One Shots / Martia

No digas nada - Martia

*MARTA*
Me levanté de la cama súper enojada por qué pusieron el puto canon de Pachelbel
- Si se me cruza alguien le doy una hostia que le dejo las neuronas bailando- pensé.
Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando alguien tiró de mí brazo antes de que pudiera abrir la puerta para salir de la habitación, me abrazo, no lo correspondi al instante porque no sabía de quién se trataba
-Buenos días Martita- Dijo
Era la rubia, sonreí al darme cuenta quién era.
-Buenos días Mari- le respondí ahora sí correspondiendole abrazo.
Me dio un beso en mí cachete y salió de la habitación, al darse cuenta de que no salí con ella, retrocedió los pocos pasos que había dado y la escuche lejos de mis pensamientos decirme
- ¿No vienes? - chasqueo los dedos unas cuantas veces en frente de mí cara al darse cuenta de que me había perdido en mis rayadas mentales.
Pestañe unas cuantas veces para volver a la realidad
- ¿Que?- le pregunte frunciendo el ceño.
Se rió, no pude evitar hacer una pequeña sonrisa cuando la vi riendo.
- Que si vienes, ya están todos desayunado y en 30 minutos empiezan las clases...-
- yo eh.. , si , si a...ahora voy-
- Ya me dirás en que tanto piensas- La escuché reírse mientras seguía su rumbo hacia el comedor.
- Dios Marta céntrate o se va a dar cuenta y no es la idea- Pensé tocandome la cara.

▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬

   Tuvimos repaso de gala, no me quedé contenta con la actuación que hice en la gala 3, las palabras de Manu y ver que todos mis compañeros apoyaban a Alba, me destrozaba poco poco, nadie se daba cuenta de lo mal que estaba, mis ojos estaban cristalizados apunto de explotar, pero me contuve.
  Termino el repaso de gala y fui la primera en salir, me metí en la habitación que por alguna razón la dejaron abierta. Enterré mí cabeza en la almohada, deje salir todo lo que tenía retenido, sentí que no iba a parar nunca hasta que sentí como se hundía una parte del colchón.
- Martita.....- la escuche decir mientras colocaba una mano en mí espalda.
  Me acaricio hasta que mi llanto cesó,me senté en la cama y la abrace, la abrace lo más fuerte que pude como si se tratara de la última vez.
- Marta - suspiro, agarró uno de los mechones que caían sobre mí rostro y lo coloco detrás de mí oreja.
- ¿Me vas a contar que pasa en esta cabecita? - Señalando mí frente mientras sonreía.
-No... No pasa nada Mari - Bajé mí cabeza.
Agarro mí barbilla obligando a qué la mirara.
- Porfa - Haciendo un puchero.
Me levanté de un tirón, lleve mis manos a mí cara.
- ¿De verdad quieres saber que me pasa?- le pregunte mirandola fijamente a los ojos
- Claro Marta - Se levanto de la cama y se puso a mí altura.
- Cuéntame morena - Me dijo con una sonrisa ladiada.
Cerré los ojos y suspiré.
  Agarré su cadera pegandola a la pared de la habitación.
- Maria - Bajo su mirada hacía mis manos que estaban posadas en su cadera. Me gustas mucho. Su mirada volvió a posarse en mí ojos un poco sorprendida pero prestandome atención. -Cuando nos tocó juntas en la primera gala sentí una conexión especial entre noso...- Me interrumpió
-No digas nada Marta- Poso sus labios suavemente sobre los míos esperando  que le correspondiera.
  Mi pulso se aceleró pero no tarde en corresponderle, llevaba esperando este momento unas semanas, sentí sus manos subir  por mí espalda hasta relajarlas en mí nuca obligándome a no separame, tampoco pensaba hacerlo.
Al cabo de unos minutos se separó.
- Tu también me gustas Marta... y mucho- Dijo unos pocos centímetros alejada de mis labios.
  En esos pocos segundo alcance a ver sus ojos, desprendían un brillo precioso.
Volvió a juntar nuestros labios y nos fundimos en un beso tierno y tímido.