Supervivencia del más fuerte

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Narra ____

Corrí lo más rápido que pude al departamento que ocupaba antes para verificar si ya había sido ocupado, para mi suerte no. No se como la unidad recupero varias de mis pertenencias pero les agradezco de corazón.

Todo estaba lleno de polvo, abrí el mueble que tenia escondido y saque varias armas, es un milagro que no vinieran a revisar mis cosas.

Todo lo que funcionara para defenderme iba a ser útil, ya había gastado 10 minutos de los 30 que me dieron para escapar.

— ¿A dónde voy?— procesaba lugares en los que podría estar segura, lejos de la familia—. Ahora que lo pienso, alguien me debe un favor— salí con precaución.

Tenia que dirigirme con el eterno rival del Señor Jian, se que sus propio hijo lo odia pero no tengo opción... un hombre sumamente aterrador con solo escuchar su nombre.

Señor He... Padre.

(...)

—Me quedan 5 minutos— caminaba por los pasillos del edificio del Señor He, el padre de He Cheng, solo por esta acción me podría odiar por bastante tiempo. Buscaba ayuda de su padre y no de él. Los escoltas que venían a mi lado tenían una mano puesta en su pistola por si acaso me daba locura y los atacaba. Cuando estuve frente a la puerta de la oficina mi cuerpo estaba lleno de adrenalina, si él no me ayudaba nadie podría hacerlo. Abrí la puerta lo mas "tranquila" que pude. El Señor He era como ver a Cheng un poco más viejo y con su aura mas espeluznante.

—Así que tu querías verme, ¿Qué quieres mocosa?— su voz grave retumbó en mis oídos, se veía enojado, bueno... siempre lo estaba.

—Vengo a cobrar un favor— no quería sonar agresiva pero mi tiempo estaba contado.

—Crees que lo que hiciste es tan importante como para que te debamos un favor, cállate— volvió la vista a unos papeles.

—Señor He, tengo mi tiempo contado. En unos minutos voy a ser buscada para ser asesinada y a mi parecer haberlo salvado hace años es bastante importante— un golpe fue dado al escritorio que me hizo saltar del susto.

—No me interesa que me hayas salvado, yo no te pedí que lo hicieras, la que decidió poner su vida en riesgo fuiste tu— a pesar de su edad seguía siendo un caballero, pero a veces lograba ser muy incomprensible.

—Señor, haberlo salvado a usted hubiera sido motivo suficiente para ser asesinada por mi jefe, él lo detesta y si se entera que le ayude aunque hayan pasado años seria muy peligroso para mí, solo le pido un poco de ayuda. No tiene nada que ver con usted, nadie lo sabrá— estaba apunto de ponerme de rodillas.

—Mocosa, la sociedad es una pirámide... A los de arriba no le interesa lo que les pase a los de abajo, todo esta lleno de anarquismo, corrupción, traiciones y amistades, porque crees que yo, que soy de los mas altos en la pirámide va a ayudarte a ti, alguien de los que se encuentran en lo bajo del orden— me estaba menospreciando pero no iba a rendirme.

—Es la supervivencia del mas fuerte, usted está en lo mas alto y yo en la mas bajo. Usted cree va a sobrevivir mas tiempo según lo que dice porque se considera mas fuerte, pero si viniera algo mucho mas poderoso que usted, también quedaría junto a mi, los mas bajos— sugestionar era buena idea.

— ¿A que te refieres? Tus amenazas no tienen sabor para mí, recuerda con quien tratas— se paro de su silla y camino hacia la ventana de su oficina.

El tiempo había pasado tan rápido que no me había dado cuenta que la hora de la cacería ya había empezado.

—No es una amenaza, es una posible realidad para usted— me volteó a ver sin expresión alguna—. Estoy marcada— levantó una ceja con duda.

— ¿Quién mandaría a matar a alguien tan insignificante como tú?— se burlaba de mi situación.

—Mi propio jefe, ahora exjefe. Estoy siendo buscada por el rival suyo lider de la mafia— me miró fijamente— Si se enteran que estuve aquí no duraran en matarlo a usted también, las mejores fuerzas me están buscando. Me quieren viva o muerta, y de desharán de aquellos que se pongan en su camino— podía ver su rostro por el reflejo de la ventana.

—Lindo— fue su única respuesta y se sentó de nuevo—. Eres mucho mas inteligente de lo que pensé— sus brazos se apoyaron en el escritorio.

—Fui la líder de una de esas fuerzas— me senté frente a él y nos miramos.

—Perfecto, la verdad no me importa a quien manden, no moriré tan fácilmente para que sepas— ofreció su mano para estrecharla—. ¿Qué demonios quieres?— le di la mano como un trato.

—Señor, necesito un vehículo, unas cuantas armas y trampas, una forma de salir de la ciudad y esconderme por un día. Si sobrevivo lo que resta el día de hoy no me molestara más y yo no volveré a molestarlo a usted tampoco— él me analizaba profundamente buscando mentira en mis palabras, pero todo era verdad.

—Hecho— con la mano llamó a uno de sus subordinados para que consiguiera lo que pedí—. Es temprano, son las 7:50 de la mañana, la vas a tener difícil si va a mandar a los mejores por tu cabeza— él sabia que Cheng trabajaba con el Señor Jian, supongo que tenía la esperanza que me matara pero lo que no sabe es que nos amamos como idiotas.

—No se preocupe— hizo una mueca, claro que no se preocupaba el hombre—. Le agradezco lo que hace— me paré y me incline un poco frente a él.

—Con esto no te debo nada— era un amargado hombre de palabra—. Ahora sal de mi edificio, no quiero volver a ver tu cara nunca.



[...]



Narra Cheng

—Señor tenemos problemas— dijo uno de los que me acompañaban, ellos querían atraparla pero yo quería evitar eso.

— ¿Qué?— pregunté, Qiu estaba cuidando de su familia y de He Tian, él no iba a permitir que les dañaran.

—Tenemos informes de que la vieron en la Zona H— ¿zona H...? Es la zona que controla padre.

— ¿Seguro que era ella?— la Unidad Roja se mantenía en silencio totalmente, ellos odiaban lo que tenían que hacer.

—Una mujer pelirroja, altura similar e iba corriendo alerta a todo lo que la rodeaba— explicó.

—Era ella— suspiró Charlie, todos estaban desanimados.

— ¡Tenemos nueva información!— uno de los hombres estaba comunicándose con alguien—. ¡Tiene un carro y está saliendo de la ciudad a gran velocidad! Si no vamos ahora no podremos alcanzarla— gritó y todos se pusieron alertas, agarraron sus armas y subieron a los carros.

—He— me llamó Shanwo—. No podemos hacerlo, si vamos prométenos que no la dañaremos— los demás chicos me veían esperando una respuesta positiva.

—Se lo prometo, hagamos que nada malo le pase— dije y nos subimos en una camioneta y di la orden para avanzar—. ¡Más te vale no morir ____!


[...]


— ¿La supervivencia del mas fuerte, eh?— el Señor He se encontraba viendo por la ventana como el vehículo de la mujer desaparecía por las calles—. No es el más fuerte el que gana, sino el que usa la fuerza de manera inteligente. Suerte mujer, la vas a necesitar— bloqueo su teléfono por donde había hablado.

—Sigamos con los negocios jefe— uno de sus subordinados traía contratos listos para firmar.

— ¿No me puedo divertir un poco? Bueno... volvamos a los negocios con los dueños de esa espantosa empresa— 





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Pocos capítulos repito. Voten eso me anima a escribir :3

bye Unicorniosaurus <3

Busca A La Pelirroja [19 Days]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora