Lo sabe

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(Perspectiva Jasper)

Corrí por el bosque un buen rato hasta que un ligero olor a jazmín llamó mi atención, provenía de una casa un tanto alejada del pueblo, era bastante grande y el jardín lindaba con el bosque. Enseguida supe que esa era la casa de Allison y su padre, el olor era inconfundible y ver el coche que usaban lo confirmó.

Me sorprendió darme cuenta de que no estábamos tan lejos, aunque su casa era más accesible y visible desde la carretera que la nuestra, estaba aislada y en esos momentos en completo silencio. Únicamente las respiraciones de dos personas se escuchaban dentro. No tardé en reconocer la de Allison y dejándome llevar por un absurdo impulso me acerqué a la ventana que supuse era la de su habitación, salté quedando encaramado a ella.

Sin duda esa imagen se quedaría grabada en mi mente, Allison dormía medio destapada, con el pelo esparcido por la almohada y un aura de paz y tranquilidad la rodeaba. Sabía que mi comportamiento en ese momento era realmente reprochable, habían metido en la cárcel a personas por mucho menos, observarla mientras dormía era, sin duda, algo que no debía de estar haciendo ni por asomo. Cuando pude reunir las fuerzas suficientes para aclarar mi mente, salté de la ventana dejándome caer sobre el jardín para dirigirme de vuelta a casa.

Esperaba que los demás estuviesen fuera, al menos Edward, no quería que leyese mi mente en esos momentos, ni siquiera yo podía comprender que me ocurría con Allison, ¿por qué cerca de ella me envolvía una paz completa? y tampoco sabía ¿por qué sentía ganas de volver a verla mañana y conocerla mejor?, era solo una humana, hermosa, inteligente y valiente, sí, pero humana y yo hacía décadas que no me relacionaba con humanos a no ser que fuesen parte de mi dieta.

Traté de no pensar mucho cuando entré en casa, fui directamente a mi habitación y me tumbé a leer desinteresadamente uno de los cientos de libros que tenía allí.

Por extraño que pareciese, para un ser inmortal, la noche se me hizo eterna y cuando por fin era la hora de ir al instituto, ya estaba esperando a los demás junto al coche de Edward.

Esme salió para hablar conmigo mientras los otros se preparaban para irnos.

-Hijo, ¿todo bien? - me preguntó Esme.

-Sí, todo como siempre- dije.

-No me mientas, no estás como siempre- dijo Esme perspicaz- ¿es por la chica de la que hablaban ayer tus hermanos?

Pensé bien qué decirle, porque realmente ni yo sabía que me ocurría con certeza.

-Es posible- dije encogiéndome de hombros- es diferente.

-Eso he oído- dijo con una cálida sonrisa- Alice asegura que vendrá a casa pronto y que será como una más, está realmente emocionada por ello y he de admitir que yo también lo estoy, aunque un poco preocupada.

-Lo sé, sería peligroso para ella- dije.

-Eso sin duda lo debemos tener en cuenta- dijo Esme- pero me refiero, más bien, a que cuando tengamos que irnos, tarde o temprano deberemos perder el contacto con ella y por como vi a Alice, eso le dolerá.

Sus palabras hicieron que un pinchazo agudo surgiera en mi pecho, negué levemente tratando de quitarme esa sensación de encima y centrándome en tranquilizar a Esme.

-Todo estará bien- dije tratando de calmarla cuando los demás salieron de casa.

-Preveo una tarde de compras- dijo Alice emocionada corriendo hacia el coche- y vosotros vendréis.

- ¿De qué habla? - le pregunté a Edward cuando nos despedimos de Esme y montamos en el coche.

-Quiere ir con Allison a Port Angels de compras- dijo.

Mi calma y mi tormenta. (Jasper Hale)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora