Muñecas de porcelana.

Capítulo 5.

[Recuerden, todo es narrado desde el punto de vista de Cystal.]

Al siguiente día me desperté realmente destrozada, ponganse en mi lugar, como cuando te enamoras de alguien a primera vista, y esa persona te gusta muchísimo pero esta con alguien más, es la impotencia de no poder estar con ella, no poder acariciarla, protegerla o besarla como quisieras.. En fin, no podía quedarme acostada toda la vida en una cama lamentandome.

Me levanté, cogí una toalla y me dirigí a la ducha, luego de un baño de unos 30 minutos, salí, me arreglé y bajé a desayunar con mi asquerosa familia. Después salí de casa en dirección a la escuela, en ese momento lo que menos me apetecía era encontrarme con Scarlett, pero a la vez necesitaba verla.

Cogí el autobús camino a la escuela, luego de unos 20 minutos llegamos, al bajarme, en la parada, se encontraba Scarlett, tan bella como siempre, con esa hermosa sonrisa tan radiante como las estrellas, y sus ojos.. Sus ojos me derretían por dentro, todo en ella me encantaba.

Baje del bus medio atontada, Scarlett me saludo, se acerco a mi y deposito un tierno beso en mi mejilla, me dio disculpas por lo que había ocurrido el día anterior y comenzó a platicarme de su llegada al nuevo instituto.

En todo el camino no dije ni una sola palabra, al terminar ella de hablar me preguntó:

-¿Te encuentras bien? Te noto algo distraída.

A lo que le dije:

+El chico de ayer, ¿Es tu novio?

-Si. Su nombre es Diego, es el mejor novio que pudiera tener. *Dijo sonriendo*

+Oh, que suerte tiene él.

Empecé a caminar más rápido, estaba molesta pero a la vez me sentía más deprimida que antes, estaba segura de que nunca tendría una oportunidad con ella.

Entré al instituto y me dirigí a mi aula de clases, ella igualmente entró a su salón algo confundida por como había salido corriendo, literalmente.

Pasaron las clases común y corriente, al salir al receso ella estaba esperándome en la puerta de mi aula, la salude normalmente y ella igual a mí, luego me pidió que la acompañara al baño, no tenia con quien más salir, y por más molesta y deprimida que estuviera no iba a negar el estar con ella todo el tiempo que pudiera. Cuando íbamos camino al baño le pregunté por Diego, ella me respondió que ese día no había asistido a clases, ya que se encontraba enfermo.

Llegamos a los baños, Scarlett entró en uno y yo me quedé esperandola en los lavabos, no podía dejar de pensar en esos hermosos labios.. Así que no resistí la tentación.

No se encontraba nadie más en el baño así que cuando Scarlett abrió la puerta la empuje suavemente adentro, me giré y cerré la puerta, luego nuevamente volteé a donde se encontraba ella, me miro algo confundida y dijo:

-¿Que haces?

A lo que le respondí:

+Me gustas, y mucho. Dije mirándola a los ojos.

Luego me acerqué más a ella y comencé a besarla se podría decir tiernamente, al comienzo ella puso resistencia y trató de alejarse de mí, pero luego comenzó a disfrutarlo, supongo.

Yo soy una completa tabla, al contrario, ella se manda un cuerpaso.. Que deja con la media baba fuera a todos.

Puse mis brazos al rededor de su cuello, pegandome más a ella, luego comencé a besarla más apasionadamente y pude sentir como se excitaba, pues sus pezones se estaban poniendo duros, lo que hizo que me exitara yo igual, Luego ella..

[...] continuará.