Hoy me desperté con una motivación nunca antes vista y probablemente tenía que ver con que ayer me di cuenta de lo importante que es la amistad. Hoy estaba decidida a aclarar todo con el Diego, después de todo es uno de mis mejores amigos, no soportaría perderlo.
—Buenos días bebé—me abrazo la Mica cuando llegue a mi puesto, se veía feliz y eso me contagio también.
—Ay Mica—dije riendome—porfa, amanece así todos los días.
—¿Por qué tan felices?—se rió la Feña llegando a nuestro lado.
—Porque ganaremos el campeonato y nos iremos a la nieve—dijo el Nacho aplaudiendo.
—Obvio que ganaremos po—agrego el David abrazando a la Feña, se veían tan lindos.
—¿Que equipo?—preguntó la Mica en tono de broma.
—Linces—respondí riendo.
—¿Qué equipo?—pregunto nuevamente apuntando su oreja.
—Linces—repitió la Feña.
—Con la mente en juego—gritamos al mismo tiempo. Los chiquillos nos miraron raro pero luego se rieron.
—¿T de Troy?—dijo el Nacho burlón.
—Mucho high school musical—dijo el Max llegando a mi lado, le sonreí amigable.
—Ah—dijo el David recién entendiendo de qué hablábamos. La Feña lo miro poniendo su mano en el pecho indignada.
—Lo siento David, pero no podemos ser pareja—negó con pesar.
—Perdón, no tuve infancia—se rió dejándole un beso en la frente, la Feña se sonrojo.
—Son demasiado lindos—dijo la Mica mirándolos enternecida.
—Si hueon—dijo el Nacho—Ojalá duren mil cabros. Miren, el Diego.
—Hola—Saludó él llegando a nuestro grupo—¿A que hora comienza todo?
—En un rato más debemos ir a prepararnos—respondió el Max—Oye, quería hablar unas cosas contigo.
—¿Qué cosas?—preguntó el Diego indiferente.
—Después lo hablamos—respondió el Max indiferente también. ¿Qué les pasa a estos dos?
—Ya, preparemos las cosas pa vender—dijo la Mica después de que nos invadió un silencio incómodo.
La Pía llegó justo cuando comenzamos armar el puesto así que se sumó de una, verla me hizo recordar que aún no le enviaba su user al Kevin, así que les dije a las chiquillas que me dieran un segundo y lo hice.
—Hueona yapo—se quejo la Feña, la mire y estaba seria pero no tardó en reírse.
—Listo—le guiñe el ojos.
—¿Que onda?—la Pia reviso su celular y se sonrojo—¿Le diste mi insta?
—Uy—la molesto la Mica entendiendo, la Feña también la empezó a molestar.
—Fue una buena idea cambiar la bebida por café—comentó desviando el tema, me reí.
—Y los completos por selladitos—dije ayudándole.
—Cambien el tema no más—dijo la Mica.
Los cursos comenzaron a salir y se fueron a buscar un lugar para ver la semifinal, según tenía entendido hoy sería la final también. Así que el ambiente estaba cargado de emoción, el que los equipos fueran mixtos hizo efectivo que muchas más personas fueran espectadores.