamá.

Le sonreí con una sonrisa psicópata que no pensé que tenia, empece a reír y la apuñale. Uno, dos, tres... perdí la cuenta de cuantas veces fueron pero su sangre gorgoteaba por su pecho hasta llegar a la cama. La satisfacción era increíble, los gritos de mi madre iban cesando con cada apuñalada que daba.

—  Calm, you won't feel anything —fueron mis ultimas palabras hacia mi madre mientras yo sonreía y lamia un poco de sangre que quedaba en el cuchillo.

Lo hice, la maté, mi madre estaba muerta frente a mi, y la sensación de superioridad es increíble. Estaba todo lleno de sangre, su cama, la pared, mi ropa y mi cara, que bueno que mi capucha es roja. Debo salir de acá, se oyen las sirenas de la policía... seguramente los vecinos llamaron cuando escucharon los gritos de mi "bella" madre. 

Huí por una de las ventanas traseras y corrí hacia el bosque, por el momento el único sitio al cual tenía para ir era la cabaña de Slenderman. La corrida fue infinita, logre llegar sin que notaran mi presencia en el camino. Entre por la puerta sin tocar dejando sorprendido a los presentes en el lugar y boquiabiertos por mi aspecto.

— ¿___ qué te paso, estas bien? —todos los presentes se acercaron a ver mi estado.

— Si chicos, estoy bien —tome unas bocanadas de aire— lo que pasa es que tuve una discusión muy agresiva con mi mamá, ella la me había maltratado en el pasado pero esta vez, se paso y me apuñalo en la pierna —apunte a una de mis heridas— no podía dejarlo pasar y termine asesinándola, no tengo donde ir, por eso estoy acá... —seguí contándoles otros pequeños detalles, con cada palabra ellos quedaban más sorprendidos que antes, aunque sin miedo ya que bueno, eso es algo normal en su día a día.

— ¿Estás bien? pasar por eso lleva mucho estrés —me preguntó Ben—

— Si, estoy bien ¿creen que la policía me haya seguido? —pregunté un poco agitada aun por la corrida que hice—

— No te preocupes, normalmente a este bosque la policía no entra —había hablado Nina, la aprendiz de Jeff—

— Uff bueno —me deje caer en el suelo mientras reía como una maniática—

— ¿___, estas bien? —se me acercó Eyeless Jack, es muy amable—

— ¡Si! —grité mientras seguía riendo—¡estoy bien, estupenda!

— Creo que ya va siendo hora de llamar a Slenderman —Nina le susurro a Jane—

Jane sale de la sala para volver a los cinco minutos con Slenderman él cual estaba en su laboratorio estudiando sus cosas. 

— ¿Qué sucede, qué paso aquí? —Slender se acerca a mi y comienza a preguntarme— ¿___ estás bien?

Comencé a narrarle lo mismo que le había dicho a los chicos y el escuchaba atento a lo que yo contaba.

— ¿Tienes donde quedarte? —trató de levantarme del piso con amabilidad—

— La verdad, no tengo donde ir, el primer lugar en el que pensé fue aquí.

Slender al escuchar mis palabras decidió que me quedaría con ellos, podía ver unas caras de disguste y a varios también les agradaba la noticia. Me asignaron un cuarto cerca de la habitación de Ben ya que era con quien más cercanía tenía.

— Bueno, desde este momento eres parte de la familia, siéntete cómoda en nuestro hogar —varios estaban emocionados y me sonreían, agradezco mucho la amabilidad de Slender. 

— Muchas gracias Slenderman, sera un gusto vivir con ustedes —les sonreí a todos por la oportunidad—

//Hola tengo hambre, les dejo la actualización jiji.//

Franzriki