Contra barreras y demonios [todoroki x tu]

Capítulo 49

Era tan magnifico como el amarillo era tan bello y como el gris con el celeste podían ser tan maravillosos. Ambos estaban perdidos en su mundo, pero escucharon un pequeño bullicio, al salir de su transe ven como les tomaban fotos con cámaras de periodistas.

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—joder— se escuchó refunfuñar a la protagonista para cambiar su rostro a uno completamente furioso.

—¿¡son pareja!?— consultaba una mujer castaña golpeando el vidrio —¡los mejores del festival deportivo! ¿¡son cannon!?—

—¡¿están en una cita?!— gritó otro.

—¡cuéntenos testimonios de su relación!— seguía insistiendo la mujer. La protagonista se dio cuenta que eran aproximadamente 15 personas muy débiles así que se divertiría golpeándolos a todos, pero antes de hacer lo que quería hacer su acompañante la detuvo.

—vámonos— le dijo el bicolor para tomarle los hombros e irse devuelta a sus cuartos así no seguirían molestándolos.

En el ascensor había un silencio sepultador hasta que este paró en la azotea en donde había una gran piscina deportiva la cual en el fondo tenía el sello del hotel. La chica busco una pared para golpear con sus pies y dejar evidencia de su rabia.

—¡AHHHH! ¡Odio esos maldito periodistas! ¡JODEN TODO!— gritaba con frustración dándole repetidos golpes a la pobre e indefensa pared.

—lamento que no pudiéramos cenar— se disculpaba el bicolor acerándose a su acompañante la cual ya había descargado su rabia y la pared blanca e intacta segundos antes ahora estaba con un gran hoyo. Se sentía un poco culpable ya que realmente quería pasar tiempo a solas con la chica.

—no te disculpes ¡todo es culpa de esos periodistas! ¿¡QUE SE CREEN INTERRUMPIENDO MI CITA!? ¡TODO ES CULPA DE ESA PERRA!— La chica tardó unos segundos en analizar sus palabras y mira al bicolor —y-yo no dije eso, no dije nada ¿caminemos?— decía nerviosa apresurando el paso.

—oh no, claro que no— dijo el acompañante para agarrar de la muñeca a la chica y verla directo a los ojos —¿Qué dijiste?— decía con una voz ronca y profunda "me voy a desmayar" pensó la protagonista.

—q-que es u-una cita— tartamudeaba y sentía como sus piernas no la iban a soportar mucho más —¿T-Todoroki?— preguntó al ver como se acercaba el bicolor peligrosamente a sus labios. La respiración de ambos era fuerte y sus corazones golpeaban su caja torácica para salir de ahí. El sonido de un helicóptero se hizo presente arruinando el momento, pero el de ojos heterocromáticos aprovechó besándole entre el labio y su mejilla.

—vamos que llegó el viejo—
le aviso el hombre para separarse y extenderle la mano.

—estas tocando terreno peligroso Todoroki Shoto— se escuchó una risa grave del nombrado para volverle a provocar a la protagonista un escalofrío en todo el cuerpo.

—¡niños!— gritaba el héroe saliendo del helicóptero después de unos minutos en el aire —¡¿Qué estaban haciendo?!— gritaba por el ruido del transporte aéreo que de apoco iba disminuyendo— Los vi muy cerca hace un rato— decía emocionando haciendo que la mitad demonio se sonrojara de inmediato.

—nada— contestó seco el bicolor —para que nos necesitabas— dijo de la misma forma viendo de reojo a su acompañante muy confundida —me mandó un mansaje recién que subiéramos— dijo mostrándole tal mensaje.

—ahhhh— respondió al ya entender la situación y comenzar a analizar lo que se vendría.

—les enseñaré lo que es ser héroe—decía con una sonrisa ladina para caminar a paso asegurado y confiado de la gran enseñanza que les daría. Caminaron los tres a un salón de reuniones en tal edificación así podrían hablar con más privacidad.