La Indecisión

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Narra ____

Como pude llegué a una casa, el señor que me recibió fue amable, trato mis heridas, aunque si no lo hacia tendría que haberlo amenazado.

¿Hacia donde tenia que ir? Faltaban 7 horas para que termine el día y podré ser libre. Podría mantenerme aquí, los chicos vendrían hablaríamos y reiríamos. Ojala fuera así.

— ¿Esos hombres vienen contigo?— me paré rápido a la ventana y la Unidad venia muy cerca, ¿Cómo diablos me encontraron tan rápido? No ¿Cómo me alcanzaron? Se supone que les llevaba al menos una hora.

—Señor, puede distraerlos y decirles que me dirigí hacia otro sitio, yo saldré por detrás de su casa, gracias por todo— no tenia como pagarle así que le dejé un arma en su mesa, no sabia que iba a hacer con eso pero igual la dejé.

Tenía una tremenda indecisión, ¿estaba a salvo? ¿Podía esperar? ¿Debería seguir huyendo? No lo sabia, tenía que dejar que los demás me ayudaran. Iba a devolverme cuando un sonido bastante fuerte, un maldito helicóptero sobrevolaba la zona. ¿Tanto el Señor Jian me quería muerta?

El helicóptero bajo frente a la casa, yo aproveché y corrí lo mas rápido que pude, había un bosque pequeño cerca, me adentré y espere. Posiblemente sea un equipo grande, no iba a salir ilesa como lo había previsto. Escuché un disparo provenir de la casa, ¿le dispararon al hombre? Tenia que huir lo más rápido que podía.

— ¡Sigan al perro!— ¡¿perros!? ¿Traían perros? Nosotros no usábamos medios tan ambiguos como perros, ¿Quiénes eran ellos? Ahora definitivamente mis probabilidades de sobrevivir se redujeron en gran cantidad, al diablo, contrataron gente.

Mientras mas me adentraba en el bosque mi visita se volvía peor, escuché una corriente de agua probablemente sea un río o algo así. Si entraba y luego me cubría de barro el perro tendría complicaciones para encontrarme y podría poner más trampas. No podía distinguir bien si era un arroyo a un lago pero cualquier cosa serviría mientras no me ataque un animal todo saldría bien.

(...)

— ¿A dónde crees que vas? No sabes nadar, te vas a ahogar— le dije a GuanShan porque insistía en seguir un juguete en el agua.

—P-pero mi j-juguete— parecía que iba a ponerse a llorar por un juguete de dinosaurio que se lo llevaba el río.

—Mamá ¿puedo ir por el?— mi madre estaba sentada a un lado vigilándonos.

—Claro, pero ten cuidado porque las corrientes pueden arrastrarte— me advirtió y me dejó ir, no iba a meterme hasta el fondo pero debía cruzar el arroyo.

—Ten cuidado— fue el consejo de mi hermano, él es tan bueno que no se que haría si alguien le dañara, aunque siendo yo... haría cualquier cosa.

Cuando estaba pasando, mi pie se quedó atorado en un agujero, intenté moverme y salir de ahí pero era imposible, mi estaba cansado y el agua solo me llegaba a la cadera. No lo había notado pero la corriente era bastante fuerte. Las nubes se veían mas oscuras que de costumbre, era una tormenta y yo estaba metida en el agua.

— ¡GuanShan! Llama a mamá— le grité desde donde estaba, él corrió a buscar a mamá y yo seguí intentado salir pero la corriente empezó a subir, el agua empezó a llegar a mi cuello de manera demasiado rápida. Llegó el punto en el que cubrió mi nariz, la garganta me ardía porque terminé tragando agua. Unos brazos me jalaron con fuerza y me sacaron del agua.

— ¡_____!— mi madre venia corriendo, no podía dejar de toser, me costaba respirar, no quería volver a meterme al agua nunca mas— ¡Que bueno que la sacaste a tiempo! Me resbalé en un charco— todavía no veía quien era mi salvador pero le debía mi vida, aunque solo era una niña.

—Te recomiendo aprender a nadar— me dijeron.

— ¡Se nadar!— me quejé, el agua que tragué ya había salido de mi sistema, me sentía mucho mejor.

—Pero no lo haces bien— fue lo dicho por el hombre, mi padre me veía como a un estudiante, es muy cariñoso pero estricto.

—Se que hasta que mi vida no esté en peligro no lo ocuparé— y así fue, no volví a la playa, ni a piscinas por el miedo ha ahogarme.

(...)

—Vamos, vamos, ya casi— el agua llegaba al pecho, no sabia si era mas profundo pero debía ir con precaución. Pude cruzar sin problemas, el aire pegando en mi cuerpo mojado iba a hacer que mi temperatura bajara. Coloque unas cuantas trampas y seguí mi camino.

Había dos carreteras, no sabia si los agentes del helicóptero eran los únicos en la zona, ¿por donde tenia que ir?

— Pues por la izquierda será— caminé con cuidado, ahora si llevaba el arma desenfundada por cualquier movimiento sospechoso.


[...]


Narra He Cheng

Mercenarios. El Señor Jian había contratado mercenarios para la misión y no son para nada discretos, es como si quisieran darse a conocer, unos malditos bastardos. La única casa de las cercanías le pertenecía a un hombre, ellos le intentaron sacar información e irrumpieron en su casa, al no encontrar nada lo mataron.

—Suelten al perro— bajaron a un perro del helicóptero y lo dejaron libre, uno de ellos sacó una camisa que reconocí de inmediato.

— ¡Malditos! ¿Por qué tienen esa camisa?— la prenda de ropa pertenecía a la pelirroja, después de todo es la única que usaría una camiseta de una serie como Hannibal.

—Tenemos un trabajo y nos proveen los medios— acercó la prenda al perro y se puso a olfatear el suelo, luego se puso a ladrar hacia el sur—. ¡Sigan al perro!— empezaron a correr sin esperarnos.

—Maldito seas— refiriéndome a Jian, seguimos a esos tipos, al menos se _____ decide matar, ellos serán los perjudicados.

El bosque era denso, no sabía como la pelirroja había pasado tan rápido pero nos llevaba como 15 minutos o más de ventaja. Cruzando el río, una granada explotó hiriendo a algunos de esos tipos. ¿Por qué todos eran tan ingenuos, van cazando a una cazadora. Se pusieron unas gafas, visión nocturna, esperando no caer en otras trampas.

Nos encontramos con un cruce, no había letreros ni nada por el estilo.

— ¿Por donde?— consultó uno de ellos.

—Da igual, por donde vaya esa mujer va a caer en una trampa del equipo 2— así que por eso se veían tan despreocupados.

—Como si fuera a caer en algo tan tonto como una trampa, ella es muy precavida— fue lo que dijo Charlie. Justo cuando terminó de hablar una gran explosión se vio desde le otro lado del bosque.

—Pues si lo es, ya la tenemos. [Equipo 2, disparan a quemarropa]— hablaron por medio de radios, los disparos empezaron a sonar a la lejanía. Todos corrimos hacia el escándalo esperando que esa pelirroja no haya muerto.


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Bye Unicorniosaurus <3

Busca A La Pelirroja [19 Days]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora