Era de madrugada en el aeropuerto de Buenos Aires, allí se encontraban Pablo, Marizza, Mia, Manuel, Marcos y Lujan, Junto a Sonia y Franco.
-Que mal que mi vieja no pudo venir- Dijo pablo mientras se sentaba del lado de la ventana en el avión dejando a marizza entre medio de el y manuel.
-Ya vamos a pasar algunas vacaciones con ella mi amor- Dijo marizza abrazándolo.
-Que tan tristes ustedes que están juntos y mi novia esta tres asientos adelante mio- Dijo manuel fingiendo sollozar.
-Pero tenes a tu otra chica mexicano pelado- Dijo marizza y le empezó a dar besos en la mejilla
-Che che ojito eh!- Dijo celoso pablo mientras pasaba su brazo por el hombro de marizza para separarla de manuel y acurrucarla en el.
-Sos tan lindo celoso- Marizza le agarró los cachetes a pablo y comenzaron a besarse mientras que manuel los miraba divertido.
-Pasajeros en tres minutos empieza el despegue, abróchense los cinturones y disfruten del viaje gracias- Dijo la azafata desde los altavoces.
Todos se abrocharon los cinturones y en menos de lo que se esperaban el avión comenzó a volar, para así dirigirse a su destino, México. Iban a ser sus primeras vacaciones como familia, la que mas emocionada estaba era sonia, ya que antes solamente viajaba con su ciela bella y no exactamente por vacaciones, sino por trabajos y shows que le salían. También la que muy feliz estaba era lujan, era su segundo viaje de vacaciones con su primer familia, las primeras vacaciones que tuvo fue con marizza y marcos. Los chicos tenían una sorpresa preparada para las chicas ya que en tres días se cumplían dos semanas desde su reconciliación, justamente se habían reconciliado el mismo día.
Pasadas las doce horas de vuelo, que se la pasaron durmiendo, mirando películas, jugando a las cartas, escuchando música, etc, se encontraron en el aeropuerto de México-Cancún. Retiraron las valijas y se dirigieron al hotel cinco estrellas donde se quedarían.
-Bueno mis cielos bellos, me cuidan a mis cielas bellas eh!- Dijo sonia dándoles la llave de las habitaciones.
-Confiamos en ustedes de que no van a usar la habitación para otra cosa que no sea dormir- Exigió franco mientras los apuntaba con el dedo.
-Obvio daddy- Dijo mia, ella estaba segura de que no haría nada mas que besitos con manuel, todavía no se sentía lista para tener su primera vez.
-Confía en nosotros franco- Dijo marcos agarrando la llave de la que seria su habitación con lujan.
Todos miraron a marizza y a pablo ya que no hablaban y cuando se dieron vuelta los encontraron apartados besándose muy apasionadamente , franco caminó hacia ellos y carraspeó logrando que se separaran.
-En ustedes no tengo tanta confianza- Dijo sonia levantando una ceja.
-Hay mamá deja de ser tan rompe pomelos- Marizza sabía que estaba lista para tener su primera vez con pablo, lo amaba y no tenia dudas en entregarse en cuerpo y alma a el.
-Bueno toma- Dudosa, sonia le dio la llave del cuarto.
Se fueron al ascensor y comenzaron a subir hasta su respectivo piso. Sonia y franco se quedaron en el tercer piso mientras que los chicos contentos subían hasta el décimo piso donde se encontrarían sus habitaciones. Cada pareja entró a su habitación.
-Si esperaban a que no cogiéramos, porque nos dieron suites matrimoniales?- Dijo divertida marizza mientras se acostaba en la cómoda cama.
-Esta buenísima esta cama- Dijo pablo tirándose en la cama junto a marizza.
-Probamos el jacuzzi?- Dijo picara acercándose a pablo para luego darle un beso en el cuello.
-Dale, primero voy yo porque vos te me vas a gastar todo el agua caliente- Dijo riendo, le dió un beso en la frente, se paró, agarró ropa y se metió en el baño, dejando a marizza desilusionada.
Ella pensaba que podía hacer que pablo se diera cuenta de que quería curtir con el, sin decirle la frase que para ella era la mas vergonzosa, "Quiero hacer el amor con vos". En cambio pablo, pensaba que marizza no estaba lista, el se moría de ganas, pero no le quería decir nada, por el miedo de que ella lo rechazara o peor, que aceptara por el simple echo de que lo quería complacer. El necesitaba escuchar desde ella que estaba lista, no por suposiciones suyas. Marizza podía ser tan mandada, pero a la vez tan inocente que pablo temía que por una acción de ella el no se pudiera controlar y que ella se vea obligada a hacer algo que el tenia ganas.
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-Dale manu ya estoy lista bajemos a cenar- Dijo mia mientras se miraba en el espejo.
-Estas hermosa mi amor- Manuel la agarró de la cintura y la besó.
-Estamos muy cariñosos?- Dijo mia sonriendo entre el beso.
-Estoy feliz, es algo mucho mas lindo que estar cariñoso- La besó de nuevo
-Se puede saber cual es el motivo de tu felicidad?- Se separó y lo miró a los ojos.
-Vos, vos sos el motivo de mi felicidad, el estar con vos ahora en mexico, en un cuarto los dos solitos, que te parece?- La agarró de la cintura comenzando a darle besos en el cuello.
-Vamos manu- Dijo mia apartándolo nerviosa y saliendo rápido de la habitación .
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Las tres parejas se encontraron en el ascensor y se sentaron junto a sonia y a franco que estaban en una mesa dándose sus tiernos besos de recien casados.
-Hay niños en el restaurant- Dijo marizza mirando asqueada la escena de estos enamorados.
-Hay mi ciela bella cuando vos y pablito están muy concentrados con sus besitos nadie los interrumpe- Se defendió sonia.
-Ademas no nos podemos demostrar el amor inmenso que nos tenemos?- Agregó franco dándole un tierno beso en la mejilla a su esposa.
-Para eso están las habitaciones- Habló lujan divertida.
-Hay luji no digas eso mi vida- Dijo sonia alterada con su tipico acento venezolano.
-Bueno Sonia nosotros nos vamos a sentar allá- Marizza apuntó una mesa vacía -Es que sos tan insoportable que no se como franco te aguanta- Dicho esto agarró a pablo del brazo llevandolo hasta la mesa que dijo, dejando a sonia cabizbaja.
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Holaa, es mi primer historia, espero que les gustee!!