RECUERDOS DE RESILIENCIA

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Tumbado aún cerca de el arroyo, el murmullo flotó muy solitario en sus oidos, el pasto bajo su cuerpo se sentía húmedo y el aire tan frío lo estremeció mientras se incorporaba con el suave aroma a tierra mojada que impregnaba sus túnicas, recargó el costado de su rostro en su mano.
Luego de darle algunas vueltas al asunto, realmente lo había asimilado.

Necesitaba ayuda. Necesitaba ayuda para acercarse a Mu Qing, y después tal vez, ayuda para decirle lo que sentía.

¡No se estaba lusionando!
Sabía que tenía una enorme probabilidad de no lograr lo que planeaba, y muchísima menos probabilidad de ser correspondido.

Pero dentro de los horribles pronósticos, se había hecho a la idea de que también estaba la insignificante - pero existente - probabilidad de ser... Correspondido.

Recordarlo una y otra vez le hizo darse cuenta de algo.
Los dos dieron algunos pasos, es decir...
¡Mu Qing no lo había evitado!
Por el contrario, él también se había acercado un poco... Así parecía que los dos estaban pensando en hacer lo mismo.

¡Esto no dejaba lugar a ningún arrepentimiento!

Solo el deseo por ver más de esas reacciones tan poco comunes en él.

Esto le dio una sensación de alivio y con un poco más de ánimos, se levantó y comenzó a caminar en dirección a la aldea. Mientras se dirigía fuera del bosque, recitó la contraseña de la red espiritual de Xie Lian y habló.

- Alteza

Espero un momento y la voz de Xie Lian emergió del otro lado con sorpresa.

- Feng Xin ¿Que pasa?

- Alteza... Quería hablar con usted.

Xie Lian sonó un poco curioso.

- ¡Oh! ¿Acerca de que?

- Yo... Alteza... - Hubo un suspiro y un poco de resistencia antes de hablar con voz más baja.-  Creo que necesito ayuda...

- Si puedo ayudar, por supuesto lo haré. ¿Que es?

- Alteza, es algo... Complicado de explicar creo que necesito hablar en persona...

Xie Lian tuvo un presentimiento y respondió de inmediato. Su voz sonó alegre cuando respondió.

- Ahora estoy en la ciudad fantasma, si es urgente puedes venir.

Feng Xin hizo un sonido de afirmación y luego cortó la comunicación mientras seguía caminando por la aldea. No estaba poniendo mucha atención al exterior, pero después de adentrarse un poco más, logro recordar el pequeño detalle que olvidó. Cambiar a una piel falsa. Ahora todos lo estaban mirando con sorpresa lucir su armadura y túnicas enlodadas, pero inmortales.

Ya que había llegado tan lejos, solo le quedaba seguir. Entro a un pequeño establecimiento ignorando a los presentes que quedaron pasmados al instante.

¡Un inmortal había entrado a su local!

Pese la incomodidad de ser observado, abrió una puerta he hizo el conjuro de acortamiento de distancia lo más rápido que pudo, y al volver a abrirla el bullicio de los puestos se escuchó del otro lado.

Feng Xin no era tan exigente en cuanto a estética. Pero... La apariencia de las cosas en la ciudad fantasma era realmente... Peculiar.

Las calles estaban atestadas de criaturas y fantasmas raros, y aún que estaba un poco perdido, la apariencia de los habitantes no le inspiraba mucha confianza.
Negándose preguntar a alguien por la dirección por la que necesitaba ir, vago un rato por la dirección que el creía correcta. Cuando alguien al otro lado de la calle lo llamo de pronto.
La voz de esta persona tan conocida lo exaltó un poco, pero al darse la vuelta la imagen frente a él era algo... Bastante incómodo de ver.
Feng Xin sintió algo de tensión que incremento al  ver a Jian Lan acercandose.

Odiarte Nunca Ha Sido FácilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora