*María*
Llevo casi dos años de novia con Marta, soy muy feliz, la amo demasiado, es mí persona pero la eh cagado.Ayer salí de fiesta con Afri, bailamos, tomamos, volvimos a bailar y volvimos a tomar hasta que me choque con un chica, nos pusimos a bailar, nuestros cuerpos se iban uniendo cada vez más al ritmo de la música y me beso yo se lo correspondi pero a los segundos me separé y me aleje de la chica, no sabía porque lo había hecho busque a África para irnos de allí.
Estaba desayunando con Marta, me estaba contando el sueño que habia tenido esta noche, espero a que termine para comenzar a hablar yo.
-Marta-
- Ya veo que no te a hecho ninguna gracia mí sueño- Dijo clavando su mirada a mis ojos.
-No es eso- Mire a mí café mientras lo revolvía.
-¿Que pasa?- Busco mí mirada.
Algunas lágrimas se empezaron a deslizar por mí mejillas.
-Me lie con otra chica- Dije mientras la miraba y secaba mis lágrimas.
Su sonrisa se borró de inmediato, se quedó mirándome esperando a que le diga que es una broma o algo por el estilo. No me dijo nada, se levantó, fue al cuarto y cerro la puerta, la seguí, golpee repetidamente esperando una respuesta.
-Marta- Volví a tocar - Marta respóndeme por favor- No podía parar de llorar, tenía un nudo en la garganta.
Marta salió, salió del cuarto por fin, tenía una de sus mochilas colgando en su hombro, me miró, sus ojos estaban completamente cristalizados, me abrazo, me abrazo muy fuerte y volvió a mirarme, cruzo el pasillo y la seguí, abrió la puerta.
-¿Que haces? ¿A dónde vas?- Le pregunté confundida.
- Te quiero Mari, te quiero mucho- Comenzó a llorar y se fue.*Marta*
- Me lie con otra chica- Me dijo María.
Me quedé mirándola esperando a que me diga que es una broma pero no sucedió, me levanté de la silla y fui al cuarto, escuche los pasos de María, me estaba siguiendo, cerré la puerta, comencé a llorar, comencé a llorar en silencio, escuche a la rubia llamarme un par de veces, guarde un par de cosas en mí mochila y salí del cuarto, la mire, no pude contenerme y la abrace, no podía hablar, quería preguntarle porque lo había hecho, las palabras no salieron, seguí caminando y volvió a seguirme, cuando estaba apunto de cerrar la puerta e irme la escuche.
-¿Que haces? ¿A dónde vas?- Su voz estaba completamente rota.
- Te quiero Mari, te quiero mucho- Rompí en llanto y me fui.
Me coloque los auriculares y comencé a caminar sin rumbo alguno, mí llanto no cesaba, llegue a un parque y me senté en el primer banco que ví, me seque las lágrimas aunque fue inútil porque seguí llorando, pensé, pensé demasiado no sabía porque lo había hecho, prendi el celular y tenía varios mensajes y llamadas de María, los ignore, no queria hablar con ella.Después de varios minutos llame a Natalia.
- Hola Martukaaa- Me dijo.
- Hola Nat- Intenté finjir felicidad
- ¿Marta? ¿Que pasó?-
Volví a romper en llanto
- ¿Donde estas?- Me dijo con un tono preocupado.
- En el parque cerca de pisito- conseguí decir.
- Quédate ahí, ahora voy a buscarte-Al cabo de unos 15 minutos vi a Nat caminar hacia mí dirección, no me levanté, no tenía fuerzas tan solo espere a que ella llegara.
-Marta- Se sentó a mí lado en el banco - ¿Que a pasado? Me dijo mientras acariciaba mí espalda.
La abracé y comencé a llorar otra vez
-No hace falta que me lo cuentes ahora- Me dijo sin separarse de mis brazos.Perdí la noción del tiempo hasta que Nat me dijo que vaya con ella. Agarro mí mano y caminamos hacía su auto, en el transcurso hacía su pisito conseguí explicarle un poco lo que había sucedido, María seguía llamándome pero no tenia el valor para contestarle, Natalia me arrebató el celular.
*María*
No sabía nada de Marta, no conseguia contactarla, la llamé varías veces pero fue inútil.
Me puse música para despejarme un poco pero no podía parar de pensar en Marta, le mandé un mensaje a Afri para que viniera.
Al cabo de unos minutos África abrió la puerta ya que tenía llave del piso, se acercó a mí que estaba sentada en el sofá y me abrazó, espero a que esté más tranquila para hablarme.
-Llamala otra vez, venga, por probar otra vez no pierdes nada cariño- Me dijo mientras colocaba uno de los mechones que colgaba sobre mí rostro detras de mí oreja.
Le respondi con una sonrisa ladeada, marque otra vez el número de Marta esperando a que me conteste.
