Contra barreras y demonios [todoroki x tu]

Capitulo 15

-te veías muy idiota con tus gritos de súplica- le golpeé la cabeza y este me lo devolvió.

- cállate- nos reímos y cada uno se fue a dormir en la cama que correspondía, en la noche tuve muchas pesadillas en las cuales la madre de Bakugo me ayudó a tranquilizarme.

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Fue muy extraño sentir el cariño de la mamá de Bakugo, me sentí muy a gusto pero a la vez incomoda, creo que no estoy acostumbrada a este tipo de tratos tan cariñosos de parte de una mujer.

En la mañana, después de desayunar unos panqueques me fui directo a la enfermería a ver a Aisawa la cual estaba muy vacía, más de lo normal. Mientras caminaba por los pasillos sentí muchas náuseas pero lo dejé pasar.

Al llegar justo donde estaba su camilla me siento en el sillón y me pongo a dibujar, al rato escucho como se queja y me acercó un poco a el por si quería decirme algo o necesite que llamara a la enfermera.

-mmggm- declaró mientras intentaba sentarse en la camilla, yo se lo impedí colocando su respaldo donde estaba.

-no te muevas, maldito suicida- este se rió un poco por el comentario.

-¿Cómo estas de tus heridas? - el estaba intentando rascarse el rostro pero sus manos estaban completamente vendadas.

-yo estoy bien, me duele un poco pero bien, la pregunta más importante es como estas tu-bufó por lo bajo.

-bien pero ... ¡PORQUE TE EXPUSISTE ASÍ CON LOS VILLANOS! ¿¡PORQUE FUISTE TAN IRRESPONSABLE!?- Este me gritaba eufórico, incluso llegó una enfermera asustada pero le dije que estaba todo bien.

-¡Tu sabes como soy! Bueno, dejando de lado ese tema, todos están bien-este se sintió aliviado.

En la tarde, conversamos sobre algunas cosas de la vida, sobre cómo el odiaba estar en la enfermería tanto como yo, hablábamos sobre cosas que me ocurrieron en Estados Unidos y más. La tarde fue muy agradable hasta que llegó Recovery Girl.

-mi niña, tengo que hablar contigo de algo importante- me asusté un poco pero la acompañé a su oficina que en verdad era otra sala de la enfermería.

-¿Qué pasa? - le pregunté cuando llegamos, en verdad la curiosidad me estaba matando.

-pasa que hay unas cosas que tienes que no puedo curar, necesito que vayas al doctor- me encontraba con muchas dudas en mi cabeza.

-de que está hablando, no entiendo- esta se acomodó en el asiento.

-no lo puedo decir, solo anda- me pareció extraño, su comportamiento era bastante serio, mucho más de lo normal- no es nada bueno, por favor anda - como la irresponsable que soy, no lo tomé mucho en cuenta y me fui a la casa

Al llegar a mi habitación con un Brownie en mis manos y un vaso de agua me acosté en la cama pero siento un dolor en mi abdomen muy fuerte, era muy insoportable ese curioso dolor que sentía, que incluso termine tirando todo lo que tenía en mis manos al suelo.

Me recosté en el suelo porque dolía menos por alguna razón, mientras intento calmar ese dolor termino quedándome dormida en ese lugar con frío y mucha incomodidad. Nuevamente tuve un sueño no muy lindo y deseado.

"Morirás

Morirás

Morirás

Morirás

Morirás

Una chica de cabellos blancos estaba en una camilla de hospital, esa chica tenía la piel amarilla, ojos rojos, delgada en exceso, una chica sin ganas en su cuerpo, sin vitalidad.....