Chico Melocotón...[Yoonmin]

A Peach

El pequeño omega de cabello rosa observó a la bebé regordete que sostenía entre sus manos.

Puchereando algo irritado por tener que cuidar de aquella bebita de aroma a frutilla, y de berrinches abrumadores.

Aún no sé acostumbraba a la presencia de su tierna sobrinita de mejillotas, aquella bebé que hizo revolotear su mundo de pies a cabeza, siendo tan distinta a su otro sobrino, Jungkookie.

-¿Ahora que haremos?..- murmuró observando a la cachorrita, la cual metió su diminuto puñito en su boca, babeando su manita esponjosa.

-Tú mamá me tendrá que dar doble postre despues de esto..- siguió musitando, acercando al regordete retoño hasta su pecho, colocándose de pie con total equilibrio.

La pequeña bebé ni se inmutó, dejándose guiar por su único e inigualable tío mochi.

-Primero debo ir por la cangurera de bebés,  luego salir para ir hacia la escuela en donde está Jungkook, y luego regresar a casa. Nada más, Jiminie, nada más..- dijo para si mismo, meciendo a la bebé preciosa entre sus delgados brazos.

Soojin se quedó quieta, disfrutando de esa esencia profunda a melocotones. Sí, una esencia que ni el mismo Jimin sabía que tenía.

Dejo un beso de baba en la mejilla de su tío mochi mágico, y acomodó su rostro en la curvatura del cuello ajeno, lista para mimir una dulce siesta de algodón y muchos dulces.

 -Ah no Soojin, debes estar despierta sino será más difícil para mí ir por tu hermano..- susurró, alejando a la bebita de su cálido pecho, observando a la pequeña cerrar sus ojitos poco a poco.

Jimin negó lentamente, volviendo a poner un puchero en sus abultados labios, sería muy difícil pero era mejor que se apurase para poder llegar a tiempo.

-Listo, dos fundas de gomitas y una de malvaviscos ¿Contento?..- el mayor observó al azabache asentir.

 -Muchas gracias Yoongi hyung, hicimos un trato justo para ambos ¿No cree?..- interrogó está vez el menor, mostrando sus dientes delanteros en una gran sonrisa.

Jungkook estaba feliz de haberle ganado la apuesta mayor a ese estúpido universitario, y no era para menos, había dejado impresionado a más de uno, no solamente por tener nueve años.

-Para la próxima no volveré a aceptar..- murmuró cortante, cruzándose de brazos.

Jeon soltó un par de carcajadas, enfureciendo aún más al universitario perdedor de piel pálida.

Yoongi lo miró expectante, frunciendo su ceño en señal de disgusto hasta que por fin decidió abrir la boca.

-¿Acaso no tienes algo mejor que hacer, niño?..- reclamó, sintiéndose enfurecer aún más cuando las carcajadas del infante resonaron por todo el lugar.

El alfa mayor colocó ambas palmas en su rostro, frotando su cara con desesperación cuando Jungkook empezó a burlarse aún más de él.

¿Qué se creía ese tonto chiquillo?

Chasqueó su lengua, decidido a relajarse antes de poder usar su voz de mando con el muchacho, sabiendo que era su culpa por haber aceptado ese reto tan absurdo.

No sabía que su equipo iba a perder contra sus adversarios.

-Ay por Dios, de verdad que los universitarios de aquí son estúpidos..- bramaba sonriente, posando sus manitos en su barriga, a causa de las grandes carcajadas.

Al escuchar aquello la mirada verdosa del mayor se obscureció, y tronó su cuello amenazante.

¡Upsi! 

  

Espero que les guste, perdón si ven algún error.

¿Que les pareció?

¿Preguntas?

Ya saben, dejen sus votitos y comentarios para poder seguir u.u

Tenemos a un Yunki malote universitario, y un chimmy cuidador de bebés.

A propósito, tengo instagram, por si desean que intercambiemos follow, solo díganme su IG, el mío es apeachtay_ 😔👊

En el próximo capítulo les explicaré como Jungkook, teniendo nueve años, llegó a la universidad para apostar XD

¡Los amo!

Sempai❤