👑 Placer O Amor 👑

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Los dulces y sensuales gemidos se escapaban de sus esponjosos labios una y otra vez mientras las embestidas eran cada vez más fuertes, el éxtasis de su cuerpo ardiendo en llamas con cada caricia era el más deliciosos de los tormentos.

La forma en como su piel era acariciada, con adoración y una pasión interminable le robaban el aliento, por segundos se olvidaba de respirar pero el aire que necesitaba llegaba a través de los suaves y firmes labios de Pin, esto no solo era sexo, porque lo que el rey sentia en este momento era algo nuevo y totalmente desconocido.

La necesidad que sentia por Pin quemaba todo su ser, no podía dejar de gemir su nombre deseaba tanto que las hábiles manos del caballero blanco no dejaran de tocarlo porque esta sublime sensación que recorria todos sus sentidos era embriagadora y adictiva, no sabía porque pero cada fibra de su ser ansiaba más de aquel joven.

- ¡Pin ahh! - susurraba el rey entre jadeos mientras entraba en él penetrándolo aún más profundo mientras se sujetaba de sus hombros y lo atraia hacia su boca, estaba tan necesitado de sus labios.

Deseaba tanto sentir la lengua del caballero blanco entrelazarse con la suya y cuando por fin lo consiguio, el sabor, la humedad, el calor, todo se combino y exploto en su boca.

"Incluso besarte es tan diferente y único"

"¿Qué tienes Pin que me enloqueces?"

La explosiva emoción del orgasmo se hacia presente en sus cuerpos mientras los temblores invadian cada una de sus células entonces Pin se abrazo más a Son para dar una última embestida, profunda, deliciosa y abismal. Ambos sintieron que la pasión que los envolvia se transformaba en un sentimiento más fuerte que el mismo deseo, esto no solo era atracción, estar en los brazos del otro lo era todo.

Los dos se dejaron ir mientras sus cuerpos eran recorridos por una inmensa ola de delicioso placer y entre gemidos lujuriosos pronunciaron el nombre del contrario.

Luego de que la hoguera de la pasión empezara a consumirse apareció esa dulce chispa que parecia acariciarle el corazón y Son obtuvo lo que tanto esperaba.

Observo esa tierna y meláncolica mirada que Pin siempre le regalaba después de tener sexo,  jamás podria olvidar la primera vez que él lo miró así, era adorable la forma en como sus ojos lo observaban, parecia como si él pudiera ver su alma, esa parte frágil que él mantenia escondida entre las sombras .

No lo resistio más y lo beso mordiendo apasionadamente sus labios, lo beso lento, suave disfrutando de su deliciosa boca sin ninguna prisa.

El rey jamás había besado así a nadie.

Y podia sentir en su interior que Pin tampoco era así con nadie más, la manera tan apasionada en la que lo tocaba, la adoración que había en sus ojos al mirarlo, era intentar mentirse al decir que esto solo era sexo, él había tenido sexo antes pero este incontrolable deseo, esta maldita desesperación por sentirlo cerca era dolorosamente cruel y exquisita.

"Esto no solo era sexo"

"¿Pero que más podria ser?"

El rey se hacia una y otra vez esa pregunta, intentaba coordinar sus pensamientos pero Pin parecia decidido a robar todo de él.

Apenas podía respirar con normalidad porque el joven aún seguia abrazado a él lamiendo su cuello, las sensaciones eran tan intensas y alucinantes que no se dio cuenta cuando el caballero blanco se coloco detrás de él y empezó a devorar la piel de su espalda, no sabía porque estaba tan obsesionado con su tatuaje, pero su boca y su lengua lo llenaban de deliciosos escalofríos que le hacian imposible negar que esas caricias volvian a encender el fuego en su interior.

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