Episodio 15.

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"Cariño no puedes ver esa mirada en mis ojos

mira mis ojos que están llenos de tristeza"

T-ARA - Cry Cry


Baekhyun


Después de recibir la llamada de mi jefe, pidiendo mi opinión sobre si podía sugerirme para asistir a la semana de la moda en parís en nombre de Corea, y de haber tenido un pequeño festejo con ChanYeol en su aula, regrese a casa.

Estaba emocionado, el hecho de que el jefe haya querido sugerirme para ir a un evento tan importante, y mejor aún, representando a Corea, era lo mejor que me ha pasado en el trabajo, ¡olvídense de que no hayan escogido una de mis líneas completas!

Esto era un milésimo de veces mejor.

Esa noche ChanYeol y yo tuvimos sexo desenfrenado, fue la mejor noche de mi vida. Y fue como mi primera vez después de todos los malos acontecimientos que habían pasado en nuestra vida.

Dos días después, la noticia fue un hecho. Iría a Paris. Me iría en dos semanas, y permanecería ahí dos semanas.

ChanYeol organizo una pequeña convivencia en la cual pude anunciar la gran noticia. Esto era un gran paso en mi carrera como diseñador, de ahora en más, estaba seguro que sería un elemento eficiente en la empresa. Todos mis esfuerzos al fin daban frutos. Todo el mundo se alegró y me felicito, mi hermano Kris tan gracioso como siempre, me había dicho que le diera un autógrafo antes de que fuera difícil conseguir uno. Él siempre tan sarcástico.

El día anterior a mi partida ChanYeol no se presentó a trabajar y los niños no fueron a la guardería. Ellos tenían planeada una especie de despedida con pastel, helado, dulces y golosinas, bailamos y jugamos, vimos películas y finalmente a las nueve de la noche todos fuimos a la cama. Aunque ChanYeol y yo no fuimos precisamente a dormir. Si saben a lo que me refiero.

Desperté cinco horas más tarde, me di una ducha y ChanYeol me llevo hasta el aeropuerto, ahí ya me esperaban mi jefe y algunos compañeros que me ayudarían, ellos ya llevaban los atuendos que probablemente usaríamos en la pasarela.

Me despedí de ChanYeol con un gran beso en los labios y subí al avión. Pude verlo aún desde la ventana del avión, él no se movió de ahí hasta que lo perdí de vista al despegar. Cerré la cortina plegable y me dispuse a dormir las horas que me faltaban por dormir.

El viaje consto de doce horas, de las cueles dormí cinco, dos vi una película y el resto estuve hablando con mi jefe o algunos de los chicos que nos acompañaban. Incluso termine hablando con una adorable niñita de no más de cuatro años que iba sentada en los asientos de al frente. Ella se llamaba Christine, era francesa y había viajado a Corea con sus padres para conocer el lugar.

Cuando llegamos lo que hicimos fue instalarnos en el hotel, el evento sería al día siguiente, por lo que teníamos el resto del día para conocer el lugar o simplemente descansar en la habitación. Decidí salir con algunos de los chicos, ya que no quería estar aburrido. Pero antes de eso llame a mi gigante para comunicarle que había llegado sano y salvo.

Después de habernos dicho que nos extrañábamos, que los niños se hayan colado en la conversación y de habernos despedido, partí con los chicos a un restaurante cercano que se llamaba Thoumieux, era un lugar bastante elegante, la comida era deliciosa y su carta de vinos era exquisita.

Después de comer ahí fuimos a conocer un poco más antes de regresar al hotel cerca de las nueve, en Corea eran ya las cuatro de la mañana, por lo que me evite enviar un mensaje de texto o hacer una llamada.

Casado con un Idiota | Libro IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora