Me gustas y punto

Delirio

Se separó lentamente pero yo no quería, lo necesitaba cerca, sentir otra vez aquel suculento beso que había saciado todos mis deseos

Mis dedos agarraron su cabello con fuerza, tirando de él hasta que noté cómo un gruñido salía de su garganta. Nuestros labios se tocaron una y otra vez, nuestras lenguas juguetearon en un ritual de fuego. Parecía que ambos competíamos por ver quién era más rápido, más profundo, más placentero

Nos separamos unos segundos para coger aire, noté la cálida mano de Gabriel introducirse bajo mi camisa pero esto estaba llegando muy lejos

Finalmente nos distanciamos el uno del otro con la respiración agitada mientras nos mirábamos a los ojos que estaban llenos de excitación

No pude evitar relamerme, él al presenciarlo sonrió pícaro. Me estaba volviendo loca, no sería capaz de ignorarle después de tal acontecimiento, ni yo, ni nadie

Se volvió a aproximar en busca de más pero yo ya tenía suficiente, aunque si fuese por mí continuaría una y otra vez hasta que mis labios se desgarrasen

Aparté el rostro cuando sus labios estaban a punto de chocar con los míos y se separó desconcertado

-Ya es suficiente, no compliquemos las cosas- dije aun con escaso aliento

-Supongo que ahora no me hablarás por lo que has dicho antes, fingir que no existo, es lo que quieres- pronunció bullicioso y entretanto se sentó al borde de la cama

Dejó caer su cuello hacia atrás mirando al techo, su pelo rebotó, vi como su pecho respiraba frenético, no se que me pasaba pero sentía la enorme necesidad de subirme encima de él y que me hiciese lo que quisiera

-Tu no me entiendes- eso no lo había dicho yo, lo he dicho yo, ¿te das cuenta de lo que piensas?

-Quiero entenderte, explícame que te pasa, no pareces tú

Respiré hondo por que sentía que me iba a librar de un pecado, a sincerarme, me refería a todo lo que no le había contado, no se porqué pensaba que decírselo a Oliver era más fácil que a Gabi, era algo que mi cerebro repetía

-Prométeme que no me vas a tomar por loca perdida, y tampoco es por la falta de oxígeno- asintió emprendedor- ¿Tú sabes todo lo ocurrido con mis amigas?

-Se que te dejaste de hablar con ellas

-Pero eso no es todo...- frunció el ceño- en realidad esto ocurrió debido a que Hazel Summsey, con complejo de zorra, cogió mi móvil y envió un video privado de Angela al suyo, después de ello tuvo todo el tiempo del mundo para publicarlo en todos los foros de internet haciendo que expulsasen a Angela de teatro. En conclusión, si la única persona que tenía tal video era yo no les quedó otra opción que confiar en la mencionada furcia de Hazel de que yo había publicado el video y así terminar con nuestra amistad, después de eso conoces mis llantos tanto como tu casa y cuando pensé que todo estaba arreglado te vi besarte con esa payasa, se me hizo el corazón a ñicos y esto llevó a que mi amiguita sacase las garras y les plantase cara a mis ex-amigas y a Hazel

Wow, no me lo creo, ¿Como puedo tatuarme un recuerdo? Me sentía totalmente libre

-Okey... pero hay algo que no comprendo

-¿El que?

-¿Quien es tu amiguita?- rodé los ojos pero en realidad estaba nerviosa por saber que pensaría acerca de ella