Feeling

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15 de noviembre de 2042
01:53 am
Casa de Gavin.
Detroit.

Androide y humano se encontraban en el sofá. El ojiverde algo ebrio debido a que había visitado un bar y Nines pudo dar con su ubicación y sacarlo de ahí, y el ojiazul intentando hacer que el humano se duerma.

Iban a ser las dos de la mañana. La casa de Gavin estaba a oscuras solo siendo iluminada por la luz de la luna que entraba por la ventana.

Nines estaba pensativo, pues hace tiempo que sentía cosas por su compañero e intentaba convencerse de que no sentía nada y que no debería sentir. Pensar que la persona que le gusta es alguien que no tiene gran aprecio hacia los androides era, de cierta forma, doloroso. ¿Él tenía que gustarle?. Y además, ¿Cómo?. El androide no lo sabe, pero supone que fue porque vio más cosas buenas que malas en el detective, dándoles el valor que necesita ya que Gavin no se sentía como una buena persona. Sabía que en ciertos momentos se comportaba como un hijo de puta, pero ahí estaba Nines para resaltarle lo bueno que hay en él.

Nines, cansando de esperar sentando en el sofá a que su compañero caiga dormido, decidió agarrar la guitarra que se encontraba allí y tocar un poco. Ya lo había hecho antes, su voz grave a la hora de cantar era una hermosa melodía, eso pensaba Gavin cuando lo escuchó por primera vez.

No tenía inspiración en ese momento y no quería cantar ni tocar algo que estaba en su programa, quiso tocar algo que salga de él, algo que exprese lo que sentía en ese momento. Con esa idea se dejó llevar y comenzó a tocar la guitarra, siguiendo con su hermoso canto.

I've felt this way.
Oh no,
I really shouldn't stay.

I've felt so strange.
Will you talk to me again?

But I really shouldn't stay.

… ♫

Yeah I really shouldn't stay.

… ♫

Era corto, pero era hermoso y lo suficiente para describir lo que sentía en ese momento, justo lo que quería.

El led del androide se encontraba en amarillo, suspiró cuando terminó de tocar y se apoyó en el respaldo del sofá.

—Te gusta alguien, ¿Eh? —habló un ebrio y algo sobrio Gavin, relajado después de escuchar la hermosa melodía y voz de su compañero.

—Sí...  —contestó y dirigió su mirada hacia Gavin para luego apartarla y decir:
— Me gustas tú, Gavin.

¿Qué hubiera pasado si se hubiese confesado a un sobrio Gavin? De seguro lo despreciaría y odiaría, ¡Vamos! Su compañero odiaba los androides y él era uno de ellos, ¿Por qué sería diferente?

—Tú también me gustas —confesó Gavin.

El led de Nines giró en rojo al sorprenderse, pero no quiso creerselo. Gavin estaba borracho y creía que no pensaba lo que estaba diciendo, pero no sabía que el ojiverde estaba algo sobrio y era lo suficiente para saber lo que estaba diciendo. Sin embargo, no le creyó y decidió ignorar lo que había dicho el detective.

—Duerma un poco. Mañana debemos trabajar, detective —dijo Nines con tono apagado.

Gavin asintió con su cabeza y apoyó ésta en el hombro del androide, provocando que su led vuelva a girar en rojo. Nines apretó su mandíbula e, inseguro, reposó su cabeza en la contraria, esperando a que su compañero se duerma.

···

Gavin se despertó en su cama y con dolor soportable en su cabeza, después de todo, no había bebido tanto como para que le duela demasiado. Frotó sus ojos con los puños cerrados y despeinó aún más su cabello, comenzando a recordar la noche de ayer, la manera hermosa en cómo el androide cantaba y tocaba la guitarra y cómo ambos se habían confesado de manera repentina. También recordó el tono triste y apagado de Nines cuando le dijo que durmiera, ¿Por qué estaría así? Era correspondido, ¿No debería estar feliz?. Sin saber la respuesta a las preguntas, se paró de su cama lentamente y salió de la habitación.

One Shots 『Reed900』Detroit: Become HumanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora