Episodio 2.

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(De izquierda a derecha: Bae, Chueun, Even)

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(De izquierda a derecha: Bae, Chueun, Even)


"Bajaré hasta el mismo infierno

para hacerte feliz

seré el sol en tu invierno

seré la luna en ti"

Mägo de Oz - La luna en ti


Chanyeol


Escuche el auto de BaekHyun estacionarse y cuando mire por la ventana verifique que era él, salí para ayudarlo con los pequeños. Even venía dormida, por lo que yo tome a ChuEun y a Bae de la mano para llevarlos dentro.

Cuando todos estuvimos dentro y una vez que hube mandado a BaekHyun a descansar un poco, comencé a jugar con Bae, ChuEun y sus autos de juguete. Ellos se reían conmigo e intentaban quitarme de las manos los autos cuando yo fingía que estos podían volar. Even se unió a nosotros cuando despertó de su sueño y estuvimos jugando hasta que TaeHyung y HoSeok llegaron por Bae.

Los hice pasar y hablamos un momento antes de que se fueran con Bae. Este se despidió de nosotros con su manita y un beso para ChuEun en su mejilla. Ellos dos eran tan adorables, se llevaban muy bien.

Serví un plato de cereales para Even y un gran vaso con gelatina para ChuEun, los bañé y los vestí con sus pijamas, aunque ambos comenzaban a vestirse por sí solos y a querer bañarse por sí solos, aún tenía que voltear sus playeras, acomodar sus calcetines, abotonar bien los botones, sacarles el jabón de sus ojitos, limpiar sus orejas y en el medio de los dedos de sus pies.

Los metí en sus camas y los arropé, besé sus cabezas y salí apagando las luces, claro que dejé conectado en uno de los enchufes una lamparita de noche que les proporcionaba un poco de luz.

Cuando entre en la habitación BaekHyun estaba en el baño, estaba lavándose el rostro. Lo abrace por detrás e inclinándome bese la parte de atrás de su cabeza. Se estremeció un poco, pero aun así se giró y estampo sus labios con los míos.

—Hola—murmuro sobre mis labios.

—Hola—mordí su labio y el volvió a besarme cuando lo hube soltado.

Enrede mis brazos alrededor de él, apegándolo más a mi cuerpo y él se arqueo, haciendo el espacio entre nosotros más pequeño (si se podía). Jadeo en mis labios y yo lo levante para sentarlo en el filo del lavamanos.

—Vamos a la cama. No quiero que pase lo de la última vez—murmuro divertido.

BaekHyun y yo somos jóvenes, y las hormonas aún afectan mucho nuestro cuerpo. Y déjenme decirles que yo no puedo resistirme tanto a ese culo que tiene, es perfecto.

Casado con un Idiota | Libro IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora