Love

Capitulo II

No soy una cobarde.

Flashback

— ¡HERMIONE GRANGER!— Mi nombre fue llamado, me quede de piedra al escucharlo mire al ojiverde y este estaba igual de incrédulo que yo mientras Ronald, me miraba como si le hubiera arrebatado la última rana de chocolate.

— ¡HERMIONE GRANGER!— Nuevamente la voz estridente del profesor Dumbledore resonó por todo el salón, Harry tomo mi mano y me impulso a caminar a la copa, los campeones ya habían sido elegidos, Víctor Krum, Fleur Delacour y Cedric Diggory. La sorpresa fue bastante alta al notar que un cuarto pergamino fue expulsado del cáliz con su nombre, tomo el pequeño pergamino quemado con su nombre mientras era escoltada con el resto de los campeones al despacho del profesor al instante fue atacada por preguntas.

— ¿POR QUE PUSISTE TU NOMBRE EN EL CÁLIZ, GRANGER?— Sostuvo mis brazos el ministro Barty Crouch, yo negué una y otra vez.

—Yo no metí mi nombre en el cáliz señor, lo juro. Profesor tiene que creerme ¿Por qué haría algo tan irracional como esto? De hecho estoy muy molesta por la poca consideración y la falta de respeto a mi persona sin contar la poca supervisión y arrojándome esto a mi cara pensando que yo haría algo tan imprudente como para participar en un torneo por la gloria ¡Es completamente ridículo e inaceptable!— El profesor Snape miro a su alumna con aparente aburrimiento ante su diatriba de indignación.

—Albus, esperaría algo así de Potter o Weasley, Granger es demasiado prudente o cobarde para cometer algo tan estúpido, pero al mismo tiempo sus dos mejores amigos son los que pensaron que estrellar un auto volador en el sauce boxeador era una buena idea. — La leona se cruzó de brazos resoplando y roja de vergüenza dispuesta a refutar, su mirada giro y se encontró con unos ojos azules que la analizaban y la miraba con curiosidad.

— ¡No soy una cobarde! Profesor, aunque no comparto completamente el punto de vista del profesor Snape, tiene un punto ¿Podría salir de esta locura? — Albus miro a Barty y este negó.

—Lo siento Albus, las reglas son estrictas y el nombre de la señorita Granger ya fue puesto en el cáliz, como consecuencia tiene que participar. — Ante esta declaración finalmente la campeona francesa hizo acto de presencia.

—Seriamente profesor no puede permitir que esta niña participe. — Dijo la niña en francés y antes de que cualquiera le corrigiera Hermione salto y enfrento a la niña mayor.

— ¡Disculpa! Pero esta 'niña' tiene más cerebro que muchas de tus compañeras de escuela. — La ojiazul quedo impresionada que la joven de pelo tupido supiera francés tan perfectamente, esta mordió su labio inferior y si antes tenía curiosidad por la leona de Grynffindor ahora tenía cierto interés, y quizás no fue la única.

—Hermione, tendrás que participar. — Ante esas palabras un balde de agua fría cayo figurativamente sobre la castaña, su corazón se aceleró y sintió un terror como nunca antes, la pregunta más importante era ¿Por qué?

Fin del Flashback

—Hermione— La voz del pelirrojo la saco de aquel recuerdo y enfoca sus ojos en él, aún estaba muy enojada con él, pensar que ella quería participar en toda aquella locura simplemente por algo tan vano como la gloria.

— ¿Qué quieres Ronald? No estoy de humor para tus berrinches o seguir con el mismo tema. — Se giró haciendo que todos la siguiera, se detuve y busco a las hermanas Delacour, pero ya no estaban a la vista.

—Yo quería disculparme realmente, siento mucho todo sé que fui un idiota, pero eres mi mejor amiga y te extraño. — La mirada de Hermione se suavizo levemente, a pesar de ser un idiota seguía siendo su mejor amigo, se acercó y lo abrazo.

—Eres un completo imbécil Ronald Weasley, pero también mi mejor amigo. — El ante lo primero bajo su rostro decepcionado pero al terminar alzo su rostro y salto hacia la castaña para abrazarla, correspondió riendo Harry y Ginny también se unieron.

—Finalmente, eran tan tenso estar en medio, ahora se cómo te sientes seguido Mione. — Menciono el ojiverde y me encogí de hombros. La última prueba seria luego de navidad. Al entrar al gran comedor en el podio estaba la profesora McGonagall. Las grandes mesas fueron reemplazadas y solo había gradas en ambos lados del salón junto a lo que parecía un toca discos. Pero lo curioso era que solo estaban los alumnos de Hogwarts, las otras dos escuelas no estaban presentes.

«Bien, se preguntaran porque este repentino cambio antes de la cena, sencillo: Se acerca el baile de Navidad: constituye una parte tradicional del Torneo de los tres magos y es al mismo tiempo una buena oportunidad para relacionarnos con nuestros invitados extranjeros. Al baile sólo irán los alumnos de cuarto en adelante, aunque si lo desean pueden invitar a un estudiante más joven...» El murmullo no se hizo esperar y los estudiantes comenzaron a comentar entre ellos sobre dicho evento, yo mire esto completamente horrorizada ¿Cuánto más tendría que sufrir este año?

—Será obligatoria la túnica de gala —prosiguió la profesora McGonagall—. El baile tendrá lugar aquí en el Gran Comedor, comenzará a las ocho en punto del día de Navidad y terminará a medianoche. Ahora bien... —La profesora McGonagall recorrió la clase muy despacio con la mirada—.

Las burlas no se hicieron esperar luego de que la profesora de transfiguración tomara a Ronald, como conejillo de indias de práctica, los gemelos Weasley's tuvieron un festival de burlas hacia su hermano pequeño, toque mis sienes intentando relajarme aún estaba aturdida por terminar la segunda prueba como para que ahora me tocara esto. Prefería mil veces al dragón.