Lexa y Addison, ambas son las recién llegadas al colegio para adolescentes con superpoderes, allí probarán de que están hechas y si son lo que están buscando.
Recuerda no llamar la atención, es una regla fundamental si quieres estar en paz.
Aquí enc...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
<< CRAYTON >>
—¿Por qué rayos no me lo dijiste? —ladra Bruno ni bien entro a la habitación.
— Oye acabo de llegar —anuncio, tirándome en mí cama— Sabes que puedo volver a irme ¿Verdad?
— Tienes muchas cosas que explicar Crayton.
Brama nervioso caminando de un lado a otro y va pasando sus manos por su cabello tratando de mantener la calma.
— Sabía que verte así sería interesante, pero nunca creí que tanto —comento soltando una risa, a lo que el gruñe— Tranquilo amigo, ya estoy aquí, así que puedes contarme todo lo que pasó estos días que me fui —agrego acomodándome en mí cama.
—¿Sabes lo vergonzoso que fue quedarme allí parado como una estatua luego de eso? No, no lo sabes porque antes de que pasará huiste es lo que siempre haces cuando...
— Si no quieres que te deje aquí, hablando solo cálmate —le advierto.
— Está bien, solo que... —queda con su mano en el aire hasta dejarse caer en el puff.
— Habla, yo te escucho —digo jugando con el cordón de mí buzo.
— Como dijiste estaba con la chica castaña, Lexa, tal parece que ella y Addison son amigas.
— Así que averiguaste su nombre —suspiro jugando con el hilo.
— No uses ese tono insinuador conmigo por favor —suspira cansado.
— ¿Qué? Vamos, no trates de negar que la chica te llamo la atención.
— No solo llamo mí atención...
— Es linda, es inteligente y bla, bla, bla —completo por el rodando los ojos.
— Las chicas no se resumen en eso Crayton, eres un insensible, ya quisiera ver el día que te enamores.
— Con eso quieres decir que estás enamorado de la chica A —aseguro yo.
—¿Chica A? —pregunta con el ceño fruncido.
—¿No dijiste que se llama Addison?
— Si Addison, estos días la vi con Lexa y otros chicos más recorriendo el colegio —comenta.
—¿Y eso me interesa por qué...
— Eres un completo...
— Tranquilo amigo, estresarse hace mal y recuerda que aún sigue en pie lo de dejarte hablando solo —le recuerdo.
— Al menos aporta algo útil ¿Quieres?
—¿Cómo qué? Que vayas y le digas con ese abrazo me conquistaste, seria algo muy patético hasta para ti Bruno.
