Contra barreras y demonios [todoroki x tu]

capitulo 38

De la nada me dio un horrible dolor de cabeza como minutos antes pero tuve que detener el paso preocupando a todos, estoy harta de esto, siempre preocupando a las demás personas por esta mierda de enfermedad

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-¿¡(T/N) estas bien !?- Gritaba Kirishima muy preocupado mientras extendía sus brazos hacia mi queriendo ayudarme.

-no grites idiota .....- le contesté tocándome la cabeza con una gran mueca por el dolor.

-son los dolores por... ¿Eso?- me dijo Bakugo un poco preocupado.

-s-sí, solo necesito agua, pero cuando lleguemos al cine ahí compro algo, no se preocupen- les dije mientras volvía a caminar para tranquilizarles.

-¿Estas seguras? Hace un rato te dolía muchísimo y no es de hombre dejar las cosas así- sonreí por el comentario de Kiri.

-tranquilo, estoy bien- este me sonrió pero sentí alguien que me tomaba por la cintura para depositarme en su hombro-q-que haces? -pregunté toda avergonzada.

-¡Si sigues con tus mierdas nunca llegaremos! ERES UNA PUTA ESCANDALOSA- No entendí mucho lo que quería hacer la rubia pero si entendía que me quería morir de la vergüenza. Todoroki se sorprendió al igual que todos los demás, pero como estaba justo atrás de la rubia ahora estaba cara a cara de el.

-b-bájame, p-puedo caminar- intentaba decir pero este hacia caso unísono.

Me terminé rindiendo, en el camino fui hablado con Kiri el cual me contaba historias raras que no entendía mucho pero le seguía la corriente. De reojo veía al bicolor un poco molesto no sé porque, tal vez él no tenía muchas ganas de venir pero prefería esto que estar en su casa con el viejo, No lo sé.

-¡Llegamos! -Escuché la voz de Mina, cosa que me tranquilizó, ya no estaríamos de esta forma con el rubio.

-¡Bien! BAJATE MIERDA MORADA-sentí un pito agudo en mí oído que me dejó sorda por unos segundos.

El chico me bajó... me lanzó al suelo como si fuera un saco de papas, pero por alegría del universo el diente de tiburón y agarró así no me pasaba algo malo, recordando que aún no estaba recuperada de mis heridas.

-¿¡Porque eres así maldita rubia teñida!?- le grité alterada mientras me levantaba del suelo por caer un poco mal en los brazos del pelirrojo.

-¡Sabía que idiota dientes de tiburón te agarraría! ¿¡No querías que te bajara!?- di un suspiro pesado tocándome la frente intentando relajarme.

-solo..... vamos- dije para caminar como normalmente, cuando entramos muchas personas se nos quedaron viendo, cosa que nos puso bastante tensos- ¿nos miraran así por los gritos de la rubialo? -le pregunté a Ochaco pero esta solo subió los hombros en respuesta que tampoco sabía el porqué.

-hijo.... ¡Son los chicos del festival deportivo! -Gritó un hombre cerca de nosotros muy emocionado mientras subía los brazos alocadamente.

-¡Están los primeros tres! -Gritaba otro acercándose a nosotros.

-¡Están los mejores! -Gritaba una señora mientras nos apuntaba.

-esto es súper incomodo- le susurré a Kirishima el cual se le veía tenso por la situación-ehhhhh ¡muchas gracias por las cosas que dicen pero nosotros queremos ver una película de manera tranquila! -les grité cosa dejó a todos sorprendidos por lo educada. Es probable que les insultara, pero hay una reputación que cuidar.

-¡Es la chica súper genial, ella es la mejor de todas! -Ay no, no quería que pasara esto.

-¡Siiiiiii! ¿¡Me das tu autógrafo !? ¡¿Podemos sacarnos una foto juntos?! - me gritaba un niño odioso, me estaba poniendo furiosa incomoda.