Eight Peaches

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La incomodidad recorrió el cuerpo de Min, suspirando entre el silencio alarmante que poco a poco lo estaba acabando.

Ninguno de los dos pequeños le habían dirigido la palabra, aunque pensándolo bien, Jungkook no le había dicho ni papa y la pequeña solamente se limitaba a babear.

Yoongi convenció a su novio para que le permitiera entablar una buena amistad con los pequeños, solo ellos tres.

Muy mala idea a decir verdad.

Necesitaba urgentemente un mediador.

- Y bu-bueno...¿Qué les gustaría que hiciéramos?..- preguntó a medias, pasando las palmas de sus manos sobre la tela de su pantalón, buscando la manera de no sentirse tan incómodo con el asunto.

-Nada, Yoongi. Solo déjanos jugar y ya...- las pocas palabras de Jungkook llegaron a él como una gran solución.

Y aish, ¿qué le costaba al menor en tener algo de respeto?

El alfa a duras penas logró negar con su cabeza, intentando hallar la manera en la que los tres pudiesen convivir.

Otra vez intentando.

-¿Seguro? Porque yo también soy muy bueno en los juegos..- alardeó sabiamente, mirando como ambos menores lo observaron con curiosidad.

¿Un viejito como él? ¿Era en serio?

-Vamos, niños, de verdad quiero llevarme bien con ustedes. No creo que sería bueno que no estemos en buenos terminos..- siguió intentando, suplicando plenamente con sus ojos gatunos.

-Hu- Tatadaa...Babu Oongi, pufss.

-¿Tú crees?..- Preguntó Kookie a la bebé.

-uh...Oongi Tatiiih ¡Bah!..- exclamó seriamente la pequeña, colocando un puchero cuando la mirada confusa de Yoongi llegó a ella.

-Ahm...¿Okey?..- dijo el alfa, colocándose más cerca de la mesita repleta de juguetes.

-Soojin tiene razón, será mejor que hagamos un tratado de paz.

-Uhm, está bien ¿Tú que propones, enano?

-Deberás arreglar mi cuarto dos veces por semana durante dos meses, y comprarle galletas a Soojin. Eso si, galletas de las oreo porque ella no puedo masticar las chispas de chocolate..- el menor término de sacar sus legos, restandole importancia al casi grito que pegó su mayor.

-¡¿Qué?! ¡Debes estar bromeando!.- que injusticia, no podía creer que aún el pequeño patán no había cambiado.

-Nop, no estoy bromeando. ¿Quién me asegura que tu no harás llorar a mi hyung, así como hacías llorar a las porristas?..- respondió con simpleza, muy pero muy alarmante.

¿Cómo demonios aquel niñato sabía de aquello?

-Es-Espera, ¿cómo sabes eso?..- interrogó, si, algo asustado la verdad.

-Yo sé muchas cosas, digamos que no eres el único estúpido en el campus. Aparte, tengo mis contactos..- se alzó de hombros, mirando de reojo a Yoongi.

Obviamente esperó a una respuesta certera y honesta, mientras el mayor seguía pensativo.

Muy extraño.

-¿Y bien?..- bramó Jungkook.

-Bien, está bien. Haré lo que tu digas, y me encargaré de agregar una pequeña cosa más..- Yoongi se acercó a uno de los juguetes, tomándolo con sus manos tatuadas y venosas.

Empezando a jugar con la leve intención de poder acercarse más a los pequeños angelitos.

-Dime.

- Cambiaré aquella imagen que tienes de mi ¿De acuerdo?, de aquí a una semana me ámaras.

Jungkook sonrió.

-¿Apuestas?





























💛💛💛

Espero que les guste, perdón si ven algún error.

¿Qué les pareció?

¿Preguntas?

Nfndjd por fin salí de vacaciones, ahora si puedo actualizar tranquilamente 😭🤟💕

No se olviden de comentar y votar, porfis, ahora que ya puedo actualizar seguido puedo traerles algunos capítulos, ahre.

Ah y...Ya tengo brackets inferiores LPM!! No puedo comer bien, me pusieron unas cosas en las muelas para que los brackets no chocasen, y me duele también eso 😭😖😔.

¡Los amo! Cuídense mucho y duerman bien.

Sempai❤


Chico Melocotón...[Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora