Divina confusión

Un sentimiento extraño

Fue muy lindo se su parte el haberme ayudado... me dio algo de pena el modo con el que me tubo abrazada cuando esos tipos estaban cerca de nosotros... ahora no sé qué es lo que debería hacer.... 

Capitulo 15

Yagami se levantó de la banca y miro a la persona que le había cubierto los ojos- ¿qué demonios haces aquí?

Una risa picara y un movimiento de cadera, la hacían parecer como una colegiala-no me digas que no me extrañaste-se trataba se Shermie, una mujer muy bonita, su cabello largo y rojizo, llevaba puesto un mini vestido color rosa

-creí haberte dejado en claro que...-aquella chica lo había silenciado con un beso apasionado, mientras que esta se aferraba a él para intensificar más el beso, cosa que no le molesto a él, ya que igual correspondió el beso.

Ambos se separaron por la falta de oxígeno-creías que no me iba a olvidar de lo mucho que nos divertimos en tu departamento en Tokio- abrazándolo, mientras se apegaba más al cuerpo del pelirrojo.

Si bien, la chica frente a él era bastante atractiva y de muy buenos atributos, sus encuentros eran algo de una solo noche y ya; ni siquiera se le podría decir que tenían una relación formal, pero, pensando muy bien las cosas e imaginar en lo que su madre le diría si viese el tipo de vida que tiene él ahora, reclamándole tal vez por no pensar en tener una relación seria con una sola chica y formar ya una familia propia, pero...

-ya me viste-tomándola de las muñecas y apartándola de él-ahora largo... que no estoy de humor para soportarte

-amor, no te enojes-tomando al pelirrojo del brazo y llevándolo lejos de toda la demás gente.

- ¿eres sorda o qué? -mirando de reojo a donde estaba la tienda y ver por un breve instante a mariana-Y suéltame que no tengo tiempo para tus estupideces-dándose cuenta que estaba ya junto a la pelirroja cerca de un callejón.

-porque no mejor-tomando el rostro de yagami y acercando sus labios a los de él-nos vamos a tu departamento...-dando pequeños besos-nos relajamos...-poniendo ya sus manos sobre el pecho del pelirrojo-y revivimos lo bien que la pasábamos en Tokio-ahora besándolo ya con mayor intensidad, mientras que este la tomaba de la cintura y la apegaba más a él.

Por un momento, yagami se le había olvidado por completo que venía con mariana, que estaba dispuesto a llevarse a la pelirroja a su departamento.

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Mariana esta ya por salir de la tienda, tenía ya en sus manos una bolsa de papel color rosa, había comprado unos muñecos que le habían gustado.

-espero y no se enoje-decía al momento de revisar su celular y ver la hora que era. Al salir del local, trato de buscarlo con la mirada, pero por más que lo buscaba, no se veía por ningún lado; camino por los alrededores, pero justamente tenía que pasar cerca del callejón en donde estaba él.

No pensaba pasar cerca de ese callejón, pero cuando saco su celular, de su bolsillo salió una moneda y rodo hasta llegar cerca de ese lugar, cuando la levanto, pudo ver una figura entre la oscuridad y cuando fijo bien su vista, vio que era iori y junto a él, estaba una chica pelirroja, mariana se levantó y de la impresión, había dejado caer la bolsa que traía en las manos, tomo su bolsa y se fue del lugar en silencio.

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-ahh~ ya quiero~-tratando de hablar- seguir esto... en tu departamento~

Yagami seguía dejando marcas en el cuello de la pelirroja cuando en un movimiento rápido, vio su reloj y vio que ya eran casi las nueve.

-¡ouch!-shermie había caído al suelo, pues ella tenía sus piernas rodeando la cintura de iori, pues este se había alejado de ella para ir corriendo a donde estaba la tienda donde se supone estaba mariana.