-Hola Mari-
-¿Natalia?-
-Si rubia, estoy con Marta-
-Pasamela- Le dije con la voz rota.
-No quiere hablar, lo siento cariño, cuídate te quiero muchísimo-
-Espera!- alcancé a decirle antes que colgará.
-¿Cómo está?- Mis ojos estaban cristalizados.
Luego de una pequeña pausa volvió a hablar
-Ella... ella va a estar bien-
Y colgó.
Lleve mis manos a la cara y volví a romper en llanto, no podía soportar el hecho de que mí morena este mal por mí culpa.*Marta*
Nat comparte piso con Alba, temia tener que volver a explicar lo que había pasado.
-Oye Nat- Le dije mientras secaba algunas de mis lágrimas.
-Dime-
-¿Puedes decirle tu a Alba lo que a pasado? No quiero hablarlo otra vez- Dije cabizbaja.
- Tranquila, yo le explico-
Básicamente me pase el camino al pisito, mirando a la ventana y secando las lágrimas que recorrían por mis mejillas.••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••
Han pasado ya dos meses desde que no veo a María, no eh logrado superarla, la extraño mucho, estoy viviendo con Nat y Alba, ellas siempre me repiten que debería hablarle y yo lo se pero no me animo, tengo miedo, tengo miedo de romperme al escuchar su voz y no poder decirle nada.
La música a sido mi refugió todo este tiempo, canto y tocó la guitarra todo el día tratando de olvidarla.
Me senté en la cama, no pensé mucho o me iba a arrepentir, agarre mí móvil y marqué su número.
-Marta...- Escuche su voz triste.
- Mari...-
Inevitablemente las lágrimas comenzaron a resbalarse por mis mejillas.
-¿Co... cómo has estado?- mí pulso temblaba y mí voz estaba rota.
La escuche tragar
-Solo eh intentado estar, ¿Y tu?-
-igual-
Rompió en llanto y yo también.
-Te extraño- Le dije con un nudo en la garganta.
- Te extraño todos los días Mari, quiero verte, quiero abrazarte, quiero volver a sentirte rubia-
No tuve el valor de saber que iba a contestarme, colgué la llamada.Enterré mí cabeza entre mis piernas, mientras las abrazaba, llore intentando hacer el menor ruido posible, escuche la puerta abrirse supuse que me habían escuchado.
-Martita- La rubia pequeña se sentó a mí lado.
- Ven-
Levanté el rostro y estaba alba esperando con los brazos abiertos, me avalance sobre ella, cuando mí llanto cesó me habló.
- ¿Que a pasado cariño?-
Me separé para mirarla.
- La llame- Baje mí cabeza -Le dije que la extrañaba-
Alba tomo mí mano
- ¿Y que te a dicho cariño?-
- le corte, no me sentí valiente para escucharla-
La rubia no dijo nada solo volvió a abrazarme.*María*
No iba a volver a hundirme, tenía que hacer algo.
Salí del piso y comencé a caminar hacia el de Nat y Alba, hablé con Natalia y me dijo que Marta se había estado quedando ahí, las lágrimas recorrían mí rostro sin cesar.
Subí al elevador, marqué el piso, toque la puerta y me abrió Natalia.
- ¿Mari? ¿Que haces aquí?- Me dijo corriendose a un lado para que pase.
Nat cerro la puerta y aproveché para abrazarla, llevaba necesitando un abrazo desde hace meses.
- Vine a ver a Marta- Dije secandome algunas lágrimas.
- Eh.. Está en su cuarto con Alba, estaba llorando- Me dijo un poco confundida.
Tomo mí mano y me llevo hasta el cuarto de Marta.
-Espera, quédate aquí-
Nat abrió un poco la puerta y llamo a Alba para que viniera.
Cuando Alba me vio, abrió los ojos como platos y me abrazó.Pase al cuarto de Marta, el corazón me iba a mil, tenía un nudo en la garganta. Ella estaba acostada boca abajo, la escuchaba sollozar. Me senté a su lado, las lágrimas volvieron a empapar mis mejillas, levanto la cabeza y abrió los ojos al verme, se sentó a mí lado.
- ¿Que haces aquí?- Me dijo con una expresión deprimida.
- Yo también te extraño, te extraño en cada rincón de la casa, cada centímetro de mí piel te extraña, extraño tu sonrisa, tu mirada, mí alma está vacía sin ti Marta-
Se acercó a mí y me abrazó, volver a sentirla y volver a oler su perfume hizo que mi piel se erizara, se separó lo suficiente para pegar nuestras frentes.
-Mi alma también esta vacía sin ti-
La bese y me correspondió, fue un beso lento, fue un beso dónde demostramos todo lo que nos necesitamos y lo mucho que nos lástima que estemos separadas.
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One Shots / Martia
Genç KurguHistorias ficticias de ex concursantes de operación triunfo.